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Maria Dolors Garcia Ramon, Anna Ortiz Guitart Y Maria Prats Ferret (eds.) - Espacios Públicos, Género Y Diversidad - Geografías Para Unas Ciudades Inclusivas

Descripción: tema de actualidad , la ciudad y el género

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MARIA ÜLORS GACIA AO, NNA RTIZ GUTART y ARIA PRA FERT (eds.) ESPACIOS PÚBLICOS, GÉNERO Y DIVERSIDAD ' GEOGRAFÍAS PAR UNAS CIUDADES INCLUSVAS . 1 e a r ÉNERO y SOCIAD Este libro ha sido mpreso en papel 00% Amigo de los bosques, poveniente de bosques sostenibes y con un proceso de producción de TCF (otal Chlorine Free) , p aa colaborar en una gestó de los bosques respetuosa con el medio ambente y económicamente sostenible. La edición d sr lbo ha como c un ayuda dl Gupo d vsrigació Cosoiddo d la nlirar d Cruya ( 29SGR- l2 l) Dio e la ubira: ia Olivaes Forogfía de la cubiera: Bridge at Frum ©Lu Mannig, bajo licncia (C BY 2. 0) rive os w.ck.co/phor/lunnig © Abl Ab i Mas, Ajand Aas Dí Mia Baylina Fé, Ca lia  Ma, Rosa aols Raíez, Aiada uculla i, C Ros Dlgado Aora, Fbi íaz-orés, Mª del Ca Díaz Rdígu, Bai Esrévez Vilino, uz Maia ací Ha, Mia olos acia Ro, Hnaa Hda-Sliba, mnio ua acía, Aa riz uirar, Maia Pr Feer, Iabl aa , Aa a Svi os pas  a imoducción y de los capírulo 1, I II , IV, V, VI, VI I VI I I, IX hn sido lboados po l gógo oi uch Coris. 1 y XII VI El pa l apírulo h si labado po l geóg Alns Pacias. © De a dición: Icia diroia,  a. A d Sam isrl, 1 1 - 2 3 8 Baclona w icaiaediroil. c iea eición: ocrube d 20 1 4 9 7884 -98 -5 1 4 ISBN: pósiro ga: B 2881 661 3 4 -1 2 orocpsició: Txr c po po ony/Vlls, s a Vdague, I , Capelldes (Bclna) rinted in Spain Impreso en Epaña. Prhibi  producción total o parcial ÍNDICE Prólogo, jordi Bo ra 5 Inrodución, Maria Dors Garci mon, Anna Ortiz Guitart  aria ats Ferret 2 l LOS NCOS . La Barcelona pe- y posolímpic, ¿un «model» para la regeeración urbana acual?, Abe/ Albet y ara Dolors arca mon 5 l . La Via Júlia de Nou arris: un esudio cualiaivo y de género de u espacio en Barcelona, Anna rtz Guitart arapúblico Dolors Garca Raon y Mara Prats Ferret 6 l . Género, edd y diseño en un espaio público: el Pr des Colors de Molle del Valls, Aradna Cucurel r i 77  énero, discriminción y subversió e el espacio públio: u proximación desde el barrio de a n'Anglada, b Díaz Cortés y Maria Dolors Garcia amon 93  eer el espcio público desde la experienia de la ciuadnía: el barrio del ercadl de la iudad e iroa, Isabel Samaña Se y Anna Serra Salv 113 PERSPETVAS RENTES EN E STUDO DL SPACO PÚBLCO V. otidianidades urbanas de a inncia y a adoescencia en e espacio púbico, Mireia Balina Fe"é, Anna Ortiz Guitarty Maria Prats Fe"t 133 y y la percepción VI. Mujeres, barrio en e de espacios de vidacambios cotidiana enuso contextos urbanos desvorecidos: La Romnica (Barber de Valls}, Ros Ceraro Ramírez, Fabi Díaz-Cortés, Maria Dolors Garcia Ramon y Antonio Luna García l 5 l VII. Tres espacios públicosy un deseo: usos e incertidumbres de os procesos urbanos y sociales Alejandro Armas Díaz, en e Rava Barceona, Anna Ortiz de Guitart, Luz Marina García Herrera y Mª del Carmen Díaz Rodríguez 169 IX. l parqe de diseño, a Mar de Barcelona: etre e ambientay e uso socia, Alejandro Armas Díaz, Carmen Gloria Calero Marn, Carmen Rosa Delgado Acosta y Anna Ortiz Guitart 18 INRODUENDO NUEVOS PARDIGMS Y MOOLOGfS PAR EL STUDIO DL SPAO ÚBLCO X. Juvend y heteronormatividad en e esaio púbico desde na perspectiva intersecciona, Maria Rodó-de-Zratey Mireia Balina Fe"é 209 X. E tercer espacio de as mujeres árabes ue viven en Barelona, Hanaa HamnSaliba 231 . Aruitetura, actos y consenso en a remodeación de la laza de Lesseps, Brais Estez Vlrino 25 l Presentación de los autores y autoras del ibro 275 PRÓ LOGO Jor di Borja ¿ De qué hablam os cuando habla mos de espaci o p úblico? Habamos de a ciudad «E espacio púbico es a ciudad>, segú Orio Bohigas Se puede vover a armació a revés: «a ciudad es espacio púbico». La ciuad compacta, desa, heterogénea, que oncetra diversidad d ciones, pobaciones y actividades es mercado, itercam bio de ides, pro ductos y serv icios, es cu tura(s y memori as, es mezca de ge tes habi an tes y vs ita es (según Wirt, 1938)  Todo e o «hac e espacio púb ico»  Si  esp acio púb ico e asetam ien to human o masivo o e s ci udad, no hay ci udadanía, etedido por una socieda de idividuos ibres e iguaes, todos o os m ism os der echo s y deber es. E ci udadano o ace, se h ace ejerciendo como ta en e espa cio pú b ico Obviamee a ci udad rea tiee v ocación ciu dadana pe ro o empre  mucho menos cumpe sta vocació par todos E es acio p úb i co si exst e p uede ser e xcuyee , p uede degraars e y ser  óspito, o specia izado  sta perder su n atu raeza src iaria (a ce subs tit uid a por a ci rculaci ón mecáica o priva izado (caes o rrios cerrados por muros sicos o ivisibes En a ciudad com cta se produce inámicas excuyetes roducidas por a fuer e os sectore s que ven en ea as por tu id ades de acu mu ació n de apita Ls áreas cetraes se terciariza, se monumetaizan y se l. Louis Wirth, «Urbanim  wa y o f lif. 4, 1 938 Amerian journal ofSocolog, 5 genr i can . El espacio púb lico deviene el espacio del poder político y econ óm ico. El es pacio d e l ci udadan ía se reduce a alguno s tiem pos y a algunos espacios, a mo men tos de ocio o de vida colectiva. Los desarrollos urbanos periféricos con ecuencia son urba nicidas, la ciudad tiende a disolerse en las periferias, el espacio púb lico es escaso en ca nt idad y pobr e en produ cción de senti do. La pri atiz aciónsocial y la margin ación so n dos c aras den la m isma realidad: segregación y la especialización ncional amplias zonas la de las r egion es urbanas actuales el espacio públ ico ci udadano no ha desaparecido ni se ha degradado, simplemente nunca ha existido, sin pasado ni presente. El urban ismo tiende ho a ac asar an e el de sao del éc it de es pacio público ay un a responsabi lidd de la cul tura urban ística, pero tamb ién de los pod eres políticos y económ icos. os encont ramos pues en nundi momento Las dinámicas co nám icas dehistórico sentido con trario. Nodisolentes s referimos se a laconontan s resistencias sociaes y culturales que hacen del espacio públ ico un derecho legítim o socialm ente au nq ue no sea r econoci do en el mar co legal No se trata únicame nte de defender espacios de uso colec tivo próxi mos, como un equi pami ento más Es im rtane pero no es lo ún ico im rtante. Hay una con cie nci a di sa de que la presencia ma sia en el espac io públ ico es una condi ción ndaen tal de la super iencia de la democrac ia. Es don de ncia se rjan cia les, ndas colectivas, se toma concie de loslos der so echos comemergen partidosdema , se expresan aspi raciones de mayor justic ia e igudad , se combaten los pri ilegios y l s represion es, se construyen esperanzas de turo Epacio del poder versus esp acio de la ciudadaní El espa cio pú bl ico es histór icamen te el esp acio del poder , polí tico, militar, religioso, económico. En muchos casos eran espacios rey serados y excluyentes, ostentosos y controlados. Grandes plazas aenidas cuya toponimia ya indicaba quiénes tenían o tuieron el poder. El espa cio pú bl ico del poder era a la vez metá ra o sím bolo del pode r y ám bito dond e este se ejercía y se expr esa: concen tracio nes plebiscitarias y represión social, desles militares y procesiones de la Iglesia y e jecuci ones real es o simb ól icas de los desian tes o oposi tores. La dicta du ra anq ui sta en los años cuarenta, e incl uso más 6 de, solmen e per mi ía cualqui er acivid en l espac io públ ico,  cl uso un a cara en re má s de re s persona , s i esaba auorizada   a poic ía. I nc uso muero Franco el mi nisro de In erior , Fra ibarne, que asa su reciene esaparición e presidene de no r del P, acua  parido gob ea ne, dec aró « La ce e s m ía . ara e poder poíico e espacio públ ico deb e se r exr emadamne ado. En los Esados bruales, en os  democ rcia rm a porauoriarios medios m pr ás inmedios di recos. E espacio púbic o es ambién un espacio e onóm ico, donde se aiza e comercio y a publicidad, donde se siúan y se exponen  empresas y se ace negocio inmobiiario. E espacio púbico a i fca os enornos consru idos y los suos vacan es, los valoriz a y ece grandes opor un idade s espe cu aivas. L ci udad cua no ms mpe ja ás ci ia a ci rcuac ión de capia , más op or u ni dades  crean a espulación. Acuamene, inuenia de- d e as m in anpara e de capi a f nan cier o, la ciudadbajo ha adeveni do una  inipaes enes de acumuación de capial. E espacio público viene mercancía, se privaiza como Times Sqare en mans de upo Di sn ey. O se diuye en re orr es y vías más o e nos rpi das , o e pierde en as perierias. E comercio, e mercado, cnribuyó ciivame ne a que emergiera un espacio pú b ico como e spaio de o coecivo. Acu me ne e carác er especul a ivo de capia is mo  nanciero cuy a yógi ca coroiza pacisa es propúdubciico r diynero de  nro de grda m iserabi e e spacio a a apor rgamedio con leva a u pogresiva dis ouc ión como e á mb io más real de a democr acia. l cpial ismo puede crear ci udades e ro no as puede an ener» ci bi ó H arvey. 2 E espacio pú bl ico es am bié n, y an e od o, espacio d uso co  tv , ib re, heerogéneo, m ul in ciona , convivencial, in egrador, gad o de sen id o, de memoria , de iden idad. Proporcion a bienes y vicios a los ciu dadanos y perm ie pro mover a redis rib uci ón soia dia ne rmas de salario i nd ireo (ocio, cu lt ra, elacion es socia . Te Urban Roots fCapitalm isesm be/ ies, Vrso 0 1  l ex d rvy itad s nunra ambién n udas. un a cuación iposible, de  i  rja Cor ti , ediores, Icria 0  2 En este l ir clcivo se n liza la urh ació n cmo p ricip al ámb ito de cum ulación de capi a. Vr cotriucione s de D. Harvy, M. Ce, J M Nareo, J. Borja y r 7 les, intercambios de ideas y serviios, vea ambulante, seguidad coop eració n, movi lidad , etc. ). En el espac io públ ico los ci udadaos se recon ocen m utuament e como tales, suje tos de der echos, l ib res e igual es. En este espacio se af rm a a la vez la in divid ual idad de cada uno y la exi stencia de una com un idad de pe rsons qu e ma tienen a la vez laws soli darios e i ntereses y valore s contradi ctor ios. El espa cio público es elexistentes. ámbito de expresión política, a vo o en contra de los poderes L lógica de l pode r polí tico es el con trol del espa cio pú bl ico para regular el n cio nam ie to de la ciudad y pa ra pautar el com portamie to de la ciudadan ía. Es una lógica d e somete a los ci udadanos al poder polít ico La lógica de los poderes econ óm icos es sacar el mayor benefcio del espa cio públ ico com o elemento de valoriza ció n, omo potencial privatizador, como medio de excluir a las poblaciones y las activi ren tables, co mo convert ir en merc an cía todo lo qdades ue bullque eennoelsean es pacio pú bl ico. En cosecuencia, el espacio público ciudadano es un espacio de conquista permanente La ocupación del espacio público a veces puede ser una concesión del poder político, pues se debe a sus electores. En otros casos puede ser resultado de un pacto on el poder económ ico en el que part icipan poder es públ icos y colectivos ci udadanos. Pero casi siemp re hay mome ntos d e i niciat iva poular  de acción hacer que colectiva devenga conqu público. istado ra, de us o social de un espac io para El espacio público se conqusta El poder político se arroga el méito de crear o delimitar espaios públicos y el derecho de diseñarlos, gestionarlos y controlar su uso soci . La exprienc ia de Barcelon a de los años ochenta y ovena del L siglo pasado raón apropiaión estrateg ia des espacios públparece icos edar unola de los apresta in ipales c tores de u nas política públ icas qe obtuvieron un am pli o cons enso ciudadano Cre o que ha habido una «teo izaió n» a po sterioi  En 1 980 el Ayun taiento de Barcelona no tenía dinero para invertir, o muy poco. Pe disponía de suelo adquirido los años aneriores po el Ayuntamiento de la Transición. El planeamiento vigente de eonces establecía que el suelo vinculado a actividad económica si cesaba este uso solo podía 8  vert irse en equ iai entos soiales o u turaes o espaios úb ios . Hb ía una dema nda en os barrios de e qui p ientos ol etios y es pa  abiertos. Crear espaios pú b ios era reatiamen te barato, isi ble y de ejeión ai in mediata, en  omar aión on o nstrui ón o  iitaión e iien das o grandes proyetos de in aestrutua. Los  arátr má o al o ba rria  en ayor o meno r grao di eron  ugar a  i ertoesdiáogo on os opues tiosossi Fu eron u nas lacion no sie mpre ies eiesnosdetendistri ían to. razones propia e o omp artía os diseñ adores o os responsabes muniipaes. Los  yetos que se onsideraban de «interés de iudad» los eaboraban  los enargaban os equipos poítioténios on superisión de ieo de la iudad. En este as e debte se aía en a resa y  la patiip aión de tors profesiones o úpua s e as entidades les pero o ees egaba a los barrios afetados. 3 ero hay tene rde en os u enta os pantearon preden tes. os m im ientos de aque déada setenta reiindiaiones  uares banas diersas: iienda, transportes, remodeaión de barrios, uipaientos íios, et. La defensa o a reaión o mejora de aios púbos e una de as prinipaes deandas, tanto en ios entraes omo periférios. os ayuntmientos eeidos en 179 eron snsib les a esta rei in diai ón y en el as o de Bar eona ta «estrat egia» e mu y pote nte espeia e ne a o argo de to da a ada sigu ientransrmadora te.4 Sería si n em exesio ons iderar qe había a estrategia debargo a iudad por medio del espaio b lio La teori zaión e a po sterior i,  ubo estrat egia omo sin er que a haíamos, oo e burgués de Molire que hababa  rosa sin sbero. Pues iertamente a uaiaión de espaio Huo xc epciones r jep l n l a concre ción y ejecución del pryc o  s Rndas n zonas pop lars Ls lctivs so cies o as ciaie s aris guin que se genraran spacios públics d caida, co Nou Barris tura de la ond) o en Sana Coloa d Ganet (Parqu n la a e) 4. l plouisa jea ntns d sposal d política uiipal y  i i ppulars dl PSUC Este patido  el sgund más votad en l a y n atalu fa y l p imr n l ra t rpoli tan a. 'Inía dens  e  días y n trs ca s la responsai lidad d ur ban ism n alcaldes  ci ali stas. Us ía dpus d las leccines n ié  n mensaje a div eos agos públ is: «a  pa ejr hacer pla que pl ane s» 3. 