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Tarea1_Modulo 4_RodeliMerinoMarchan Aspectos Carol Dweck Rebeca Anijovich Currículo Nacional de Educación Básica 1. ¿Cuándo, cómo y de qué modo retroalimentamos? En todo momento y de manera oportuna. Otorgándole al estudiante un rol central durante este proceso. La retroalimentación impacta en las personas en los aspectos cognitivos y emocionales, hay que decirlo de buena manera en un lugar adecuado y con calma. Prestar atención a los procedimientos que emplean los estudiantes para ejecutar una tarea. Empleando Estrategias de enseñanza, diseñando nuevas situaciones significativas, para satisfacer las necesidades identificadas en los estudiantes. 2. Clima del aula (relaciones personales, interpersonales). Se debe dar más confianza a los estudiantes y debe ser elogiada con sabiduría el proceso en el cual, los estudiantes están involucrados. Debe ser de tranquilidad, no punitiva en donde el error debe de formar parte del proceso de aprendizaje, porque la retroalimentación que ofrecemos puede caer en un vacío. El clima del aula debe ser un ambiente adecuado, en donde la relación entre educadores y estudiantes genere una interacción positiva y entusiasmo para para generar aprendizajes, metas, ilusiones y ganas de estar en el aula. 3. Expectativa de los estudiantes. Los estudiantes deben de asumir retos para así desarrollen sus destrezas, capacidades y habilidades. Deben ser explícitos los criterios, los logros, los estándares de tal manera que los alumnos sepan que se esperan de ellos de manera que estos criterios y modos sean públicos y compartidos. Los estudiantes deben de tener la expectativa de adquirir nuevos conocimientos, nuevas ideas y siendo motivados lograrán rendimientos académicos más satisfactorios lo que redundará en desempeños de calidad y en construcción de saberes de excelencia. 4. Construir los criterios con los estudiantes. Construir retos, para revolver cualquier dificultad y así desarrollar su capacidad cognitiva. Debemos compartir y construir los criterios con los estudiantes en función a sus aprendizajes, es inimitable porque en el desarrollo de estos. Al construir los criterios debemos de tener en cuenta, de que deben ser claros y a la vez compartidos. 5. Oportunidades para el aprendizaje. Juegos matemáticos. Recompensando las respuestas correctas. Los estudiantes tienen que identificar sus problemas, sus fortalezas y sus debilidades. Ofrecer modelos de trabajo o procedimientos para que el estudiante revise o corrija. 6. Focalizar aspectos para la retroalimentación. Debemos de focalizarnos en desarrollar sus habilidades, poniendo a prueba su inteligencia, los estudiantes deben de entender que el error es una forma de aprendizaje y que al hacerle mejoras lo podemos utilizar en el futuro. Debemos de ofrecer información focalizando aquellos aspectos que sean los más relevantes y que tengan que ver con los procesos de mejora que queremos considerar, priorizando, jerarquizando y eligiendo algunos de esos aspectos para trabajar en la retroalimentación. Debemos de otorgar un valor a lo realizado y no brindar elogios o criticas sin sustento que no orienten sus esfuerzos con claridad o que los puedan distraer de los propósitos centrales. 7. Ofrecer ejemplos de trabajos para retroalimentar. A partir de su propia experiencia Proponer a los estudiantes que redacten un cuento, primero se discute que es un buen cuento y que no lo es; Podemos mostrarle, podemos traer una variedad de cuentos para que los alumnos evalúen que es un buen cuento y que no lo es, y podemos hacerle las siguientes preguntas ¿Cuál es un buen cuento y cual no lo es? Ellos piensan y deciden y el docente va registrando sus ideas. Estos los podemos utilizar para que los alumnos puedan autoevaluarse y también para evaluarse entre pares. Se le puede ofrecer modelos de trabajo o procedimientos para que el estudiante revise o corrija. 8. Valorar lo positivo y preguntar para generar reflexión. Esperar algo positivo para generar reflexión Todos los estudiantes y maestros hacen las cosas bien, primero se debe identificar aquello que hacen bien, aquellas fortalezas, aquello que nos muestra lo que el estudiante sabe para poder avanzar sobre otros aspectos; no siempre necesitamos como decir cómo hay que hacer las cosas, Consiste en otorgarle un valor a lo realizado, y no en brindar elogios o criticas sin sustento que no orienten sus esfuerzos con claridad o que los puedan distraer de los propósitos centrales muchas veces una buena retroalimentación es una buena pregunta para que los deje pensando. Tanto la valoración y la pregunta van a impactar en la autoestima pues, sabemos quien se siente bien, se siente reconocido tiene muchas posibilidades de aprender más y mejor. 