Preview only show first 10 pages with watermark. For full document please download

Cómo Apoyar Y Sus Consecuencias - Podologia Deportiva Angel De

   EMBED

  • Rating

  • Date

    March 2018
  • Size

    665.6KB
  • Views

    5,749
  • Categories


Share

Transcript

CO-302-016.018 podologia.qxp:Maquetación 1 30/10/12 14:58 Página 16 S ALUD [ podología ] Pronador o supinador Cómo apoyar y sus consecuencias >> POR ÁNGEL GONZÁLEZ DE LA RUBIA. Podólogo especialista en biomecánica deportiva. www.podologiadeportiva.com Si de cara a realizar una vida normal es importante conocer nuestros pies y nuestros apoyos, ese aspecto toma vital importancia cuando realizamos ejercicio físico y más aún cuando corremos. Para conocer nuestros pies o tratar alguna dolencia, lo mejor es acudir a un profesional. H HAY UN ASUNTO QUE TRAE DE CABEZA A CORREDORES, ENTRENADORES Y PROFESIONALES DE LA SALUD. Es el tan traído y llevado concepto de la pronación y la supinación, y eso es debido a que en muchas ocasiones esta cuestión no aparece demasiado clara, sobre todo si se parte de un estudio estático, que suele ser poco afortunado y menos respetuoso con el elemento más dinámico de nuestro cuerpo, el pie. Pronación o supinación Siempre que abordamos este tema la polémica está servida, incluso entre profesionales del ámbito podológico, y ello se debe a la extraordinaria complejidad que en ocasiones conlleva la biomecánica del pie, que a menudo suele simplificarse por desconocimiento y cuanto más investigamos sobre su funcionalidad más fascinación nos produce. Realmente la naturaleza ha sido generosa con el hombre al dotarle de un maravilloso complejo locomotor que nos permite realizar los más diversos movimientos y gestos propios y únicos del ser Comprobar, analizar como es nuestra pisada, nos ayudará a calzarnos mejor y a corregir deficiencias. 16 • NOVIEMBRE 12 • CO-302-016.018 podologia.qxp:Maquetación 1 30/10/12 14:58 Página 17 LAS LESIONES Las lesiones más frecuentes derivadas por un problema de mal apoyo plantar son: • Fascitis plantar • Síndrome de la cintilla Iliotibial • Periostitis tibial • Tendinitis tibial • Condromalacia rotuliana • Tendinitis Aquilea • Trocanteritis • Síndrome piramidal EL REMEDIO Diferencias entre un pie supinador, normal y pronador. LA NATURALEZA HA SIDO GENEROSA CON EL HOMBRE AL DOTARLE DE UN MARAVILLOSO COMPLEJO LOCOMOTOR QUE NOS PERMITE REALIZAR LOS MÁS DIVERSOS MOVIMIENTOS Y GESTOS PROPIOS Y ÚNICOS DEL SER HUMANO Tanto el Fisioterapeuta, el Médico Deportivo y el Traumatólogo disponen de buenos recursos para tratar la mayor parte de las lesiones derivadas de un mal apoyo, pero es sin duda el Podólogo Deportivo, el profesional que mediante la utilización de soportes plantares, “plantillas”, puede romper el círculo vicioso Carrera / Lesión, que tanto suele aburrir y desesperar al corredor. Igualmente tiene gran importancia la buena elección del calzado deportivo y existen zapatillas con diverso nivel de control de estabilidad y de pronación, que junto a la amortiguación dan como resultado una magnífica herramienta de trabajo. Seria injusto no citar la autoayuda que proviene de fortalecer de manera autónoma la musculatura del pie, tobillo y pierna, mediante ejercicios de propiocepción y potenciación. humano. Quizá la máxima expresión de la belleza corporal la representen las bailarinas, la fortaleza los levantadores de peso y lucha libre y la resistencia los corredores de maratón, cuyos pies soportan, una y otra vez, hasta 45.000 veces el impacto de éstos contra una superficie demasiado dura y uniforme, inventada por el ser humano, el asfalto. El pie es el elemento anatómico que nos relaciona con el suelo y a menudo tiene que hacer de intermediario entre las compresiones que recibe desde arriba, columna, cadera y rodilla, y por abajo, en sentido ascendente la respuesta del terreno. Cuanto mayor sea la capacidad del pie para adaptarse a la tensión recibida por estas dos fuerzas de igual dirección pero de sentido contrario, mejor será el pronóstico en cuanto a lo que a funcionalidad y rendimiento deportivo se refiere. Por ello podemos afirmar que unos pies bien estructurados serán el mejor seguro para controlar la aparición de lesiones. • NOVIEMBRE 12 • 17 CO-302-016.018 podologia.qxp:Maquetación 1 30/10/12 14:58 Página 18 S ALUD [ podología ] Un especialista debe ser el encargado de tratar las molestias del pie. Tanto la supinación como la pronación pueden producirse en los dos segmentos del pie, es decir, en el retropié o talón y en el mediopié o en el antepié, formado por metatarso y dedos. Podemos afirmar que lo ideal es que los apoyos del pie discurran dentro de parámetros normofuncionales y que a medida que se alejen de estos parámetros ideales aumentará la probabilidad de padecer lesiones. Por otra parte, si el pie no tuviese esta capacidad de adaptación al medio nos veríamos imposibilitados para realizar muchas de las tareas cotidianas, por tanto no siempre es negativo encontrarnos con un pie pronado o supinado, no debiendo limitar el estudio al segmentado de una parte de nuestro cuerpo, sino al integrado dentro del conjunto del aparato locomotor. La Pronación es un efecto fisiológico y necesario con el que el pie disipa parte de la carga que recibe en cada paso para adaptarse a las irregularidades del terreno. Si no fuera por ese movimiento pronatorio nuestros pies sufrirían continuas fracturas. El problema reside cuando esa pronación está aumentada por encima de los parámetros fisiológicos, en ese caso hablamos de hiperpronación, sobrepronación o simple18 • NOVIEMBRE 12 • mente corredor pronador, que consiste en un derrumbamiento del pie hacia la zona interna del mismo. La supinación es el efecto contrario, es decir, cuando hay una ausencia o disminución del efecto pronatorio fisiológico, ofreciendo un apoyo por la parte externa del pie. Las consecuencias El pie pronado suele llevar asociado un aplanamiento de la bóveda o arco plantar. Lo encontramos en la mitad de los corredores explorados. Es frecuente encontrarlo en los niños en su primera infancia, motivado por la laxitud ligamentosa que presentan, de ahí la importancia de tratarlo precozmente. Hablamos entonces de pie plano-valgo. Por el contrario, el pie supinado va a ir asociado al cavo-varo. Las tibias son una de las zonas que pueden verse afectadas por lesiones, como la periostitis. Se trata de un pie muy estructurado y con poca movilidad con una bóveda plantar aumentada y el tobi- pie ha de corresponder a un tercio del tollo hacia fuera. Lo encontramos en el 5% tal del ancho de la huella plantar. Para complicar un poco más las cosas, de los corredores explorados. El pie normal o fisiológico es aquel cuyo podemos encontrarnos con un pie que apoyo comienza por la parte externa del combine lo peor de cada casa, es decir, que tobillo ejerciendo a continuación una dis- tenga el arco aumentado y la pronación o creta pronación por parte del mediopié y supinación aumentada también, en ese despegando el antepié entre el primero y caso tendremos un pie bastante inestable segundo metatarsiano. El apoyo medio del proclive a todo tipo de lesiones.