9 pú bl ico con tri buy6 cons iderablemen te a mejo rar la calidad u rbana de zonas decitarias, degradadas o ma rginales como exponen A bet y Garcia R amo n en l a obra que prologamos. Las referencias al caso de Nou Bar ris , q ue so n ecuen tes en este pr6logo y más aún en el conjunto de la obra, es debido a que este conj un to de barrios er an probablemente (j un to con los del Bes6 s) los 5 Y másbarrio m arginado s yguardia deci tarios todapopul la ci udad. tambié los s de van de la dlu e cha ar u rbanaero en losn sete nan y los que más capa cidad han tenido de reivind icar y negocia r su partic ipa ci6n en las acuacione s púb licas del perí odo democrático. De l a conquista a la despose sión del espac io pú blico y de la ciudad La estrat deldebido esp acioa pdoúbls ctores ico ha t enque idon un erto éxito en en las ot ci ros udades eu egia ropeas o seci encu en tran con textos Uno es qu e en gran pare de las ciudades compactas e xi ste un a relativa mezc la de poblaci6n y solame nte algunos barrios o z onas son m uy homogénea s socialm en te. El otro ctor, muy vi nc ulado al ya ciado, es que la desigualdad e s me nor q ue en otros c ont inentes, o en todo caso los setores populares tienen un nivel de solvencia mayo . Dich o de otra rm a, en las ci udade s americanas , del no rte obajos del sur, hay unnomayor a lademezcla sectores i ngresos tienenrechazo un nivel ingressocial os su yclos ientes para de contri bu ir a la mejora del entorno  La estrtegi a del espacio p úbl ico en estos contextos y el efecto transrmador del entorno tienen una ec aci a mín im a excepto si va a compañ ado de otras medidas sociales y econ6m icas. En todo caso no hay que me nosp recia r las actuacio nes 5 E rex in icia de Ab y a cia Ramon si eri my bie n l •ecro spaci púb ic» e la expeiencia acelona S ag aece qe n insi sran en cai fa de •mode» A conin ación C r iz  Gaca mn y Pars anai an n cso i esa: la emelacin   a Via J úl ia (N Bai q   aiz  re 1 983 y 1 98 es deci en ls pimes as  la cacia e cnviri n aud inhspi  n pae ci aano y gen eecrs rans mad es n s on (cmcis, sa ación e chada � er  6 Véas N ais de la maginación  la cidadanía en Uum  i mb  /'urbnsme, J ja Bacna (21). Y Gent de Nou Barrs 1897-2007 e Maia Iglesia  y  s (Aj nrame d Ba celn a, 2007 ).  Je gencia pues se raa de cubrir neesidades básicas. La mejora   espacio pú b ico siem pre ie e un e feco posi i o, a pesar de sus    iaciones y e posibe efecto amada, pues hace a esas zonas o   i s más isibes, más equipados y más reonocidos. ero adems coniene también reaiizar e efecto de espacio  l co en nuestro s conexts. La mejora de a caidad ur bana de u na zoa narehabiitación mediante es pacios púbicos y e qu iamie os, ao accesibi de etoo construido y a creación e rer idad   o de cenraidad es ge nera moim ientos de poba ció n q ue a d  pazo pueden exu sar se ctores de bajos in gresos sus ti uidos   ueos reside tes (gentrcation), aciidades ter ciarias de n ie  o arac ció n de u ristas. s e eco pererso de una estraegia exitosa. Se desarroa  a actu ació púb ica d esi nada a me o rar a ca idad de ida de u n   o deciario en el que a na una poítica poba ció n de niicaedemá so o s bao . Pero debido a ahabi ta de púb sueo y vienda ecaz e mercado iende a expusar a a pobación a a   e quería por ra zones de justi cia be neciar. Apa rece eo nces e  i mi ento de desp osesión . Los abitantes se sieen presioados  enaza dos, au ment an os c oso s de c on sum o, e  comerc io y os vicio s subs ituyen a os an tiguos para aender a a s n ueas poba es sea re siden es o usuari as, sabe que si no e os s us hio s será n u lsados de o a suypes equeñ o para espa cio púb ico eo  icio de ua n que ueaerida ambién e íso.na.E Cambió e eno   ero, más ta rde cambia a pobación ant igu a subsi u id por otra s slente que emerge y cuaica os espacios púbicos. ¿stos procesos perersos son eiabes? Se pueden imitar ia nte ac tuaciones in egra es pa ra mejo rar e n ie de i da de a lación y esp ecialme e po r medio de promoción de iiedas iales o pro tegidas y por e uso intesio de os esp acios púb icos 7 cios para residentes. Sin embargo po  marco egas a ypobaciones sca q ue cont roe os precios y os usossin deun sueo 7. Vés ls jplo qu s xpon  la ba polgada dl Rav d B la d Amas Otiz Gacía  Día y dl baio M cada dl co hi órico d Girona d Salaaña  era. l prlguista ha analia el feo  L  possió»  l capíul   «El uraniso  su lis»  Rvlucó ubana  drehos ciudanos, iaza dioi , 20 1 3 1 1 y u a redu ió de las desig uald ades soi ales las er zas del m erado tie de  a exluir a los se tores de bajos i greso s de las á reas u rbaas de al idad urbaa o qui stada. 8 Perspectiva de género: una visi6n má integral del espacio público No deja de ser urioso que los estudio s sobre la i udad y la s polí tias urbaas ha teido e uea hasta ua époa reiete a u tipo de sujeto individual que representa a ua mioría del ojunto de la poblaió : el adul to masul  o, hete rosexua, «ab e de mi lia» (se da por sup uesto que el resto no tie e cabeza) y ativo. Las m ujeres, los niños/as y los/as adolesetes, la gete mayor, las mi orías ul turales o sexuales , o era tei dos e ueta. Y si e mbargo e el dise ño de la vivieda eos el tipo de los etiva qude ipami etoseo emuy  lasigi oep ió a de loso espaios pú , bli la perspe gé ero fativ (om las otras at egorías i tadas). Aú hoy la perspetiva de géero se osidera e la mayoría de textos o planes omo u aspeto espeífco mientras que la persp etiva masuli a es la or ma o geera .9 Es obvio que las muje res o «ve» el espa io públ io de la mis ma maera que los hombres, iluidos los plaifadores o los diseñadores masulios. L mayoría de los trabajos itados lo expoe pertam te Pero ume aspeto pal ibree pues o se e expoe habhay it ual te y que sí eme este ro más las mi teresa ujeres sote a ley de barri, que se cia en diverss abajs dl libr, ha sid una actución fca, j uici ra y am plial , una d las mejre s acuains d los  o iernos r risas d e la Genral ia (2003-20 10) . ame alemen e ha si   echo supe ni a pr el acal gbiern de Ca al y  Pr sus eec  pi i vs para la blación aecada n 1 imi ad  eid a n di pner e recur  uf cies y pr el muy bajo n ivel sic y s ocial de las siuaciones críica n las que se ieviene Se mejran las conicines d vida para cnsuir uns mínims que no son ufiees para simular la aación d plains  acividads nuevas y disi a  El proluisa paricipó  ua ea re donda qu raizó la di rcwra dl I nsiu e la Muer s re La iudad y la perpeci va d génr e l a Uni vridad Me nn  Pelay e an nder ver n  d 95 Mi i  ervenc ió  « La ciu ad del r erá eminia» se publicó en rma de arcul en El País ( 1 1 -8 9 5). Varios amigs y colas míos me comearn: irmé a mi mur Per ningún cmari, o l leye rn 8 12   o más sensls que los homrs a l rquermenos dl es o pú l o de n ñ os, adolesentes, personas mayor es et No es   al q ue el t raajo reerdo a n ñ os y adolescen tes de esta o ra lo  reali zad un equi po exlus amen te men n o 1 0 La mi rada de  m ujere s es más u nversals ta que la de lo s h om res Ivntar espacos públcos en la ubanzción sn cudad r ci udad sore la c udad y crear o rerma r esaos ú lcos   tj do u rbano denso puede re s ltar  ees om pl ado por la lejdad del lugar pero no es diícl onceir el proyecto Nos r mos tan to a cntros históros omo a ar rio s on hst oria  Es  t to cuando se trat a de uran izacio nes en la nada o de sarrollos nos relatiamene recientes que han desordado y sumergido  ndúleos uranos pree ompacto x stentes En o arrios rgnión alessndescone  el n úleo urano la ura m nc c iudad ta el o p ú lio es a la  ez ms nees ari ar a orecer la  ntegra ci ón ddana y es ms d ícil de re l zarlo efcazment e por lo men os a rt pl azo En la o ra que prologamos apareen do s asos de este   n Molle d el Vall y n Bare r del Valls   Una rm a haital de inular u n arrio marginal a la  udad, r l aso de Mo lle del Vall s, es generan do un proyeto qu e dote  rr o de elele mentos d «c entralida », q ue marque s m ólament d trrtorio, de isibilidad y reconocmento, identidad propia e to a la c udad mad re y al mi smo tiemp o que sea a ccesil e y  da atraer al resto de la c udada nía Hay casos ms complados, omo el de Barer del Valls, d el arrio est muy desconectado del núcleo urano y al o te mpo se a creado u na uerte ien idad om o resul tado del  o de produc ió n social del há tat, como es la au toon str u pacio  viiendas o sericios ásos unaespacos erte apropaión  particular y coleto proHay lan púlicos de ad y or lo mnos un eje potene que les una on el núleo  ! d el mu npo.  O Vr txt o Je Baylina, O niz y Prats. 11. Vr los exs J Cucurlla y J rarols Dí-nés, Y Luna ;arcia Ramu 13 E ambos a sos a re ació en re a adm iistració p úbl ica, os equipos profesioaes y os habitaes de os barrios e os que se iterviee es especiame e impo rate. C úa o más pr obemát ica es a si uació más ecesaria es a participació  activa, recoocida y muy te ida e cu ea de a pobació por med io de sus asociacio es y de sus i dera zgos rmaes o i rmaes. Y, ate odo , gobera tes ycomportam técicos debe acumuada y as pauts de ie toasumir propiasa dexperiecia e estas pobacioes. El retorno a la calle «La cae o es u a carretera » escribi ó I de s Cer d. Ls caes so e espacio púb ico y as p azas que os e trecruza o so adya cetes o so su compemeo pricipa. Las caes ordea e barrio y o vicua as áreas y os otros barrios. Lasr, caes cii-rar y a  a moco vi idad peroceraes so ambié ugares de esa de eco de ver, de acceder a os comercios y a os servicios, as caes so e espa cio de « e ur» , e ciudadao pasea e de Baudeai re Desde a ca e d ivi sas a s chadas, as vi rias y as casas. «Araves ar a cae para sair de casa» escribió Pavese. Y Josep Pa armó que «o que más me gusta de as ciudades es a gete e a cae». Y como dijo Corár u puete es u a persoa pa sado por u puete. picado a pú be icoassecaes pueded decir a ci Esudad e s secae, ciudade soespa ascio getes e a cique udad. dode ha ceaprese  a ci udadaía, i divid uamee y co ecivamee. Por o tato a cae o se puede r edu cir a u a soa  ció , sea a movi idad o e acceder a os edicios . Impo rta pues su diseño , su reació co os eoro s, sus posi bi i dades de mú ti pes y variado s usos Hay caes bie diseñadas e barrios ecesiados de bueas caes, como a Via Júia ya citada o a Ramba Prim, eje estructuratea Fórum. y paraeo a Besós, vía ciudadaa ega a 1 2 E zo cambiaoúica hay oras caes queque termi a bie  maa como 1 2 Rambla 'rim sr la as cietos omportaientos (moicar el recorrio para evitar paa  terminada calle, peir a algún amigo que no acompañe caa y, (Bodi hata, limita r n uetra998). alid a nocturn a) par a entirn os hta y Domosh, más ura gua geógra feminitas han etuiao la egura e    re en lo epacio público y hn emostrado cómo las   ía coidiaa e lo hombre y la mujere on totalmente   �   e lo que repecta a los etilos de via, la movilida y el   tamiento en la ciuda. Aí, por ejemplo, e ha oberao cóo l mujere  retri ngen a meu o us m ovim ien to por la ci u 27 dad con el n de minimizar su percepci ón de mi edo en ls espacios públicos (Pain, 17; Oliver, 2006. Según Valentine (200 1  , la percepció n de m iedo de las m ujeres en la cale est á estre cham ente asocia a con las perc epciones de as personas q ue ocupan el espa ci o y las que lo controln. El miedo, añade, está asociado al desrden y es por eso que los gratis, la basura, los grupos de jóvenes o los in digentes la calle cont rol en elenesp acio. pueden ser señales que repr esenten a  ta de A pesar de que, c omo se ha i nd icao anteriormen te, la ciudd ha dd o l oportu nida a gays y esbinas de expre sar más i bremente su sexuai, tiene que decirse que, todaví hoy, en el sigo XI, estos cole ct ivos suen a m en uo aco so y agresion es en los es pacios púb icos cuando man iestan públ icamente su afectivi dad. or mieo a os abu sos homof ób icos, las m ujeres y los ho mb res homosexuale s son rzados aesconer meiante minimizano máim su o elsexulidd ti empo que pas an a enautocensura, espaci os het erosexuale s y escogieno, para su socia bi id (y vi sib il ición) , espaci os homosexules. No psa lo m ism o uando se muestra púb icame nte la afectii da , la am istad o e deseo hetero sexu al , y que es is to y aceptado com o algo « norma l», hecho que m uestra hast qué grado el espcio est á sexualizado y, más especícame ne, está «n orm a men te» heterosexualzado (Vlentine,  93: 2 3). Han sio las autors que,el desde feminista, han muchas reivindicado inuir en diseñouna y laaproximación plnicación para promoer un a ci uad no sexista, hn rei nterpr etado el espacio urbano des de un p un to de vist a e géner o ( Bond i, 18; Hyden, 81; Sandercok y Forsyth, 2000) y han estudiao cómo l pl nicación urbna loca y regional abora la ilencia contra ls mueres en los espacios púbicos, semiprivados y privados (Sweet y Ortiz, 202. Agunos de os estudios referentes a cmpo de l pl an icació m uestran e l diseño os espacios pú bi percute más nsobre l vidacómo cotidiana de asdemujeres que sobre la cos de re los ho mbres. La via cotid iana está con ectda con los l ugares don de as muere s y los homb res viven , trabaja n, consu men , se re lcionan con otrs personas , constr uyen i dent idade s, hacen e nte a la rut ina o la desaf ín . El ba rri o se con gu ra com o un a de las es caas sociales y espaciales más i nteresante s para exami nr el papel de las mujeres en  org an ización e las act ividades coti dia nas propias y a de sus 28    , pei tiendo capta  tab ién cóo const uyen su se tio    enencia a ba io (Vaiou y Ly kogia nn i, 2006)  En España, ag unas de as on tibuc io nes s is e inuyentes   de tabajo y a  eexió n e aqu itectas coo Sánc hez d Ma d r ia g (2004) y Anna o  (  998 y 20 1 O). Si pati os e a bs e de    ci udd es sexuda y sexista y q ue, po tant o, e espacio pú bico 1 0  stica eo, y povoca desiguadades, toda poític decea beíajeaquías ap ica citeios de gée o en e panea ien o y e    o de pais je ubano . Según Bo  (20  O), os c iteios de géneo   n uase a pati d e un visi ó de a ciudad ho ística, d onde s e  an que tene en cuen ta tan to os es pacios doésticos coo ls  unitaios y coectivos; tant os aspe ctos de a i nsegu iad y e  coo os e acion ados con a  ovi idad de la s esonas; tanto las iciones de v ecin os y vecin as coo as po ítics u baas, e ne  pectos espacio no e s neuato, de itecta: aqu í a necesidd de inc deros e o en e E ubanis o Según qu ui  [o] no qu iee deci consi e a as  uje s como un coc vo de pesonas co desventajas  diseña paa eas poíticas itnciaes; quiee deci desvia e punto de vista, constui  evos azon a ie tos y n uevos objetivos sob e e e i sico e e que v ive a ci udadan ía ( 20 1 O: 77) , po eje po , agu os cto es de panea iento y d e diseño   ede peven i a viencia y os e i tos ubnos pu iactivia d,    ó n y ez ca d e equi amienos y de tipoogí de viviendas, dad y ecua e os itineios, iuinación de os espacios o, diseño y distibución de obiiio ubano, estado de  vaión  aneniiento de os espacios púbicos, espacios     dios d e uso c om uni taio, e ne otos En eMux  iso  ybide to pofeio cita én e tabajo Z a (2012) coectivo , en abe e que eatabi paticipa,      i Pun  6,  ado pi nci paen te o aqui tectas y ub      e en os út ios o s han organ izdo n u eosos taees y i0r a<s con e n de i nopoa  a pespectiva de géneo y fe inista  l o   dio s  pácticas u banas paa pode expor  as pob ti     id ades y dese s de  uje es y ho bes de di feen tes eades  a  n o vas et a , 20 1 2; Gutié ez y Cioco eto, 20  2)  >, Gende P/ce and Cutre v. 1 4 (3), p  267 -292. 