9. ¿Qué esperamos que el otro haga con la retroalimentación? Desarrollar habilidades buscando su autonomía. Esperamos a que el otro mejore sus aprendizajes, a que la información dada perdure en el tiempo para poder ser utilizada en el futuro. A que le ayuden al estudiante a comprender el error y tener claro cómo superarlo para poder mejorar su desempeño. 10. ¿Redes de conversación: tres preguntas: ¿Adónde voy? ¿Cómo me está yendo? ¿Cómo sigo? Los estudiantes deben de tener mentalidad de desarrollo. Ser perseverantes ante las dificultades. El estudiante debe autoevaluarse durante el proceso, para así direccionar el aprendizaje. Se tiene que entender cuáles son los objetivos teniendo en claro lo que se va a aprender; evaluando lo que se está haciendo, que recursos necesitamos para mejorar el aprendizaje; siempre se debe de pensar en el futuro, buscando ampliar los aprendizajes. Este modo de ofrecer retroalimentación es un buen camino pues, se estarían formando estudiantes autónomos, capaces de tomar buenas decisiones, porque el aprendizaje es durante toda la vida. La retroalimentación consiste en devolver al estudiante información que describa sus logros o progresos en relación con los niveles esperados para cada competencia. Esta información le permite comparar lo que debió hacer y lo que intentó lograr con lo que efectivamente hizo. 5. Elijan uno de los aspectos analizado y escriban un ejemplo de cómo pueden implementarlo en su aula. (Aspecto 7) RETROALIMENTACIÓN A TRAVÉS DE COMENTARIOS ESCRITOS PERSONALIZADOS Comentar el texto de cada alumno, ya sea “a mano” o haciendo uso de la herramienta digital “nuevo comentario” de Word, corresponde a uno de los tipos más usuales de retroalimentación. Al emplear esta retroalimentación, es primordial considerar dos tipos de comentarios: aquellos que se encuentran al margen y uno más general que se incluye al final del trabajo del estudiante. Comentarios en márgenes. Los alumnos valoran positivamente los comentarios ubicados al margen de sus textos, pues transmiten la idea de que el profesor leyó atentamente su trabajo. Antes de escribir este tipo de comentarios, es aconsejable otorgar una primera lectura veloz a la tarea de escritura, de manera que tengamos una perspectiva global del texto. Así, luego podremos hacer los comentarios puntuales focalizándonos en aquellos aspectos que nos parezcan más relevantes, en lugar de destacarlo todo. Recuerda que los estudiantes tienden a agobiarse cuando el MSWORD incluye demasiados comentarios. Comentario final Agregar un comentario al final permite que el alumno tenga una representación general sobre el nivel de logro de su tarea de escritura. Este sintetiza en un mensaje integrado los principales comentarios realizados al margen y destaca las fortalezas y debilidades que desde una mirada global resultan más relevantes. En general, el comentario final o “comentario de resumen” considera las siguientes partes: Abrir con un saludo, como si se tratase de una carta (“Estimada Margarita”). Resaltar las fortalezas del texto, antes de señalar los aspectos que deben ser corregidos. De esta manera, se transmitirá confianza al alumno. Identificar las debilidades del trabajo del estudiante dando pistas de cómo puede mejorar. Sintetizar comentarios al margen que resultan más relevantes y hacer referencia a ellos, con el propósito de que el alumno comprenda la relación y consistencia que hay entre ambos elementos. Proveer de una guía para las siguientes entregas, de manera que el alumno comprenda los desafíos que quedan pendientes para la próxima tarea de escritura. Reforzar la relación entre escritor y lector, así el alumno sentirá confianza para aclarar cualquier duda con el profesor y sabrá que está interesado en el próximo borrador (por ejemplo: “Recuerda que puedes escribirme cualquier inquietud que tengas. ¡Estaré muy contenta y expectante de ver cómo has avanzado en la próxima entrega!”). Cerrar con una firma que te identifique como lector, por ejemplo, puedes poner tu nombre y acompañarlo de tu correo. A diferencia de lo que algunos creen, las retroalimentaciones por escrito no deben ser una edición del texto, es decir, no es apropiado indicar cada uno de los errores que aparecen en el texto. Por el contrario, te aconsejamos identificar errores recurrentes y hallar un lugar estratégico para motivar la corrección de aquel elemento a lo largo de todo el texto. Si quieres más detalles sobre las características de una buena retroalimentación puedes revisar el recurso “Retroalimentar tareas de escritura”.