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Abe y Ma a D  Gaa R am n n l 999 he Observer p bó un atí u, cn e títu «Cataa n ool  ue B tan n a» , qe ecaab aa capta que «enema qe ebe limwhmenaje a Cataña, Bacena, de a se e ó n españa , se cnvetá en el mdel  paa ez  d ades apn tes de R en Un »  Según e atí u , e a q tect  S Rg es on deaba q e Bace n a ea n  e l s ejem s más  nteesa ntes de a egenea c ón e cent e  a cuda en e m und c cen ta aa en e  nfme pv sna  de  a Uran Tk Force, un estu e equeía edseñs aaes paa egenea s cents e as rande s cddes e Reen199,  Und . Tambén en jun Bacena ebó n pem n enacna muy mptante, a Rea Meaa e O, tga nuamente p S Majestad a ena Esabeth a ppesta e • st captu s un resun d la councacón pubcada en ra d t: be  Abe   arÍ a aon  Mai s (200 1 ) «Th pow r f nn ig Urban sttgis sc i a ira on and cit zns hp i n Bac  o n s Fn  Sick. n '/bwards a dical ultual ageda Jr Europen cities and gins Ana-anica Kriids  th Pubishi  Hus; p . 1 05-1 18 'mi xist u a s ió á� rdua ubicaa n arcía Raon araDoors  Albe bel (200) «P  pic an d pst- Omp ic arona a  d r urb an gati today?  nvironment and nning A , 32 (8); p. 1331-14. Esta  nvti an ró parte  prc d  nvsti ación « Gegra fía, gé   vida c td ana: n rvenio ns anas  interación si», 2001-203, Miisti de incia  'ía S0200 479  cntó co n a ayuda a s G  ps d I nvsti ación s ids  a enraiat d C aaunya (2002S R00049) ' 51 Royal  ns tit te of Brit ish A rchitect s (RIBA), qe reconoce la dist in ció n excepcio nal en la arqitect ra. Po r pri era vez, el preio e otorgad o a n a ci dad , aplad iendo as í s recie nte tra ns raci ón coo ode lo rbano y pol ítico, y an ian do a los r esponsables d e esta trans rac ión a seg i r con sus pla nes e t ro (El País, 1 999; Mad in Barcelona, 1 99 9). Y enconvocar este proceso en espiral, Ayntamiento Barcelona decidió el prier FóelUniversal de las de Cltras en 2004 qe se llevó a cabo a orillas del ar, en n sitio e nev constr ucción qe re sl ó e la re zon icación de es ta zon a. La págin a web del Fór e 2004 ecía: En 2004 toas la s voces, len gas, religione s, toas las c lt ras el  ndo se e nián para hablar s ob re la diversia c lt al , 2004 las condiciones págin a web) e paz y la cia sostenible. (Fór Es cier to qe el balance glo bal de la s tan s racio nes rb anas qe han enio lga en Barcelona rante los años 980 y 990 (i p lsada s po l a cel ebació n de lo s Jeg os Olíp icos en 992) es  y posit iva y para  chos consti tyó lo q e se llaa el « odelo Bacelona» paa el diseño y la gest ión rban a (l País 1 999 )  Peo ién es ciert q eeece existenlas obas relacio naas con este po ceso otab «oelo» a las oqe pena presta atención, sobre todo a pati el 2004. Tatalo coo n «oelo exportable» poía ser contrapocente. En lga e n modelo, seía ejo hablar de la «experiencia Barc elon a» . Paseo s ahoa a e xai na r algnos aspectos de este p roceso. L evoución urbana de Barceona y e pap e de los eventos internacionaes Drante el últio siglo, la historia rbana e Barcelona ha sio denida por iporantes eventos internacionales qe han tenio lgar en la ciad Las Exposiciones Universales de 1888 y 129 peden considrarse hitos, ya qe provocaron cambios draderos en el iseño rbano e la ciad y, adeás, llaaron la atención ine aciona l. Los Jgo s Olí pico s e 1992 tabién se peden 52   s s pno d vsa, a psar d q las crcstacas y l   m o h stórico ra d frs. En calq r ca so, l ac o c  o dport vo d 1 99 2  n a xcsa prfcta para n a transmac ó a do d la c dad,  cabzada por Pa sqal Mara gall ,  ars áco acald d s príodo ( 1 982 1 997)  Para pr, la   ro áras obsolas o a rg nals do d s clbraron los j gos s odlaro aot y s abri ron al pú Ol bl co ás con crta  , la zonaadlplpas arít o d la Vlla ípca y l pro  laro l accso d la poblacó  a n a vasa xs ón d playas m ás, s cons truyron  as  asr cras bás cas y csarias o se lr ó s c onstrccó ( ssta  car rtras  crcn vaacón , la tsón l  tro a rhabl tacó dl ca sco at go ,  a apr ra de ls spa cos pú bl cos   chas zo as d la ca d) , ag nas d s cale s ya s había  plaado  cho as La cobrtra  d  l acotcinto ra ás fác para l Ayntato  Barceloa rrhzo a lasq dfrs adstracos públcas (a vl rgioal y nacoal) para cooprar y ancar n proycto u  s llevó a cabo s n scándal os  corrp cón n da s. D sta mara, los Jgos crraron el príoo oscro  la hsoria local  r prsn ó la dctadra an sta El vnto rnacoal  2004, l Fór Uvrsal  las ltras, raba part d sta sratga q dbía transrar l cotxtoypostdstra> dsgún Barcloa cdad dl coocio la inracó», dcíanl «na alcad d ntocs a Clos), y  bía hacr a través d n sarrolo coóco tclao por la vrsón n bns nmbls, l trso y la dstra c lt ra. l Fór s l lvó a cabo  n u ára   a pla ya costr a q n p rnc io s eb ría cost t ir n  copar q  ara jplcar a sostbldad rbana. Pro al so tpo, llo i pl icaba  a gra op ració n obil ara, y por lo tao  oycto  cho ás ab coso q l d la Vlla Ol ímp ca. El pap el de los espacios públicos y la cultura local  la transfr maci6  de Barcelo a rat las décads d 190 y 1990 os bjtvos d tgracó baístca, cltral y cdaaa vn  las ntrvcons sobr os spacos úbl cos n a xct r a d llvar a cabo las pr n 53 cipales ransrmaciones e las rees y las esructuras urbanas n una ciua tan ensaene poblaa como Barelona, los espacios pú bl icos r esu laban ser los lu gaes on e la actuación era más f ácil . Aeás , ao qu e los efecto s e es as in tervenci ones ten ían rápia repercusión en los espacios privaos, eron ambién los primeros lugares para lo s que se ise ñó una actuació n, con la cer teza e que la i nicia privaa ía los se asos  razaos ici almpor en ellos e por(en las ecis iontiva es púb licas o,seguir al menos, vería con iciinonaa lo q ue se reere a regulac ión  e precios el suelo y e la s vivienas, estánare s en la calia arqu itec tón ica, paisae urbano, ec .). Paa llevar a cabo esta pol ítica Barcelona arcó una estrategia per fectaen e den ia e se lecció n e l ugares (geneal ene en las áreas ás esvo rcias e la ci uda: plaas, a ven ias, w nas egraaas o en esuso, a nti guas áreas in us triales o e equi pai entos obsoletos, etc. ). Dichos lugares, a eás e su nicaor ueva nci ón o apaiencia, serían utilizaos concaracterizarse u n obetivo epor e pl acerca e la volunad e rans ració n sugeria y, a la vez, con tarían con el cometi o e converti se en p untos e isi ón e los efectos e ic ha transración hacia su en tono in meiat o. L selección e l ugares se vio coplemn aa con un con uno e acuacion es especícas que asegurasen el éxito y efecti via e l a p ropuesta. Más que la im es ión el e spacio púb lico elegi o (coexistiero n propuestaso en a microescala e etalle tales acciones chaas el o bi li ario uy rbano , ju nto concomo actuacion es qusobre e afectan la tran s ación radical e barrios eneros) , el i nteés se basó en el «etorno», en las relaciones «ecológicas generaas alreeor e icho espacio público. Esas relaciones son las que habrían e permit ir la consol iaci ón de la transrm ación urban a a trav és e la apropiaci ón e ienti cación e la ci uaan ía con la propuesta. Y así la valorización el espaio público aopaba iferentes rmas ya parti ugaba unlmiso obetivo: r deierentes elementospapeles, ropiospero o ce siempre rcanos con a la u ura «l ocal y «per sonal>> e los ciuaanos implicaos, se proponía integrar ichos elemen tos en c ircui tos más g enerale s y globa les. Tan solo un eep lo: la característica traa e calles e Cer el siglo XIX arcó los tazos bási os e la Villa Olí pia el 1 99 2. E aa en los espacios públicos ( ecir, co unes y colectivos) la cu lura (es e el idio a hasta la esult ura, es e las traiciones hasta 54 d  o, d lo ntntos hat a l procupacons)  rvó coo je rcuador y a gluti nador y coo nxo di n dor e la crculacón   das Era a travé dl ctor cultura que  prtndía intgrar la áca  os d frnts grupos socae s, de las d eras hernc de  di ones y d e lnguas, así coo de l  úlpls es alas i pad  rclona, Catalu a, Espaa , Europa, l pl anta Trra) D hechoy, ntroducindo u cotdo úl tlos movalores ra darqu «legi ldad» a la c udad , lo espacos púl prand  con tn en , transrn y ayudan a t rans t r. Así, por ej l o, a y ou lvar s ran cons draos n o sol o coo espacos vr des  birtos s no coo terrtorio s donde s es taec en as ly e d  a al zacó n y onde s e arcan los pr ncp os de la c udada nía Y todo lo s c oni guió , al enos hasta prncpos de la dca da  ls 2000, a raés de un dfíc qulro enre a ntervencón ú bldcha ca yconc as  nvrsn s de epre sas privada Pero cae c onstatar u acón nt re gstón púl ca  nscatia prvada se vo vor cda por u n l nto c oyun t  dete r nte (la co ncdnca con un ópto oe nto de prosp dad econ ó ca generzada , en aau ña , España y Erop a) q u popcó q e  proceso se lle vara a abo con ayores posades Ello tan contuyó a que, a mns h ta 1 992 , el der un cp  se reconocdo c oo i a o rdad a la ho ra de rcon dc r el rt Rujo de capt aes prvados calosunos o en jt vos colct u ti zand, n cueton r ns tosclar d aen la plan  cacón os u rana dsponsles L <, en Nogué, J. y Romero, J. eds.), L otras lo Blanch, Vancia, 405-423. geoaaTirant F (2009), Espai públic, pp. vi quotidian íA-CRS, i intitat  baí a Trrassa:  consrucción material i social de an Pat i Ca 'ng a avés du n geoa de  proximtt. 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B Tra ctn 1 5 .0 , Sa TM Nol 1   lo Cáfc d Cy (I) 11 EER EL ESPACO PÚBLCO DESDE  XPE RENC A D E  CUDADANÍA: EL  RRO DEL MERCADAL DE L CIUDAD  GRONA* V. bl Salamaña Serra y na Serra Salvi Cotextuaizción Dsde os inicios e la demoraia en España, se han proucido mbios signifcativos en os paisajes urbaos de a mayoría de dades espaoas. Ests transrmaciones son speciamente idtes en os cenros hitóricos de ls ciudades, donde s en n ra su par im on io arqu iectónico E cas o que se presnta e stá laioado c on a evouci ón de cn tro histórico d e a ci udad de ra. A prici pio s de a década de 1 98 0 el Ay unamieno de Gi rona iió el « Pan Espe cial de Rerma I nerior del Ca sco Antiguo de  rona, u a rrma sustaia de  tr o h is óric o q ue ib a durar in e años El río Onyar , qu e discurre por el cen tro de la ciudad, s l p ri nc ial eleme nto vertebrador , no por casua idad el pr oyecto e inició con a rehabil itaió n de as cass ogan tes sobr e  río, una d e las imágenes urbanas más exportadas de a ciudad El proyecto l «Pla Especia de Rerma Intrior del Casco iguo de Gi na», que icuye e barrio d Mercada (espacio objeto de este rb ajo ), buscaba c omo objeti vo pr in ci pal da r ua  ueva im agen a • Esa in vstigación frmó par  dl pryc de invstigación «S n id d lugr y áticas d us n s sp is p ú ics urbanos . Un a mi rada ds d a g graa d géner, B21 348, Mi nistri e iencia y 'cn gía (203-205) y n ó cn l a yuda a ls ru s d In vstig ación ns idds  e la Genera itat de Caunya (2SGR0049).  13 la ciudad an tigua  regenerarla a ni vel u rbano ci li tando los accesos y la movi li dad a l a vez que re vi talizar e l comercio y equ iparla social y culturalmente Esta transrmación en el barrio del Mercada pasa por una gran oper ación d  rehabil itación del espacio p úbl ico qe se concreta en la conversión de todas las calles del barrio en zona peatonal o semipeatonal y con la creación de nuevas plazas (B irulés 200 del 3) Mercadal sit uado a la ori lla izqu ierda del río Onyar El barrio ha vivido i mportan tes transr macio nes a lo largo de la hist oria  La más cerc ana  qu e nos ayuda a entender su actual con g uración  es la desamortización de Mendizábal cuando se declararon extinguidas dist intas comu nidades rel igiosas y sus terrenos eron tran srmados en suel o u rbanizable La recal icación sig ni có la impl an tación de nuevas viviendas y de im portante s in dustria s convi rtiendo est a wna XIX. en el n úcle o básdel icoMercada! de la ind ustrial en Gie sta rona encomo el sig de lo urEl Plan Parcial (  962)ización recali có zona ban a intensiva y de «i ndustrial a ex tin gui r En el año  97 4 (despu és de distintas revisiones del Plan Mercada!) un grupo inmobiliario comenzó a constr uir En el año  98 2 la o peración q uedó i naca bada a caus a de la qu iebr a del banco que co bijaba al grupo i nmobi lia rio quedando tr un cada la oper ación y  ent re otras cue stio nes  inacabada la actual P laza osep Pla El n uevo ayun tami en to su rgido de las pri meras leccio nes dejando democrática s optó por «desdens icadonde r» y es se ponj ar el PlaneMercada! un espacio amplio y aierto constr ui ría la actual plaz a de la Constitu ción y la de Santa Susann a (Fabre  986). El barrio del Mercada! con una extensión de 8,92 hectáreas tien e 26 1 5 habit ante s 20  2)  d los cuale s el 5 4% so n m ujeres un 4 0% son persona s de más de 50 años y un 2 o población extranjera A nivel e conó mico el sect or dom in an te es el terciari o y es el comercio la actividad pr inc ipa l que cara cteriza el barri o además de la presencia de un elevado número de ocinas y despachos de profesionales liberales En cuanto a la renta de las personas que residen en el barrio todos los agentes sociales entrevistados coinciden en den irlo co mo un lugar de m il ias acomodad as de n ivel económico medioalto Al tratarse de un barrio céntrico conviven en él equi pamie ntos prop ios del v ecindario con equi pam ienos de la ci udad 1 14  las si guien tes ágin as se rese a la dis cus ión de u estudi o qu  reali zó en el ba rri o del Merca da en e añ o 200 3, 1 con el   j i vo de conocer as erc eciones de la ci udadan ía que h abitaba    barrio en reación a a rerma urbana romovida y cómo su    ia otidi ana de terminaba diha e reció n. l estudio eviió alunos interrogantes reativos a uso y a la erceción de io or ra zones género.soo Como i us traremos conesacio, ti nuación ,  erceción no sedereere a uso rctic de aeste o  su in terpr etació n en térmi nos simbó icos y constructi vs. E udio s e centra en a er ceción de a ci udadanía en re ación a a  banizació de as cae s y a s tres aza s qu e se c on vertirían e n   tro de toda a zon a: aza Con sti tuci ó, San ta Susa nn a y Jsep P (Mapa  y Fotografía 1). U uevo paisaje urbano: centralidad de ciudad y tenuaci6n de pertenencia  barrio a tnsrmación sia de barrio, qe resndía a un deseo de  una nueva imagen, ciitar os accesos y transrmaro en u  io ea tona , recib ió a a robación en tusiasta, tan o o r ar te de los residene s como de  os omerc ian tes, que tiend en  contrastar  omodidad y a ci idad de ci rcu ació actu con el cao s circuaL mayor i o yón desorden  as ranqu si muy idad esti o incmado uso saor no luci causad de a or osado. ve hícuos son tvaore  ci udadanía Aun así, se han observa do agun as reticencias r eativas a a urban izac ión . La avimen tación de as ca es con adoqui nes y a esenci a de un a acera «oxidada» son ercib idas or m uchas erso  Est esudi  crresod a ra j d i vsigaió d dcorado ig uie e A Serra avi (2003), .es trasrmacios urbaístiqes Mi barr d l Mrca/ de Giroa: ua kctura Ms M l geogja  l n, psnad e  a U ivsi a de  ;  oa y di rigid or la ra. Isae a añ rr Trajo  a zad   l  l ry ct de i sia ci : «G egr, gér y vida cidi a: i  recie s as e i gció  sci• i cid pr  M i is eri d Cicia y clg í lS2000-0479).  vsigado ra pri cia: Dra. Mri a s aa R amo  2 Par c r l exerici vi vi da s h o 36  risas  prodidd  as qu e v ive   l rri (l s  r e  jrs qu d hb s) y 8  rvis s  tas a urais t s   a s si s qu t rj  l ar rio e d a la ifcció d esac i que s e esudi  o qe rticipr  e 1. l 15 FOTO GR AFI A 1 PLAZ JOSEP PLA Foto grafía realizada por Anna Serra. nas, y esp ecia lme ne por las m ujr s, coo las m ayor s di cu ad s paa manra cómoda y segura.excesivae Agunas prsan s uacamina efrmadeco omino d emos durosqu o poco acog dors, si b ie n l as rec on ocen co mo n cesarias para adapa   barrio a las ncesidades de los aons La sgularidad d la ubaniza ción , e  ació n a oo s barrios de la ciud ad, ha v orcido la arac ción coer cia l La i nvsig acó  ra zad a m uesr a un a igual dad a paren e en  repar o y  u so d  espacio po r par e de hom brs y d m jer s S a ci lid las com d annasrvis y  rasgo n  r uarecia iguaaci ónaddpara las ers oasras con coi pareja ada saar a c oncb las c op ras c oid anas c omo un a aciv idad coparida, con solo un l iger e saz am ie no d es as haca as m ujr es. Si bin s e obs rva una ennc ia a la igualda d n a s ac vd ads, a niv   pr ccón d es aci, la si uacó n e otr a bn is a El mu ndo d com rcio, an o a n v de consu mo coo a  ive  de pr snca en  baro, s asocia de m anra casi sisemái ca, con   m u ndo d las m ujr s. 1 16 '   é n el heho de que ua mayora de l as ti n da de la zn a etén   das a produtos de conumo mayoritariamente femenino,   a una mayor presencia de ls mujeres en todo el entramado   rcial del barrio La dialética entre el uso y la percepción del   o a n ivel d géner o se explic a por el hecho de que los habi tan tes so n ol una arte, aunque importate, de los usuarios reales del Todos estos del ctores motivan quedel se Me pudarcada! hablar. inización espacio comercial iert a fm co de una e peri be una clar a disolu ción del sen ti mien to de pertenenia  io en vor d e u na ote nc iación de la ident idad gerdense o s debido a que el barr io ha sdo adecuado a las necesidades de una lienela que o ecesariamente pertenece a este, pero que lo   ctivame te ada da Así, la per epión del barrio en general  en ra e l a i magen de la vital idad y del comercio activo, pero o  social partici a con pativ o nltai de la ovivenia vecin da.inercambio ste asp ecto se reerz la  de ent idades y as de ociacio nesoiales que al oper an , a lud iendo a u na ba ja id entidad y  ohesió n  nal Desde el p un to de vist a de l plena u til ización del es pacio,   lta de equip ami entos ece sari os par a u na bue na i ntegr ació n de /as n iños/as y de las per sonas mayores es una de las críticas más etidas por los usuarios de barrio A sar de la aparente igualdad en los roles que describe, es ilotras er que izaión delnaes En pacio també áreasladefemi la vinda coi dia lasiene en trevista s, se en su correlautoa observa opor ció n superior de m ujeres respecto a lo s ho mbres q e se reere n a os niños y niñas e relación a su uso del barrio Son las adres, y  los padres, qu ie es hacen referenci a al uso de los equipam ien  s cltu rale por parte de los i ños y la s n iñas y son ellas las que á más p endiees d e su ev oluci ón cu ltural  Asimism o, valoran  op ortun idad de disponer de ce ntros cul tu rales y de exp osicio es  el barrin olleva como a activi educativa para susció hij ha os/as La b aió da aun cabo en ladad plaza de la Constitu mostrado m bié n un li gera superior idad en n úme ro de madres o abue las que van a buscar a los n iños y n iñas a l a salida de la escuela d el bar rio Pe  la apare ne iga ldad i nicial , el estudi o revela u n mayor uso de l acio del Mercada! por parte de las mujeres ue por parte de los o mb res Este us o más e levad o gener a más con oci mien to del barrio y también de su gente, lo q ue hae q ue sean ellas m ayori tariamen te 1 17 las que ma ni esten la existencia de u n sent im ient o de barrio Orti z, 2004: p. 92) , al menos a ni vel de p ercepció n, aun que reconocen que es débil, y onen de relieve que la relación vecinal se establece al ecuent ar el superm ercado  la u tería la c arn icería o al enco nt rarse en el patio y en la e nt rada de la escu ela . Ts pls: trs percepciones del espacio público Para ver cómo el Mercada! es vivido y per ci bio por su gen e, se ha cal izado la atenc ió n en las pl azas, que es donde se proyectan algunas de las conn otacion es más positi vas y negativas que los propios habi tanes ven el barrio en general y donde se per cibe n relacio nes de encuen tro y desenc uen tro en relación al espacio p bl ico (Serra, 2007: 174) La Pl Constitució: un es pacio de desencuentro Fue concebida por los autores del proyecto como «una maceta en la ciudad» expresaa a partir de diversos símbolos Desde que se aprobó el proy ecto hasta su ejecució n, e someti do a d iferentes presi ones e in tereses. La pri mera discrepanci a e la de los comerci antes y residentes que reclamaban un aparcamieno en el subsuelo de la plaza. La segunda e la de la comunida educativa de la escuela . .1 del revinicaba el patioatendió del centro ocupando partebarrio, de laque tura plaza El ampliar ayuntamiento la petición de construir el aparcamiento, lo que supuso moicar el proyecto inicial, pero no la reivindicación de la comunida educativa que aún hoy sigue vi va. La plaza consta de dos espacios contrapuestos: uno lleno y blando, done hay una colección de árboles con un pavimento de arenisca compacto, y otro vao y duro, que responde a la explanaa de la eparte central de hormigón en la n a di strib ución i nterrel aciónhecha e estos elem en tosblanco. que se Es empieza encontrar unas direncias notables a nivel e género En la parte 3. El proyco < la Plaza Cosiuci ó s disño < los arqicos Elias Trr r y José Atnio Maríne pea l proyec e urbniacin se faizó l 1 993. s 1 18      observamos, como compemnto, os bancos con restas y (s  o edas, de rmas duras y anguosas, recordando e mundo d e   g ometrí a y d a ec ono mía en a parte dura encont ramos, en  io, a pre sencia do ina nte de a escu t ura de la niña. Se trata d e   obra aegórica de escutor Francsco López que recuerda e  i iento de a Cons titu ción . Se encuen ra ubicada en e esp acio  e rsici igóndía , yerece a ón guderaadepaz unaa,n sen iñ atada que sob nacióreeenmGuro ironda horm e m ismo n e rmó a Con sti tuc ió n La ectu ra qe se puede hacer im p ica    nvivencia en tr asp ectos femen inos y mascui nos si tuados a a partes de a paza, impicando una diaéctca que se da de  ra in versa n e i nterior de  as dos part es y,   ismo t im po,   l con j uno de  a pa za, contr asta ndo u na par te c on  a otr a a  dura iría asociada mayormente a mundo mascuino, por a ue extnsa reseni e cmo, aeri iempre  l ascuinidad (a través de n mndo de areciondo costrucción, de a qitectura y de diseño), que, en este caso, estabece un espaco  n y anguoso, to de easticidad o de curvas; en este espacio,  l g ura de a n ña a que asum e y centra abs o utamente todo s  vaores de feminidad, en medo de un entoo connotado por la mascunidad En a parte banda se da una dinámica inversa de un ado, as gene smascuino de diseño de y  aspoder mo nedas nos re emdinero ten a ymu tradiciolmente patriarca, a ndo ciencia Pro est os eemen tos est án c ircu ndados or asp ectos m uy di ren tes, q u e s pueden de eer en cave femenina: por a presncia de agua ls ríos), de os árboes, de as moscas de San Narciso y por s  rpas, q ue nos evocan e con ceto de madre tie rra y, por tan to, de r i idad, n atu raeza y vda Femin idad y mas cu i ni dad se in terre ionan en as dos partes de a paa, en cada un a de as dos, y en e  goambos de contrastes enre asndos, se estabece unadiáogo uetre aspec tos de a atu raeza hu man Todos constante est os símbo, arraigados en a historia de a ciudad, entaban un víncuo de nacto y compementariedad de os vaores antiguosmodernos, uest o que eementos tradicion aes propios de a den tidad g eru nnse se i ntroducn en u a a za moderna Es ta pa za, que nace con cació n de ser «m uy gerndense» por os símboos qu e recoge, se aba con gurando como un espacio de vanguar di a y modeidad 1 19 La anticonvencionaidad y radicalidad arquitectónica del espacio juega aqu í en contra de me ntar el uso y la ac eptación de parte de os usuarios La pla queda asociad a con el diseño, hecho que genera que se a percibida y vivida como ía, peigrosa y poco acogedora Se observa una distancia eociona por parte de a ciudadanía y una empatía difícil Debido la presencia de los yertes estéticos de vangua rdia quea tiene y de su diseño mobi eementos liari o, es per cibi da como poco propicia para el ocio y e intercambio socia Las entrevistas uestran c om o, en muchos c asos, se convierte en un s impe esp acio de paso, de tránsito entre calles. Algunas mujeres expresan que la pla es crea cierta agorabia y también cierto miedo de crurla, miedo que vin cul an con los grupo s de jóvene s que aí s e con cent ran Perciben que la dueza no invita a quedarse y que el paviento de ceen to mayorita vorece iame la ocupaci ón d el Conceptuain espacio por parte deespacio jóvenesc pati nadores, nte chicos este omoun escenario de u na actividad de o cio abs ol utaente masculi na y su presencia como u na ocupación y a a v� coo u na restricción directa sobe sus propios ovimientos La poléica en torno a las mas arqu itectón icas va li gada a la percepción d iecta de este espacio c omo un luga peligroso para los niños y niñas, siendo las madres as que tienden a hacer una cítica m s precisa de los pel igros potenciaes. La percepción de peigosidad e inseguridad es un aspecto plenamene vigente y marcado por condicionantes de género A pesar d e esta p ercepción genea izada qe l a hace notabem ente impopular, a observación demuestra que es una paza utilizada cotid anae nte como l ugar de paseo e inc luso de in tercambi o social por per sona de di ferentes edades. S i bi en ,  uy mayorita riae nte, sus usuarios on chi cos jóve nes que n o viven en e barrio, agun as madres aprecian que sus hijos puedan patinar, jugar a fútbo o overseccon bicicleta. a paza eniblauyen práctica on uanas n cioAnesnuesto socialesentender su perioes a las cumpe que e atr os i smo s resden tes Esta dicoto mía en tre la percepció n del espacio y el uso real es muy representativa del lugar que la plaza ocupa en el i aginario de Merc adal En cuanto a los elementos sibóicos son ignorados o pasados por alto, savo la estatua de La niña, que es el elemento artístico mejor valorado de todo el espacio y que es vista por los residentes 1 20 n referente den tro de s coti di an idad , ya que proyec ta con     on es esté ticas y afectivas La estatua no se ve solo en térm in os   ivs, si no q ue, en e disc rso de os re siden tes, se h man iza, s e la  ompadece ( en e a s pi ntadas y agresio nes de que a v eces es   o) o se val ra la belleza Se de staca tambi én un cierto sent ido de  ongrenia enre a afectividad qe despierta esta ecutura conw y ealdad ambiene que la rdea, que una sepolarización de senntos quedeldecanta las percepciones tienen de espacio   l de géner o: una  gu ra si mbó ia en a cual se proyect an los   os f emen in os y hu man izadores que n se ven en e onj unt J espai  Plaz Santa Susanna: un es p acio a p rciado da just delane de a igesia de l ba rri, responde a a imagen d ional un espaci este tipo. Si bienctoendeuna pr in ipi  estaiza se pade nica rm andde o parte de proye paza Const ió , después d e as m uchas quejas que ma ni est a e vein dari, e  am ien t opt a por un diseñ de estilo cásico Se arateriza por  paviment de tierra, a presencia de árbes, s bancos al estio dc in a y un a e nte de agua para be ber De esta paz a, hay que tacar, p or u n lado , e nj unto de pam eras whingonia, símbo l reonoc imi ento democrático y soial ista de útimo c uarto del glo y pr tro, e sutu de aBrssa,  etr a i Anstaaa situada nima(Teo, de un a2002: c um1 4) na,cásica, ob ralade pet araJoan lante d e Muse  de Ci ne ( i nema» en ata án)  La A es na A  in ema» , y a fecha de instaa ción próxim a al na de  m ile nio,  9 8 En a ínea lúd ica habitu al de Brossa, se sugiere que a pal ar ci nema» empi eza pr su út ima etra Es dei r, se plan ea un a nver sió n de  orden tradiciona men te estabecido  La escut ura tiene  vers os posib es se id os, pero tod s ellos olo p eden etabec erse  de la r eferencia mp li taaaa«ccn ine temporanei ma », como arte rom pedor  art angiruardista que corr i esponde dad tota Sin l ugar a dud as, la plaza de ant a Ssa nn a es la má s apreciada  la que más plenamente cumple la nción de espaci público, n endido como z ona de plena onvivenia, abierta, cómo a, etétien e placenera y sin excl usione  De esta plaza, de staca el hecho de ser e cue ada por re si dentes de todas as edade s y pl ena men te  ilizada par a e ci L presen ci a de os bancos y de a te rraza de 121 un bar vorc qu sa plnamn uilizada para a vida social y vcin al . Es l spacio d ocio más usado por odos los colc ios dl barrio y pr ci bido por l os rsid nts nt rvisad os como l a zona más satiscoria stéticamn. Rptidamn dscrita como bonia, acogdora y popu la r, quda vin cu lada a a pr ox im idad , al i ntrcambio h uma o,  a acogi da y la i ntg ració n. A gun os d los mn tos qu  a imagn d os nt, to la qu aradstacan y las pamras,  so ymnal la chada dvcios a iglsiason la, lmn s spcialmnt important por lo qu in d imag tradicio nal d plaza . Es in trsan t mncion ar qu los usuarios no a udn xcl usivamnt a su  ció n más údi ca sino ambié n a su nci ó socializad ora, asocia da sa a la rr aza qu u bar tin s i uada n uo d los lados d a paza. No s pudn stabcr difrcias si g ic ativas  su uso t r m ujrs y hom brs, am bos s sin tn y protagonistas propitarios raizan las mismas actividads: ma r  so, tomar u  rs co,ypas r a os/as n iños/as, q udartoco amigos/as. Si mbargo, sí qu aprciamos algún matiz. Agunas mujrs racioa su impo d ocio n a trraza dl bar co a atción a  os hijos  hijas Así, a la sa ida d a scua , m int ras os  iños y n iñas juga n a pa a, as ti ndn st tim po d chara, acomodadas n la trraza d bar, como u momnto d rajación y socializa ció d su q uhacr coi dia o. A L scult dro ura d lad ambin d Joa  Brossa b como u lmto d xtrañeza cáidosdprci a paza. En gra s pud vr qu a A o dja indifrnt a os rsidts y s sit sorprdi dos  i rrogados por su prsci a, ta y com o corrspod a u objto vaguar dista, pro no  lgan a hacr ua i ntrpr tación cara ni proycta hacia a stiminto aguo. El jugo abstracto y concptua d la scutura propusto por Brossa pasa inadvrtido a la c iudadaa. podmos más posiivamnt nivAdustro gérontdr s tao ola qu ausncia tota r d ctors d discrimia nació c om o la proycció n d  st s pacio como l má s fmn io d barri o. La Pla Jose p Pla: un es p acio de dis p licencia Nacida como rsulado d la opració urbanística iniciada  l barrio por u gr upo in mobi liario ( 1 974)  s urbaniz ó  1 987  No 1 2  igú regisro escrito sobre a vouad de os ruitectos o J    ores en reació al  im a emocio na  de sesi bi iad que se   a crear en  plaza Se dibuja en rma rectanguar y de pro  i es más bien pequeñas y se echa en ta una oofí en e   cto E resutao es un espacio carente de rma y de espíritu  s o a que sbrepasa a ecesid e cubrir un parcamiento h a á eo y de ser decidió un epacio tráns itoe de pea ton l ayuntamiento dar de al espacio ombre deesescritor  Pa y cooc ó a escu lt ura de os  ib ros dedi c a escritor (o bra   escutora Pia Crozet) Podemo pensr que lo que quiere dar  sonalidad a la paza es la escultura Sin embargo los elemeos qitec tónico s no tien nin gua rel ción d ialéc tica n i si mbólica  l a Se  a para doja de que al m is mo tiempo qu e esta escul  genera u aceptación más bien pasiva, sin demasiado entu m o en tresim ls pers onasdeelas revis as acilmente s escu tu ras óicos y lmentos trestadas, plazaseslaentre que to es más  correctamente inerpretaa La escultura vincua la plaza, en la  cepción e os r esidees, c on el mu ndo de a ct ura; u na vi nación que no se da en inguna e las otras pazas Se aprecia,  una moerada ac eptación , pero no se estabecen azos afecti vos portan tes ent re la ciuadan ía y a pla za En general, la pla za es vista como ía, i mpersona , con  ta de codiciones queasí ciiten via ciuadana ricala frenes ctiva. Suyrma y su estética, comouna los cuatro pasajes que  u ican co di feren tes calles, i vi tan a en tederla como u n esio nc io na , merame e ráctico, despr otegido de caor propio e a experiencia ciudadana activa. La percepción que ransmite es l de a espera de ser urbanizda. La ta de uso y d eementos éticos o de ocio a convierten en un espacio desprovechao,  oco utiizado bienraadedesn udez prece converti r este  eu tro desde na Si lectu género, en las en revistas se espacio percibe euna cierta sención e miedo en alguos e splaz amieos por a plaza. Un bue nm ero e  uje res expr esan c on d eta e cuáles so os es pacios que chazan po mi edo y sensació n de i nseguridad y que evitan pasar n cie rtas hoas de la noche, ci tano e xp íci tamen te e tú ne en tre a za y a ce Gróber y el corredor de esta cn  a cae No u Adm iten qe es te miedo se tr an sm ite de madre s a hijas c om o prevenc ió n En 1 23 gnral xprsan su p rud ia n  uso d stos sacios por lo qu han oído y s xpli ca, a ludi ndo a run ions d p rsonas «xtra as•> , a tráco d rogas, tc Ninguno d los hombrs nrvistaos los ha pr cib ido como sp acios potncia lm nt pligrosos. o más sign i cativo  la rlación d  los r sin ts d Mrcad  con a Pl aza Josp Pla s l d un spacio viv id o, s obr too, sd la in i frncida. Un por dond s cipasa pro qu no s scna rio prfrnt n ingspacio ún aspcto d vida udaana. A mod o de d iscusi6n a rrma u rbana dl barr io l Mrcaa vauada por la prcpción d sus rsidnts pu vorars d éxito. El mpño i niciado n los años ochnta, y la prsvrania n rcuperar la ci uad anti gua como spacio d via y d rvaor patri hi stórico ha suscitao unaci udaana mayor cntraida dlición barrio.dl L solmonio ución constructiva d la rrma d sus ca s, un urban ismo modrno y si ngul ar (n o spjao d agun os lmntos di scu tibls) ha actuado d r clao  ciuadanía y  nuvos comrcios y activiads, salvaguarand un rnvado comrcio  proximida cilitador  la vida cotiiana d los rsidn ts. E l dilogo nt  ls i ci os (la mayría rstaurads ) y l spac io púb lico ha crado un n uvo paisaj urban o n riq ucido po r vivncias m ultic ulturas  inptrgnracio nas. qu a prcpción prspct iva d génro , más or a obsrvación por a prcds pciónla vcina , s d cirta m in izació n n a ocupación y  uso. E barrio s hoy un spacio d cntraidad  ciudad, lo qu cn ll va una prc pción d disi pación d idn tidad d barrio , salv aguarda da , débi lm n t, por las r lacio ns vci nals qu s  dan n os comrcios y activias d uso cotid ian o, advrtida sp cia lm nt por las m uj rs La n uva scala spac ial d rfrn cia dl bar rio, n rlaci ón a la¿a ci uda, noscu sugir nosaci i ntrrogants vn ir dl barrio: am pl itud ltural algu , gnr ona l, soial nolsdagnts qu i ntractú an  n st spacio s on portaors d n uvos vaors cívi cos y d idnti ads o qu ibran l a débil idn tidad d prtnncia d barrio? O cont raria mnt: ¿l i ntrcamb i d mirada s, d r lacions, d vi vncias d gr upos ispar s p ud i ntractuar como atal izadors  un nuvo rncuntro ntr los rsidnts y su ntorno? O qu izs l a discu sión sté n pr gu ntarno s: ¿ son los rsin ts los qu 1 24 ¡  identidad de barrio y los icos garates de la socializaión d�  hesión y de aportació  de valore s cvicos? El aná lisi s realizado en las res pla zas nos permite c onl uir que   os dela nte de res espacios q ue si bi e son coi ndan tes y con  iuidad sic  ent re ellos, oc asiona n a los usuarios se nt im ien tos n on trado s: de an idad (la pla Sana Susan na)  de rechazo (la z lsl a eneñ  Cons i ució) y re de sidentes in di rencia ( la plaz par a Jose ism o, anzas de los re cogidas irpdePla) su . Asim percepción y  etro ap ren dizaje a par ir de la ob servaió  es de ci r de n uestra  pción nos motiva a apuntar interrogantes y discusiones en ción a las res plazas. ¿L onvencion cra a6nidad? Lailaz a Sn aaceptada Susan nacomo responde mensión bási la a un Cump ca de urb os esism pacioosclás púbico. licos: ugarle  so, de esanc ia y de paso  Un proyecto conc ebido sin d iscuso aístico percibido por los usuarios como able y amigabe.  comunicación discursiva la asume la escultura de Brossa que  ndo con la A de «cine ma» une el m useo con el e spacio púb lico intrépidamente rompe el ritmo armonioso de la plaza con ua pr esió n a trevida, vanguardista. La es cu l ura n o crea i d iferencia , e ero tampoco adhesión,deellajuego pasa inadrido. La aprobación plazaabstrato se entizay coceptual por la combinaión  viviendas y comercios que abrign el espacio pblico y dan tiuidad sica entre el espcio pblico y el espacio privado; p robació n estimu lada por la terraza de bar que aviva el encu en tro orja, 2005: 48) La estima comunicada por los residentes nos vita a algunas reexiones: a) a coocació  de terra ercepci ón de acogid del espacio públzasicoaima más alyláacreciena del pr opi oladiseo ur ban ístico y de la con gu ració de la pl aza b ) Las terrazas cilita el reposo la relajció cotidiana y también la vigilancia  distancia cora de os movimienos de os niños y ias, concediendo tiempo de ocio a los adultos. La sensación , como e xpresaban algu nas m ujeres es la de dispone r de «su tiemp o» in tercamb iando c on versacioes, relaciones, etc 1 25 Quizás abr iscer ir sobr e si las terraas pue i u ir e la percepció  e u mayo r elogi o el espacio q ue los acoge. c) E esta ise rtació  cabr a i aga r si la vivencia e los i ños y las iñas, que se mueve co naturalia y traquilia etre plaza s por a fácil so uc ió e co tin uia que ha y et r s , es coiciente co a imagen que los aultos tiee e a paza y cómo la valoran ¿L pl «du» provocan chazo? La plaza  la Costitució respe al urbanismo moero que crcie temee irr ump ió e m uchas ci uaes y que olo qu ia men te se e ni ó como «pazas uras»  U proyecto onebio para e stablecer u iálogo ere icoografas propias e a ciua, expresaas con eementos escltóricos y nmoiiario isño eyhormigón sutóricamente moa uclásicos, ntasioso acotaiónque e spacio. E r tao e s u n espa cio d s enc ue ro co l a veia y  iscre panci a  su uso. La perpció es  u spaio que n o ivita a a prmanncia, e isguria por la moeación e os elmentos y pr la o tación primtra e a pla.  isño conic ion ado por a costru cció e u aparcami en to e e subsuo y por lo s requerim intos par a su  cion am ien to, que co arta y i mita el el escu espacio púbico superci. A nuetro en rsultao tn er, loespra emen tos tó ricos qu en  uye e a plaza para ar nc ioa ia a l apar cami eto eb en sit uars e e a i mens ió e a creativ ia artística; y la i scusión e ra centrarse e  con texto, e en torno, qu aco ge a plaza . Preguntánoos sobre l rchzo percibio (más allá e man tenerse viva l riviicació e la comuia eucativa que pa sbre la percepió vecial), ese s sugiere que cabe situarlo e el e torno qntra ue acoge l plaza la soluc ió el proyecto . La plaz se cue en un eto ro yleao e trama u rba y vrtica iaa ei catoria U esceario aree  e hor iwes e r eferenci a. E este on texto, el pro yecto se bl in a rcluyéose en s mis mo , om itieno u espacio  e trasi ció e  re él y el et orno . El sencuen tro nos invita a apreciar u problema e icotoma esalar el espacio: la mira hacia e eto ro , e cotexto, es e vaco, e esorien taci ó a ca usa e la ta e con es; l a m iraa ese et ro e la plaz a, a 1 26     ia corta, rovo a aisl aie o/ recl usió  a ausa de los mu ros que   cerca y, a la vez  i qu ietud por la apr opiació que los jóvees h n echo el espacio. Ua sesació, vivecia esta última, ás  b ia po ls ujeres que por los hombes Poríamos argu ar que la pl aza Cos tit ució se a leja de la oci ó espe a del  io ú b ico; si embargo, la cotrove rsia os i vi ta a preguar ¿la lta de acra, coes,e elatrama urbaeurbaizaa y viva rovoca ació, percepció los espacios públicos? O  s cabe peguntar: cuáo se rope la lógia domior e    espacios pú b ios?,  o re cisamos e tiempo gee acioal paa la m pensió n el co texto? ; la estigmatiz ació e a pla a,  pue e  de a ua he e cia , u i agi ari o demasiado cecao e e l  p o? O, tambié , ¿cuáles so los m ecanis mos cívicos e toleracia  r resolver la icción ete grupos estigmaiados acusos e  iarse el gespac io púbdelico el de echo etouso pe ci bido po lo e se sie te uardiaes losyderech os de os? ¿L indifrncia cra espacio público? damos calicar la plaza Josep Pla como u patio trasero co  rn losa que cumple l a fuci ó e cubi el apar am ieto que  berga su su bsueo U espacio ce rcao por bloq ues de vi vie das y  ias e cuaes pocas tiee picipa plaza ci cespa ciolas q ue se com u ica cosuel acceso e too exterior,po laslacalles da es a tavé de pasajes De quí a per cepció u á im e e í e    rsl  d esai s rd iao qu sucita i mi   d fereci a  espaco que i masible me te espera ser urba iao S m bargo, qui siéramos comear que al poc o tie mpo de haber se al izdo n uetro tr abajo el ayu m ieo i staló e el cetro de l a az un as estuctu ras de egos i  i les estaizaos re colocó los coloc óió algus mactaElsbeullel icio ñode20los 04ni El abacos iesyocupac del e spacio. ñosresul y itado ñas, sues ear, su movi miet o se proaga e toa la pla e il uso la pasiva  u lt r dedica a a Jose Pla s e ha covertio e ua etuc ura e  o a explorar. L cooc ació de los juegos sugiere ua paus u  ie ras ato », a la es pea e resolverse la u rbaizaci ó de la plaza.  este «m iea s tato»  u baal eme to cotid iao  esta ar iza  parce haber co rmado u uevo espacio úb ico que a ojos 1 27 el ob serva or acoge los estáa res  ci o les e espacio pú bl ico  usar, estar y pasar U espaci o e el qu e los pocos loc ales que m ira a la plaza, s it uaos e extremos opue stos, ha si tu ao os terrazas e bares, y por su uso p arece satis cer a la co cu rreci a  « mie tras tato» que parece inicar que la plaza ha pasao e la iiferecia veci a l a l a e pr eferecia a j uzgar por su uso Nuestra obser vació ituye que la realizar plaza p sus recisa e u Si uevo r elato, ua arra ció que solo puee usuarios  embar go, cmo es crib ía ae acobs (20  1 ), u a i terrupció  e e l cami o teje u rico etr ama o e relacioes humaas, u coglomerao de pluriidentis y así eteemos es ta i terveció  t rouc ir elemeto s cotid iaos (baales, poco srci ales, s i ateemos a la per cepció e algunos urbaistas e relació a los j uegos i  iles) es apelar a lo co mú, quizs a lo fácil , pero si lugar a duas es eteer qu e lo pequeño es hermoso  He aquí uest ra urbaa, iscusiósi: embargo, i iscu tiblemete e l u rba ismo cotribuye a la calia los proyectos vacíos e eleme tos e cotiia niad so e realia , como expre sa Ma uel Delg ao (20 1 3) , es pacios es oñao s Refnci bibliográcas BIRULÉS,  M (cor) (2003), Girona 20 anys del P especial l 1983-2003, Baí V05) , Urbanmeiciutania Aju tamet  Els e GiMo roa,ogrcs G iroa B,  (20 e B MM ,  6, p. 48, en wbccat/publicacios/b_mm/bmm_civisme/ 0305 0 pf [cosu ltao el 25 e octubr e e 20  3] . 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COTIDIAIDADES URBAAS D E A FANCIA Y L ADOLESCENCIA N EL E S PACI O PÚ BLICO*   a Baylin a Fer ré, Anna Ortiz Gu itar La y Maria Prats Ferret rayecoria investigaora personal y coleciva e las auoras etemene, ica el inerés el enqe e e lagénero en lageografí y, másy en por las geografías inncia aolescencia la uvenu Nos ha ineresao reexionar sore cóo nestros  ereses temáticos y los en ques con que ratarlos han io evol u  ao con nosor as a lo larg o e la úl ti ma é caa ( Baylin a et al , 2008) El en qu e e géne ro está pl ena mene ar rai gao en n uesro bajo i vestigaor  ese hace más e 20 año s y al mism o ti empo  ineresamos por los estuios e las geografías e la inncia sde meiaos años 2000. enos haer investigao rate años es e elos la persp eciva Despés  e géne ro pareció peri ne ne  crpor ar tami én la ea como variale e aná lisi s propia  e la ografía social . El a mp li o traa jo e i nvestigación sore el estuio  los e spacios pl icos esarr ol lao por el Gr upo e In vesiga ci ón  Geograf ía y Gé ne ro  que se pr esen a en  ue na parte e ese li ro • Esa ins1igi ón r mó p. d los p ycs d in sig aión siguino xcluió n? Aorac ions dsd a paci púlics ¿lgares de inlsión grafa c ia y e géner », EJ200609837/GO, Mi nieri e Educa ción y   nia (206-208), ·Adescncia i gner a a ua: Percepcins ambinas qualia1 de i da i prkiques e paci s a Bes s  Barclna) de ' n si u Caa d e ls D n s ( 2 1 0  2 01 1 ), G nr i rsns je a la ci a  Prpcin s mbi na s urac e ida i rciqu es pacia s a l Bes s ( Barclna)»  la Agencia a aana de l a Juud ( 2 1 1 2 01 2) y oó cn la ayud a l r d nvesigción  nlia d la  neralia e Caa unya (2005SCR-0336). tes: 1 33 os motvó para amplar el eque y abrros a uevas perspet vas. E segu a os im os cueta e la  mportac a e l os espac ios púb licos e  la va c ot a a e  ños y  ñas. Esto s espacos tiee u papel  ame tal e el pr oceso e s ocal zac ó n tegrcó y aqu s ci ó e au to om ía as í com o e el beestar  sco y me tal e  ños y i ñas aolesce tes y persoas jóvees e g eeral . la ecesa e estu e rma l coltEsta vo Vt mos l y juvel e relació a lo sar espacos públ iferea cos e la ciua.  ueva aprox macó  os ha pe rm t  o coocer h asta qué pu to las ecesiaes y eseos e estos grupo s e poblac ó so o  o te  as e cueta e los procesos e plaicació urbaístc y e diseño de estos espacios. També os hemos teresao e el esarrollo e la va c oti aa e estos espacios qu é  cómo, cuáo y qué hace es tas per soas al ecuetarlo s E terés por a e da ha co vvido co el eque e géero y amos se ecuetra presetes e uestro aálisis E este c pítuo pres etamos e rma s i tetiz aa, dos e  uestros traos de ivestigació reaizaos ese este obe eque el géero y la ed a E el pri mero e elos aboramos el studio e os esp acios de uego e e co texto e os ciuaes medias e Cataluñ a ( Ma resa y Sat Feliu de Llore gat) . E el segudo c so presetao estuiamos la percepció y la reació e a polació adoes cete  barbarr rio el BessMa resme ( Barceoa os es pa- cios pbl icosdee o que suel e ecueta r y o) eco sarroa su vi a cot idia (Map  1 )  E am os csos se uti lzó u a metoologí a e t po cua ttvo que se trató que o excluyera a la pobació sobre a que se cetraba la vestgació Por otra parte mbos aáisis icorpora la perspe ct va de gée ro a pesar e que o s em pre es fác l y hay que aho ar e e  aál iss para r esaltar u as i ferec as que au q ue o se verbalce existe y persste . Espacios de juego e infncia en la ciudad Dese meados e los años oventa geógras/as e los países aglosaoes se ha eresa por las geografías e la cia ba saas e el aál s s e la via coti ia a e  os  ños y  ñs y, muy especalmete e su comportameto y preseca e los espacos 1 34  cos urbaos Dese la geografía social Tay 999) cultural  M he ws  995 ) y el géer o ( arste 2003 ; Valeti e  996)     io prouci eo  um erosas ivestig acio es preocu aas por lizar la iversia e experieias y eesiaes e los cole o e peroa s que por cuestio es e géer o ea  sexual ia y diió social cultural y étia ha queao traiioalete uios e los urbaos Los estu iosestuios e relació  co(Ortiz el e stu2007) io el. uso y la apropi ació d e os  iños y i ñas e los esp acio s púb lios ha emostra o ua or preseia e estos/as e ihos esaios ebio a que los  os y las i ñas eia más tiempo a mi rar la tel evisió o a ju gar  el or e ao r e s u asa ( Karste   998 ) a la is iució el  ero e hijos/as provoa que haya más po si bi li aes eco óm ias a oecerles ua eucaió  e rma e acti vi aes extraesola res en epaios ip bl ios {Droogle ever y Karsten  1 999e)  ya acio pú lm io se ovierte aa v ez más e u espacio auque ltosel  rma q ue los pares y ma res so osc ie tes e los riesgos y ibles pel igros e los espacio s públ ios  por la ual co sa restri ge  us o a sus hijos/a s (Valeti e 1 99 ) Segú  Vale ie (2 004) ,  mieos que los pares y las mares siete por la seguria e u hijos/as e el espacio público so ostruios y meiatizaos  iert meia por los meios e comuicació las campañas uativas y la comuia vive Los estos tores geera otribuyeoe a presupoer quemesajes el espaioque público sa « atu ralm ete» u espaio para aultos y co secueteme te  espacio oe los iños/as vive permaetemete ajo el go  e ae r e ma os e persoas extr aña s Est os «extraños » so  o izaos a través el u erpo mas li o q ue pasa a ser o cebio mo u cuerpo potecialmete peligroso y esaate mietras qu el uerpo femeio sigue sieo coeio como u uerpo asm e seguri a y ha oreexio az ao sobre las cosecuei as Nuisor merosa s geógras ue tiee  las at it ues extremam ete rotectoras e los progei  s e re lació al u so e lo s  iños y i ñas  e los e spacios pli cos S e obser v como caa vez más el tiem po l i re e los  iñ os y las  iñ as as urre e espaios privaos y sem i úb licos (e la proi a casa e n ros eortivos e l uote s etc ) y omo co seue teme te las  iviaes que esarr oll a estos/a s está caa v ez más pr ivatiaa s 1 35 instit uconal izaas y organi zaas por los aul tos (M cKenrick et   2000; Gagen , 2000; Valenti ne, 2004) . Algunos estuos muestr an como el hecho e que los niños y las iñas no puean acceer al espacio urbano q ue los ro ea solos o j ugar en los espacios públ icos abiertos sin la miraa ateta e un aulto tiene repercusiones en el esa rrollo e la au oesti ma, la responsabi li a y la i nepeencia e los n iños y ni ñas 99 5, 2000; Ton . Se obse tambi én como esta(Román prvaiz, ación el t iem poucci, l ib re2004) comporta a la vrva ez un a mayor segregació en el ie mpo l ibre e los n iños/as. as iferec ias e g éne ro son vs ibles cuano se observa el uso e los n iños y las n ñas del ár ea e j uegos e los e spacios p úb li cos. Según los r esul taos empíricos e Ka rsten ( 1 99 8; 2002; 2003 , en bar ros mul t cl trales e  mster am, la pre secia e  iñas en el área e j uegos es meo r que la e los n iños, así como el  iem po qe pasan y el espaco e utiene il izan e para j ugar. Di versos au oresyseña lan el imporate papelquque la plancación urbaísica y las áreas e juegos iiles el seño e los espacos públcos para cost ru ir ci aes qu e ti enen más e cue a las ecesa es especícas e los iños/as (Borja y Casells,  997; Bor ja, 20 1 ); ambién señala la necesia e vorecer la participación e lo s  iñ os/ as y lo s jó ve es en el seño e los espa co s públ ico s (S im so,  997) y ani mar la pr esencia e l as i ñas en las ár eas e j uegos n nales. Aetas estos r esul tados nos plan eamos i nicia r una investiga  ción para ver s esa real ida se re proucía en cotextos me iter rá eos oe cosierábamos que el uso el espacio públ ico  rmaba parte e la via cotiiana e las persoas. Cocretamete, etre los añ os 2004 y 2009 se r eazó la in vesigació  e os ci uaes e Catalñ a (M a resa y San Fel iu e Llobr egat) (Baylna et al. , 2006a 2006b, 2 0 1  ; Ortiz et  2008) . Nestro objetiv o ha sio r eexionar sobre s exper ienci as públicos e los n iños y nienñassuque en l aese ci ua y el rol la que los espacios juegan viaviven cotiiana una perspectiva e género. Se ha examinao la va cotiiana e los n iños y ni ñas , el uso y apropiaci ón e los esp acios e juego y su percepció n socal, espacial y me o ambi etal e la ciua. a realizacón e toa la investgació se ndamenta e una metoologí a cua li taiva a pa rt r e obser vaciones i rectas e n revistas a usuarios/as en los espaci os e juego e trevista s i n rmaivas 1 36   oas expeas, cuestioarios abierts a niñs/as y ibujos  os por los i ños/as . n conju nto, se ha tr abajad o con  94 n i ños y ni ñas  e  O y 1  años e esc elas púb licas y concerta as e   a  ciuaes. Las eevistas beves a personas autas usuarias c n   uga (mare s, pares, abuelos/as canguos, etc.  con ib uyen a   ene e spuesas a actit udes observ aas y a conoce l a mo ti va   ara u til revista izar el es pacio , ati l a ecue nci y otras opi niones el Las ent s i rm vas a pesonas ex pea s ( concesobr jalesee anismo, eucación e inncia; rquiectos/as, planifcaores/as  o/as ota n a la in vestig ci ón e op i io nes cu ali fcdas sobe  rnsrmaciones sicas y sociales e las ciuaes y los espacios  icos estuiaos urnte los últimos años. Los cuestionarios ertos cumplimentaos po los niños/as inrman sobre los  mpos, espacios y aciviad es de ocio e caa n iñ /a y ambié  e cuestiones relaivas a s movilia en eil ustan espacicál público s pin iones sobre la ci uad. Los ib ujos es elyl uga el paa j ugar  e caa  iño y n iña y cómo es su espa ci o e juego  tiz e al. , 20  2) n elción al tiempo e ocio cotiiano, toos los niños y s en Catalua expresan que s pricipal activia urnte el  mpo li br es juga . En seguno l uga mencion an esuiar (s obre oo las n iñas , ir al par qe, eer , m iar la tele vi si ón y jugar a tbol  ños . Euna t ipo e jego es istin toeentr e i ñas y tanto n iños,activas y ls ni ñas estran mayor iversifcación aciviaes o seearias, inerioes y exeioes y a nive inivial o en  up . Los j uego e ol so n pacicaos po más n iñas y el tbol r más nños. La habitación o el salón milia son os espacios erioes más utilizaos para el juego y e parque o s en elación al exte io , au nq ue ambi én menci onan patios, terazas o alc ones. La mayoía ealian activiaes exrescolaes elacionaas con el porte, el a e o lo s iioas. Los niños y niñas gozan de isios niveles e autonomía en  ción e su géner o y lu gar e re siencia. En ambos co ext s el ao e a to o ía para i  solo s/as por la ca lle es toaví a reucio y as n iñas va  meno s sola s qe los ni ños. Su s it inearios son cort os y se ecen a comp rar alg una cosa a la tie n más cer cana. Au a sí, co amos e spuesta s amb ivalente s mostao la ea um bral en  aquisició  e auonom ía en la que se encer an : 1 37 No, si ellos [padres] me dejasen sola no me sentira segura (Cludia, 1 1 años os niños y niñas tienen mucho que decir sobre su ciudad  en ambos contextos se menciona un entorno medioambiental de calidad como la princ ipal r eivin dicación , i ndependientemente del género d e la persSe onahace . M espacios alverdes, y más l imla pios es su prioridad. referencia excesomás degrandes construcciones, l ta de espacios para practicar deportes o cuestio nes estéticas (« más bonita», «más moderna», «rermada»). En relación a los espacios públicos de juego, que todos ecuenan, en general de nuestro estudio se desprenden algunas co in cidenc ias con la s i nvest igacio nes realiza das en o tros contexto s, en particul ar las qu e se deriv an del diseño y con tenido de estas áreas. a ordenaci y el taipo material de e,j ego si mi lasCa de otros conón textos, lgodeqe re spond por loson memuy nos en el lacasresoade tal uñ a, a las di rectrices de la nor mati va europea que en tiza cri terios de cal idad y segurida d. Sin e mba rgo, existen remarcada s diferencia s, quizás más vinculadas a las distintas preocupaciones y prioridades q ue mani estan los usuari os/as y plan icador es/as en relación a la s características de estos espacios. En este sentido, se entienden los espacios de juego como lugares necesarios para el recreo, el desc anso la social de los ndeiñsalud os/asque y sellevan valoraimplícito ade más que sean al a ire libre por elización componente a dis pon ib il idad y la ac cesib il idad de los e spacios púb licos de j ego son , pues, cruciales e n la vida d e los ni ños y ni ñas y todas las personas del estudio los valo ran en genera como agra dables. La percepcón de m iedo no aparece en el di scu rso y preocpacion es de los usuarios/as adltos y exper tos/a s catalanes. es pre ocupa la cal idad del equipamiento, el mantenimieno y el tráco del entorno: y Se li mpia po o; poc o manten im iento. Es muy caro. os niños se que ja n. Se que ja n de cosas muy razonable s como de la lta de luz, de agua y de las pintadas en las paredes (Técnica de Inncia de l Ayun tamiento ) as diferencias de género no han sido solamente observables en relación a las actividades, uso y percepción del espacio y de 138  rsados por part de niños y iñas sino que tmbién a     iao comportamien tos disti ntos en re omb res y m ujer es L a  sencia de padres cuidano de sus hijos/as en los espacios de j go , pdres hablano con oros padres y madres sobre eas de s    is/as m uesra n qu e os roles son más in tercab iables den tro d e s  il ias y esa eviencia pede mn tar comporam ientos al eo s ivos usuarias aduln cios. S in e mbag o, anqueo iguausuaios ldad y deypatici pació udadana han penetad     tiasedeotos e n  dm in istrc ió  en los últ imos diez a ños, y eos advertido una  s ib il idad en a mbos cas os por parte de ls per sos expert as, quda  v a por hacer os cambios son lentos y se necesitan acciones muy oncretas a nivel local. La participación real de la inncia en l i sño e sus espa cios pú bl icos at endien do a cuestio nes de e dad   géero puede ser ua de ell s. l studio ostr dolas la ci i mportncia de los es paci icos   uego para laainmnci a en uddes consi eraas l asos i públ ferencias  sistntes entre géneos en relación al uso y apropiación de los saios, una op in ió n  rmada sobr e estos y la ci uad por p are de s i ños y ni ñas y una volun ta de particip ar (Di bujo 1 ) Vviedo la adolescecia en el barrio del Bess-Masme   arc d e las de la in nc ia aora y la juvent u , en la adoles cia es la etapa vitalge ografías menos estuiaa hasta ya que d ichos sudios se i ncl uye la e apa e la adole scenci a si dar u n tratami en to scco a est a a nja de ea. Es ás cu an do se abla e adol esecia  sobre todo en los medios e com un icació n, a menud o se le  ibuyen conn otacion es neg ativas e stigmatizando esa et apa vial o i p regnad a de co mportam ientos antisociales. a adolescencia e s ua etapa de transi ció n e la que las pers onas es entrey nl iñas deseo la los protección ci ben se siedebaten ndo niños y leearrarse ejercer ya derechoque s como son as adu ltas. o que qu izás ide nti ca a los y las adole scees al rg en de la ead es ndame ntalmente u n a umen to de la i ndepencia y el hecho de o es ar tan vig ilados por i li ares adu ltos, o en casa como era de ella. En nuestr o con texto, el paso de la ucació primari a a la e ducación secundari ob ligator ia ( 1 2 añ os)  one la adquis ici ón de una  yor auton om a por pare e los y las 1 39 DIBUJO 1 EJEMPLO DE UN DIBUJO SOBRE EL MEJOR ESPACIO PA JUGAR r�, \:· .  , \$ C l 'Q� aolescen tes ya que m pl ica, en m uchos casos, un camb o e escuela y e moelo eucatvo, me nos supervsao. Cahll (2000 ) revn ca los estu ios e la aolescenc a ya que es en esta et apa q ue se proucen los prnc pales rtos e trans cón e la juventu ( pr meras r esponsablae s reaes, exper enca s laborales, expe rienc as se xuales . . . ), y la negoca cón el uso  el espaco púb lco por su cuen ta. La m sma autora crea el concepto e «al bet e calle» ue prvl ega los conocmentos locales nrmales quezcón se basan en lasqexperencas persona les en el espaco púb lco urbano. Según la autora, el ento rno , y la ca ll e en partcul ar, es u n con texto sgn f catvo pa ra apr ener a fn e expl orar la s relacon es e la j uven tud con el barrio. Y en este con texto, los y las aole scente s tenen mucho conoc mi en to e los protocolos el entorno y aqueren competencas ambentales e negoc acó n a escal a e bar ro (Cah l l, 2000) . 1 40 Poseriormen a la invesigación sobre esacios de juego y    en es de la nece sidad de pre sar a en ción a l a eapa de la ado    ncia nos plan eam os con i nur n uesro rab ajo en un esudio   co sobr e adol scen es enre 1 3 y 1 5 años re sidenes en el    del Bess-arsme de Barcelona El objeivo prinipal e   d io era conoer la vida coidina de ese colecivo, su relación w  besar. arrio yDenro los es cios li os de sucualiaivas, eno o y para su percepió e las púb meodologías ese n d  b  d o se uil izaron las écn ias de grupos e disusi ón (4 grupos e 1 O adole scene s cad a uno) , enr evis as (28 , 1 7 a chic as y 1 1 a o), paseos paricipaivos por el barrio (9 paseos con grupos e 2  3 adolescenes cada uno), aemás enrevisas a persoas clave dl bar rio (  6) y anlisis d e do cumena ción Nuesra invesigación muesr hasa qué uno la conexión o io naldecon l ugary resul serBessaresme. un c om pon e eLos esenci al para el estar los elchicos chiasadel vínculos ivos on el l ugar, en ese caso on el barrio on de resi den , se sruye a parir de diferenes ejes, complejos y dnmicos: sus ur dos de in ncia se anclan en el barr io, sus am isa des van a su  smo in si uo si uado en el barrio y lo s espa cios que  ecuenan se b ican en el barrio En general, perciben el BessMa resme como un lugar seguro, con servicios y bien conecado con el reso de la dd. Además, urbanísias dedenro los úlimos  «redib ujado»laselrenovaiones barri o y lo han «si uado»  e laaños ciuad en do sen ir a lo ch icos y chicas que viven en un l ugar «done  cosas» y se es a guso; quizás por esa razón sus prspeivas  uuro psan a men udo por quearse a vii r en el bar rio. El grupo de ch icos y ch icas adolesen es co los q ue se h ra  jado en el Bess-aresme de Barcelona vve en un barrio eri o que en los ú l imos años ha exp erime nado rans raciones babios ísicas han sioypolém y han lugar a imp oranes m m orque lógicos sociales.icas T odo ellodado ha mejorado la calidad < v a de los adoles cenes enrevis do y ha rerza do su senid o < erenenia al barrio y a la ciudad La mayor pare de esas  rvenciones han afecado a los epacios públicos mediane la  ovación y la reación e nuevos espaios Los espacio s pú bl icos son l ugares enrales en la vida coid iana < lo s ci cos y chi cas adoles ce es y consi uyen, ya e es a eaa 141 vital un regio para sus interacciones y activiaes (Ortiz et al 20 1 4) . Las aciones y activia es realiz aas e n e l tiempo li bre por chicos y chicas coi nc ien con lo observao en estu dios prece en tes: toos/as muestran una lara preferencia por los espacios e nueva construcción  a mp lios e diseño moerno en erte con traste con las eicacione s el entorno en el qu e vive n más ant igua s y ensicaa s yPreeren tambié por n por que en elly os pueen realizar por ser estos menose spacios ecuentaos suslomiliares otras personas e la comunia vecinal. Esto les a una tranquilia y una privacia que no encuentran en su entoo más inmeiato. as chi cas y ch icos a olescen tes tiene n una visión muy posit iva y pragmática  las intervenciones urbansticas. Valoran muy posi tivamene qu e la gen te de otr os barrios e la ciuad y los tu ristas vi si ten el Bes s Ma resme . Según ellos/as, l os camb ios han puesto al barrio el crecer mapa m ciuaanos/as hecho en h ace suen sentaltie mielosnto e per tenenceiaBarcelona al ba rrio. y [Ante s el barrio] era la parte olvia este a e Barc elona  (Unai) Sin embargo, y paralelamente a estas opiniones tan positivas cr itica n aspec tos relaci onaos co n el au me nto de l a eicaci ón e blo ques e pi sos y hoteles (q ue en a lgun as ocasio nes han provocao que eseensusla inversión balcones hayan ver el mar) así como erroche aa laejao escasa e utilización el entorno elel Frum. [os cambios urbansticos han sio para bien. Lo que pasa es que ahor a hay m ucha casa  m ucho ei cio. [.   ] os eicios que te ta an too   . . ] . os turist as, ¡es to s que e s u n cambio! (Ona) El us o y la apr opia ción que hacen cotiia nam ente  e los n uevos espacios públicos son un ejercicio e ciuaanía ya que en ellos expresan su ientia la negocian y la representan. Por lo tanto su experiencia y valoración es muy importante tanto para evaluar los resultaos de los proyectos urbanísticos realizaos como para el iseño e los turos. as chicas y chicos aolescentes opinan sobr e su en torno y man iestan sus propi as re iv in icac io nes.  a in 1 42 v s gó  pone d ma ni esto que la de nici ón de «SU» arri no  ic n por qué c oin cid ir con la delim iación adm i israi va, ni con 1.  ncia de lo que sign i ca el ar rio para las personas a dul as e l   sma comu iad. as experiencias de los adolesenes con el eoro no puede  s  arse e su re de ami sades y son esas l as que dan seni o a os que ción ecuenan convi de riéndolos en dades. lu garesCo signi sus caiv la con sruc y el esayo sus id ei prác-os p a rsacios  as espaciales les dan signicao, los uiliza, los inerpretan, los  cin y los trasgrede. En coj u o los es pacios p úb licos p referi os y los q ue más e  an son cuaro el cero comercial Diagoa l Ma r, el parque e a oa l  ar, la play a y el espa cio del Fó ru m ( Mapa l). El cero mrcial es el l ugar de ecue ro po r exceleci a: on de va , m ira, nracciones y a veces cosume. gusa porque s ( ie as, barees s, bolera, ci nes) yencuenra hay gee diversas conoc ida e su d. A ll í las chica s m ira más las  iendas de ro pa y lo s chicos se   más e las ie das e epores, l os videoj uegos y oo s/as pasa  rato. ocaizar sus cuerpos en esos lugares creados y pensaos  ra adulos represena ua exploración sica, una represenació de s ideidad y u na rm a e ransgr edir un espacio esec iam ee lo. El parque Diagonal un espacio amplio yexpresarse con isinos ienes, es oro de losar, lugares donde pueden co stae li berad. L es gsa porq ue es «ranq ui lo », «b oni o» , «a mi o» y sobr e o o porque en él «Se puee hablar» .  o m ismo les rre con la playa, que calica con ajeivos parecios: «ran l, <relajane», <ueva», un lugar ode «Se está bien». En a ida, cua nd o expl ican qu é h ce en es os espacios, el «hacer» e  o de me os y a que lo im porane es que el en orno les oe ce  sib il idad de vados. desi h ib irse r elacion ádose er e iguales si ser m asiado obser En el parqu e hay una monaña onde no hay n unca naie y e puees umbar y escuchar música co las amigas, e relajas y todo . . . [. . . ]  Y e la playa hay el espigón, uas rocas donde te sie as con tus am igas y puee s hablar raq ui lame te amb ié . Móica). 143 MAPA 1 Y EVITADOS ESPACIOS FRECUENTADOS, PREFERIDOS POR LOS CHICOS  CHICAS ENTREVIST ADOS ¡ Mr Mrá O Es  euens 6 pck pf  Es viad Nt  50m El Fórum s otro d los sacos d su cotdiandad, aunqu mos cuntado ya qu no a todos ls gusta. La mayoría rconoce su monumntaidad ro lo consdra vacío d condo y dsarovchado. Anqu está rsnt n sus tiraros no s un nodo stratégco n sus rds sacias, xcando cuando s cbran stas scias o fstivals Obsrvamos ambén dfrncas d génro dstacabls n la gsió n d t m o y n los r ocso d a q sc ó n d aton om ía. La mayoría d los chcos y chcas saln d noch, prcalm los  ns d sma na , ro x stn d frncias n c  to a las hora s d rgr so o l hcho de reto ar solo s o acomaados/as. Las opi nions tano d los chicos como d las chcas concdn con st diagnóstco. 1 44 o me pone u l m ite pero yo suelo l legar tem pran . Cua ndo ngo partid o, de vez en c uand o, suel o legar más tar de porqu e a lo mejo r nos vamos a otro l ugar y suelo legar tarde . . . Cuando enemos p artido e ra a lo mejo r es demasiado e jos y regresamos más a rde . . . pero . . . mi madr e tien e con anza en mí, y y o me  cu idar bien. (Oa) as chicas se siente n muy observad as en el espacio pú b ico. Son muy consci entes que su cuerpo es cons iderad o un objeto se xua  y a omodida d, in seguridad o e mi edo que es causa provoca efecto trictivos en su uso de espacio. Una muestra evidene d hasta  u nto la estruct ura patria rca acta a os y as adolesce ntes en d spacio público. Anes todos os ahora habitantes máshay o meos América Latina, en miran barrio muchosespañoes moros.  de Y yo cuand o en ro me sie to muy observ ada porque siem pre rzan miand o hacia mi po tería. P: Pero, ¿so  os ho mb res os que te incomoda? Sí, as mujeres no, poque siempre están mirando al suel o. . . (Aina ) Cnclusiones on estas i vestiga ciones hmos pret endid o demostrar a ecesida d  i ncorpor ar al estudio de os es acios púb icos no ún icamen te a spectiva de género, sino también la de a edad. E nuestro caso  o hemos hecho en eación a a inncia y a adoescencia, peo mbién sería posib e hace rlo en relaci ón a as pers onas ayor es o a l a obació n adu a. Cada un o d estos grupo s de población hace u n uso patic uar de o  espacios p úb icos y ti e e ecesiades y d eseos  relaci a estos nos spacios que pitido ueden c onverge d i ricompartir. Estosónestudios han perm  legar a conc rusio ones da en  mbos casos y concusiones escíca s para cad a una de a s a de edad estudiadas. N iños y n iñas, de l O años de eda d, comarten  a opi ni ón de q ue su p rincipa actividad du ran te su tiempo i bre es e  go. En re as ni ñas se observa una mayo divesi dad de activ idades aid que en el so de los n iños y en cam bio elas dispon en de un a  nor auto nom ía (l ugares cercano, it inerarios c ortos pa ra ci rcuar 1 45 por la alle en sol itari o. Toos los n iños y iñas ci nci en en señala r la im portacia e  isponer e espacios veres, g ranes, li mp ios y ien otaos en su s arrios y ciuaes y maniestan su preocupación por temas meioambientales como la contaminació acústica y el aire, así como por aspe ctos reacionaos con la segur ia . Abu ao en es tas opi niones e ni ños y ni ñas, tamién l os/as expertos/a reconocen necesiad e ique las ciuaes gan ón e espacios des juego que estos estén ntegra os en la i pl spon an icaci y e a urb anístia. T oas e stas persoas coi ncide n en que son necesarios para el recreo , el descans o y la socia izaci ón de los/as i ños/as. T ambién man i estan su pre ocupación por a calida el e qu ipam iento, el mantenimieno y el tráco e entoo. Toas est as observ aciones nos lleva a pro po er que e l  iseñ o e los espacios púbicos también tenga en cuenta las prácticas, los y las necesiaes esp ecícas e estos gru pos e pobai ón de eseos meno r ea  La pobación aoles cente tiene tamién su particular visió n y experiencia de su en orno c oti iano y e los espacios pú bl icos e las i uaes o barrios o ne resien y así lo han exp resao La aolescencia e s u n períoo en qu e as conexioes emoci onales aqu ieren gran importancia, tanto si se rata e conexiones personales como e conexio nes co n los l ugares En nu estro e stu io e caso a e xpe- rie cia earesme vi da coti ia arame e la polación en teios e uan e arrioísticos el BessM es gene nte positivaa .olesc Los cam que ha su io el barrio ese la elebr ació el FOr um e 2004 y la eicaión de uevo barrio e Diagonal Mar no son necesariame nte vistos como prolemá ios por e sta aja de polaci ón . os perciben como cambios q ue han cotri bui o a me jo rar su calia e vida y su sentido e per tenecia al barrio y a la iua. La creaión e nuevos espacios públicos en e espacio urano proporciona para apropiarlos porque la pobla oportuniaes ción e más epara a ocuparlos aú no se ha iny stala o en ellos. Si aemás se trata e espacios cercanos al lugar e residencia o al instituto, pero a la vez poco ecuetaos por la polación aulta e referencia e estos h icos y ch icas , el i nterés po r esta n ueva oferta e espacio púb ico au me nta. Y si aemás s e trata e espacios con un  iseño, consiera o por esto s jóvee s, moerno y atractivo el éxi to en cuanto a su uso otiiao está asegurao. 1 46 ab ambién sacar el cambio n la prcpció l barrio ¡ O por par e sus habi an es como por pare  e resen es e  c ro s b arrio s  Bar celon a o por p ar  u risas que anri orm ene 1  0 euenaban sa par e l ciua. Esos camb os e percpción   bié n cn rib uyen a au me nar la auosi ma respeco al barri o y a la ua por par e los/as aolescnes. A esas visi ones carg aasen rlació op iminsmo orsealgunas voces cricas a lasyepragaismo i cacio nes  e enpesar y el tpo e acivias que aran. Chicas y chicos aolescens  a iesan s u opi ni ón y sus rivn icacoes n rela có n a un e s  io qu e sen en como propo y n el que se sen en i ncl uidos en l  da n qu se les prm ui l izar  l esp acio públ ico y opin ar bre có mo s o com o eber á sr . Usa r los s pacos, apropiárs los,   ar o  nerven r  rec am ne obr e ellos suman acividaes y tes ana. ue convergen e la rmación e u seno e ciu En  ur n vesigaciones prnm os con inuar pron no en esa emá c am pl ian o el aná lsis a oras as y con exos gocos. As mi smo, nos i neresa, aemás el génro y la ea, i ncor r nuev as imens ions al anáss como el srcen, la cla s social, la  ersa nci nal o la sexal ia y visib il izar como la i nrscción  t sas conicon a la pr cpció , la negociacón y la vvenca   spac os públ cos  la via c oiana e las pr sonas. Refencias bibliogr ácas M.; ÜRTZ, A. y P ATS, M. (2006a), «Geograa e la nncia . Espaco s d jugo en c  uas m edas  e Caalu ña» , Geoaphicalia,50, pp. 526. BYl.IN, M.; ÜRTIZ, A. y P RS M. (200b), «Chlrn an BNA, Children' Geogrphies, in Meirranea ciis», 4playgrouns (2) pp. 173183. BJA, M. ; Ü RIZ, A. y P RS M.(2008), «Conxons óricas y moológicas nre las gegrafías el géero y la innia», Scrita Novavol. X, 270(4  ) . h p:/ / w.ubu/geocr/sn/ sn270/sn2704  . hm BLNA, M.; ÜRTZ, A. y P RA, M. 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MJERES, BARRIO Y CAMBIOS EN E  USO Y  PERCPCI Ó N DE ESPACIOS  VIDA COTIDIANA N CONTEXTO RBANOS DESFAVORECIDOS: LA ROMNICA (BARBER DEL VALLS)* a Cerarls Ramírez, Fabi DíazCrtés, ria Dl rs Garcia R am n y Ant ni  Luna Ga rcía Itroducción os fecs de la crisis anciera glbal ha enid un ia sigl n gegra cm scialmene En el cas spañl,  stableci mient cnsticinal d el pag de la deu c m pri d bslua ha i apañad de la rducción drsia de la versió  p úb lica, l que ha su pes que en pcs mes es se hayan smn tad ls ava nces en pl íic a scil lgr ds en ls ú l ims int añs Esa crisi s, pr tan , s ha tr aslad ad rápida mene de  escala glbal de s merc ads n nciers que la rigi narn a la lidad nac inl y regina l r im er n la rduc ción de las pl íticas bl icas esaales y regin als pra llegar nal me ne, y c n era,  a ec la lcal  Ls barris más desvrecids de las granes ciudades sn al  n s de ls espacis que ms se han v is afecads pr l s efects cales e l ac ual crisis ( Laarra, 20  ; Obsrv atri Me trpli a de adri d, 2 0 1 3) . En ess res es dnde s ha nenrad el semp le y ls ef ecs dev astadr es dl debi li tm ient  e pl íticas blicas n materi de servicis scials, adems e ser lugares de * Esta i nvs1 igacin rmó par te dl pro ycto d investigain • Hacr ci udad d ls harris. graf ías dl gén  y d la da d n la cns trucin dl tj i ur ban o•, CS0 20 09 - 1 0 1 3 Ministri de incia  Innovación (20 0 20 1 2) y cmó cn la ayuda a l s r ps d n vtig acn Cnsli das d l Ge nrlit at de ataunya 2 00  GR - 1 2 1 ). 1 51 resenca e las clases socales más hmles, aspeto que no nos tene qe hacer olviar que esta mos hablano e barros h stóra y estructralmente esvorecos y scrmnaos (Hernánez, 1 99 7; Aras, 2000)  Así  es, es tos barros son pas ajes hu manos on e la pre sente crisis económ ca se recruece, pero también son los lgares oe se han ao y se an too tipo e estrategias e supe rvveca speración e st uac oes a versas des e el puno e vsta socal yy e urbano (Domnech, 2002) Observam os qe, muy a men o , las estrate gas de s pervvenca son herenca el conoci miento acumu lao por la ex periena e otros períoos e crs s n o my lejanos en e l te mpo ( n e el e spacio) ,  barrios que han o ev ol uco ando se mpre en ro e un co exto e margnación inuca Esta experieca olectva ha permto esarr ol lar u n er te seto e om u da a parti r e las re es e relacon les yrjaas lo largose heanlos año rto s másen uuros rmaci ón es elsoca ba rrio con el ta empo conve na e e te e onocmi en to par a plan tear r mas e re sis tencia y e spervi venca colectiva s Y el papel e las mujeres es entral en oo ello por lo q ue esta i nvestiga ió n inte ta analzar s papel en el proc eso e ostr cció n socal y mater al e barrio s e clase obrera como el que no s ocu pa (G il roy y Booth, 2004; V a ou, 20 1 0)  Las mjere s han ten o u n p rotagon smo m y estac able en el esarr ol lo e sus lu garesene los barrio s, tanto e redes como svia papel, ecomo ag entes ativen os lena reación l a com nia Al socales m is mo tempo, eteemos q e el barrio es una esc ala e análss q u nos permit e en tener, en un marco terrtorial b ie ef ni o , el ía a ía e los espacios rbanos ese la compleja (clase social, género, ea y origen) , actuar sobre él e in errelacon ar tan to proesos loca es como pr oceso más estructurle s (M ou laer t et al . , 20 1 0)  E n es te c apít ulo pr esenamo s u análisis prelim inar e u n o e estos « pasa jes o ee crisis y r essteca» , elenelel barr La Romn en el m nicip Barber  el Val ls, área io me etropoli tana ca e Barelona  N estro ob jet vo es aal izar los cambos que se han o procie no en los espacos e va c oti ia na, fjánonos tam bén en asp ectos relaconaos con la construcción de la ien tia e barro , l a partiacón as ociat va y las pol íticas púb l cas. l anál is s se basa en  6 ent revsta s en p ro nia a m ujere s resentes entre las qu e se incl uyen os a té cn cas m n ici pale , e ntrevstas que se 1 52   aron e t re el otoño 20  O y la p imavera l 2 l  .  el trbajo   po esarroll ao ta mbién hemos uti l izao otras t écn icas cua     vas como la observa cón participativa la recop il ación y aná li sis  ocumenos textuales y tográcos e arhivos públicos y e onas e nt revistaas. El ar rio de La Romica de Barber del Valls  omn ica es un bario relativamen  pequeño (  5 ect áreas oximaamene) sitao en la onera entre los térmios mui  ales e Saba ell y Barber e l Valls (Mapa  )  Sus o rígenes se  an en la é caa e los años  950  u rae el perí oo e creci  to in ustri al vincu lado a la expansi ón econó mica español a bajo  ctaura el general Fraco La mayor parte e las casas son e onstrucción construias de rma csiel artesanal por e  miem bros eylasero mi lias qe s e asetar on en barrio uto  mgració iterna proceente e las áeas meos esarrollaas l sur e la península ibérica n marz o e 1 959 se camb iaro n los lími tes m un icipales y el ri o se iv ii ó en os q uean la part e nor te (eom in aa Creu  Barber) e el muniipio e Sabaell y la parte sur se manuvo en los límites municipales e Barber el Valls, pasándose a eo mi nar Laprincipal R omne ica.población u raneel écaas este el barrio ba aislao  núcleo municipio cualesta recibía  mayoría de los servcios y e cambio estaba conectao co el inuo urbano e los barrios el sur e Sabaell {Bnamusa et .  2002;   A, 2007. a Romica se esarrolló rápiamente urane la écaa e  60 y la prim era parte e la e  970 . El na l e la ictau ra y el i ncip io e la emocracia coin ci ó en el tiempo con la cris is eco mica y la esaparic ón o rec onversi n e parte el tejio  nd ustrial   aba trabajo a mhos de los esde tes el bar rio sobre to en d cor text il . A miso tempo que se prouían es tos ab os en   sfera económ ica tambi é se iban consol iano  amparao e el evo ré gime e mocráti co las i ferentes a sociaci ones ve ci nales y   uevos co istoros m unici pales elegi os en las urnas Du rante las aas e  980 y  990, coi ncieo co n la me jo ra de la econom ía l país el barrio creió con nuevas promocioes e vviena en 1 53 bloqu es, las asas se ero r emodela do, c reme ado e l  úme ro de plaas y su calidad, y se costruyero nueos equpaeos munc pale s de carácter comu i tario. Desde nales  e los años 1 990 y pr cipios de los años 2000 el barri o em pezó a recib r nuea  mgra ó , sob re todo pro ceden te de Aérica Latia, el Magreb y uropa del Este, aumentado la presió sobre los escasos servos públicos y socales. La posicó perféria del barrio e el cojunto del ucpo, a meudo sg caba también estar al nal el orden de proridades del día a día uicpal Los crecenes problemas sociales y materales dl barro y la  lta de r espuesta de los d feren tes gobernos munci pales, crearo un a  uea desafecció por part e de la poblaci ó de La Ronica con la polítca local. Por cosguente, la asociación del barrio se reo rgan zó con el objet o de ganar peso e las de cis io es de laEn polítc icpal. ca t e ía 29 90 habitantes y el por centa je 20  a mLaunRon de poblacón extranjera era el  2,6% , un porcen taje  ás al to que el del cojuto de Barber del Valls (co u 7,7%), pero mucho menor que el Distrito VI de Sabaell (que icluye el barrio de la Creu e Barb er, coli ndante co a Ro ica) con ás  e un 20%. a estructu ra sociológic a y de pr opi edad e las ii edas expl ica en parte el porcentaje relatiamente bajo e la reciente inigración extrestaco un taria puesto queeos la 20 mayoría en e barrio du rante al m añ os. de la población ha iid o n el año 2007, La Roca se ncluye en la uea Llei de Baris1 del gobierno de la Geeral tat de Cat al unya (DPTOP, 2009), por la que s e desarrolla un p la para la r ehai litac ón y re oacó  e aque llas área s u rban as más empob recias o deterioradas de Ca  talu ña Este pr ogra a partí a en su orge  de u marc o amb icioso de partic ipació  p úbl ia e el d iseño y  esarr oll o de los d ferentes proyectos urbaístcos y com u ta rios  nan ciaos. n el cas o de a a ei de Barris ( Ley d Barris) (2/24)  la ri era ly arbada pr el arlam d atuña iendo resid d la Gnraitat Paqua Maragall. st a ly naci ó n l bjetiv de rgnrar á reas u rbanas y barrios u staban suind prcss d e degra dación urbana   n roblas sci aes gra vs. Esta ey v n vigr hasta l a  201 y benefció a ás de 9 barri y núcles urbano  tda Catalua 1. 1 54   ca, el royecto e la Lli de Ba", ha  clu do act uaco es e n  tera sca l y comu tara , pero las actua co es que más ha  l ferao y más volum e econó mco ha s up uesto ha s o las e   ter urba ístco (a rreglo e aceras, aparc am e to y rer a e   lr as e cl usón e ascnsore s)  Esto ha sup ueto que, al  na l,  r ogramas esarr ol laos hayan ac etuao má s la aten có a casos  retos y atuaco esy espe cícas e carác ter u urba ístco m ás quela  as estruct rales e carácter soco-com taro, egraas r y con pro yeccón en el tiem po. Desgracaae nte, el est al lio d  la crs s actua a es i bujao aú n más algun os e esto pr oyectos ecetano el sentmento e escréito sobre la accón polítca  r parte e los resetes el barrio, s olvar que para el año 2014 los  nos pú blcos para este p rograma , t anto e la Genera tat o el a yu ta iento, an esap areco U aspecto que,c om poru úl taros tm o, en q uerría os eelstacar ausenca y esacos el n teror barrio,es lastu áose d e lazas dos ello s en los l ím tes co el  úleo urbano ce ral e Barb er el l ls Desta ca e rma part cu lar el eje ve rtebra or e too es te aco, el paseo e la Vía Sant Oleguer, one a uno e sus lao s e    el C entre C ívc C a n'Ami guet y el parqu e anex o ho món m o, l asal e Joves La Rom a y las  stalacoes ep ortvas e l cl ub e  bol e l barr En el extremo e ste e l barro, s e s túa el parque  el ll enar  e re localiza la gle s aeromá Sata (e que toma, oe el n omb el barro) y os qu pana mee ntos e Mara eseñaza bl ca, e l CI P L Rom ca, en el térm no mu c pal e Sabael l y l  stt ut La Ro ca Eta car acterístca urbana ha supuest o u  laro conconameto a la hora e aalzar la va cotaa el rr o, al  ismo tempo que a pues to  e man est o la apar có  uevas estrategas e la coguracó e espacos e va y e abla que va ás allá e la clása vsón ere epacos blos y espacos prvaos (Fotografía 1). Prces de urbanización de La Rmnica e dentidad de barrio Rmnca, oo tantas otras zoas e la regó metropoltaa e Barceloa, es u arro e mgrates,  gete e orígees deretes que copartero exerecas slares e el proceso La 155 FOTOGRAFIA 1 BARRIO DE LA ROMÁNICA Fotografías realizadas por Rosa Cerarols . de aseamien. De auerd cn ls testimnis enrevita  sent i ien t de  m un idad s e frjó du ran t las pri era s etap s e fraión de barri, cuad la ayuda reípra etre vi y veci ns erm it ió le van ar la mayr ía de las ca sas de bar ri y ven  ls rblemas i iiales de la de i naestrc tu ras y e serviis u e la admi ist ración lcal  e tta l   les pr pr ia ba. Se tra t de u prlses n exhmildes cl us iv dequeeste rr i i n ue respnde a rea idad e barrios se ba cnstruyer a partir de la la cu area de sigl pasad en Catalu ña y Espaa ( Pérez  Sáhez, 2008; Ml iner y Yss 20 1 O). Las arrativas de las mjeres pe un aet eseial en esa estrategias de clabración etre e veindari y e la reación de la asiaió de veis del barri en ls últims añs e régimen aq u ista Se gú ls rela ts  e algunas de elas, m ietra  ls h mbpagi re pba asaban la mayr arte deelt u ie idad p erdealas del ri barri , elylas cm las tare a d méstias, at ra se upaban de reamar ls erviis y las inaestructras ecesarias par a ss i li as sin lv ir que muhas e el las tr abajaban en e ectr t extil ,  una im prta e im planación e la  a: Prque las mu je res tenían qu e  idar la cas a y tdas traba jaban , pr l mens las q e   . . d e las de ba rri , rque la qe  iba a  56 trabaa, trabaaba e la fábrca, la ota tab aaba   . ormalme te toas las e m e to o era e las que b a a la  brica a trabaa  (Motseat, 59 años, casada, co trabao remuerado, acda e Catalu ña , eside ese muy pe queña e el baro) Du ra te los  es de semaa, o después e la jo ada de tr abajo , as ombes en lapacostruccó las vvedas las  bás casabaaba com uitaras ra urba izae el barrio co los yservcos  ;cos, mientras que las mujees tambié estaba presetes e la a zació y seño de los t rabaos: S sí, la pagaba los vecos Y las cloacas, las pmeas que pusero , las puser on los v ecios [Las muje es] ea las ueñas e toos los sentdos, y era las que realmete lo maejaba todo, too. Porque sehabí a que hacer o e la calle l as muees: e trabajo, ogaza . losalghombes e laera eza sc a, t abajar, hace las z as para poe la cloac as, peo ell as ecía «aqu í u a cloaca, y aqu í po qué tee que sal ir . . . las casas tee qu . . . y ellas e a las que lo ma daba too. (Dor s, 70 años, casad, u bil aa , acda e Adal ucía, es e esde m uy peque ña al baro) Si hayyque re salta  es melagiao q e ue autocos ayud a meor a etee rrago apego al ba urio pro ceso trucci ó y me  a e las casas La tipo logía e casas  e esta p mea époc a es m uy c l la . Por lo geeal s e tata e u a casa de pla ta baa co u o o os espacos sepaaos a modo de modestas ab taco nes y u p ato ero, que se ut l ba como retrete, como l uga e almaceaje o cl uso como pe queño c ora l (co coe os , pollos etc.) . as casas m bié ebí a tee ua certa ex ib l ad e usos , y a medid a que  ec esid aes e la m l a  uclea o la  m lia extesa cambiaba ,  ba coporado uevos espacios o uevas cioes para los pacos ya c eaos: d Hay las habtacoes, el pasi llo y el comeo costure ro, l coc a y el baño , y l uego ya es taba el pato , y al al e l pat o el cober tzo. Y m tío hizo  .  hicer o la te aza y la escaler a  .  Ellos sí, pasaba al e trar, tenía q ue pasa r por toa la casa par a en trar 1 57 al cbertz o ue pasa es ue m tío hzo el cobertzo y u parte era el comedo r y otr a la habitació , lo partero e dos  Y allí, pues, estuvo vvedo m abuela, m tío y m tía, hasta u e tuvero d i ero par a comp rar el terr e o, y después mi tío hzo la casa. Y cuado tuvero la casa cuberta p ues se er o all á. (Dolors, 56 años, cas ada, o tr abajo r em uerad o, acida e Catal uñ a, reside desde muy pe ueña e el barrio) Las casas ero costru das paso a paso, muy despacio y mie tras el trabajo de los hombres era dametal para la parte más estructu ral, el di seño y e l acab ado f al de los suelo s de l a casa y la distribucó de espacios, era resposabilidad de las mujeres. Así pues se observa un a dv isió  sexual del t rabajo y de activdade s e este proceso de u rbani zació popu lar del barrio: E tres años, poquto a poco . . . me acue rdo  ue lleg amos que e ra pasado el ag osto . . . y como todo era ter ra, s olamente había co un poco de ceme to en el suelo e las hab tacioes y el pasl lo , pues m  padre, deprsa y corren do, p us o el suelo en el comedor, acuérdate, para poder celebrar la Navd ad en el comedor, porque s no teíamos el selo de terra. Y claro, tenían ue venir ms tías, y todos los que había, todos los mliares, y él uería ueaquel el selo parallegamos. poder celebrar de año,estuvese el primerpuesto, año que ego la yaNavdad después cont in uamos haciendo más h abitacones, y la cocin a, porque la coc na est aba en el patio , cu bierta, pero en el pato. Y l uego, ya a los dos o tres años ya t en íamos l a casa decente, sobre todo las paredes, porqe mi madr e cuando lleg ó, de ve ni r de Andalucía, con s us sas tan bla ncas, y l legar aqí y ver los tochos . . . pob re mujer, le et ró bueno . . . se quedó paral izada. Pero beno, al otro día, se copro lev an tó,cal, eya puso comprar ha sta la Cruz, qe había drogería, su casa blaca. (Gertrudis, 77u a años, casada, j ubi lada, ac da e Adalucía, reside d esde  uy peueña en el barrio) El proceso de desarrollo del barro ha ido creado, por tato, com plejas r elacio nes etre las pr mers gene racoes de reside tes. Las ujeres, e part cula r, compartiero u coj unto de experie 1 58 báscam ee estat egas e supee , q ue las ll eó a oga  rse e ma  mal pa oga za su a  mil ar y eclama   eos secos o mu taos Me tas los homb es socalba be, las muj ees habtu alm ete e n la ec a uate su temp l lo hcía e su  ut  a aa y com patía caa aspecto e sus as con otas mujees el bao. Estas páctcas femeas, sobe too óas,  re las, ha pe sos y m l asua queete ha e e elco bao cas tocoa o g eeao co ul acó el luga, la v  b ao , y e este se to, e  las et estas ea lzaas apaece co ue ca u ete set m ie to e ogul lo y e et ia  e bao  se ha pasao e ua geea c ó a ot : Sí , m e sento e La  om ca Yo ceo que a to o el mu o que se lo pegu tes, se se te e La Rom n ica . B ueo al gu o abá que o,? peo y cuano po allí eo, « ¡uy! La Romo, ica peo s. . este bah esablas tá tal, ¿ ot ?»e c Peo yo¿e estoy muy ogullosa, soy el bao  e toa la ia. (Rosi, 32 años, tiee paeja peo i e e el hoga m l a , co tabajo  em u eao, acia e Cataluña, ha o sempe e el bao)  Vemos, po tato, que la autocostuccó el popo bao de las casas h a sio u elemeto e seca e la costuccó e  eta os e baio el seto e comua. poceso y que eecas  yectame te po las p measU geeaoes  b tao el bao y que a o ta s t eo a geea c oes más vees. Cmbios en el uso y percepc ón de los espacios de vida tidiana s espacos e a cotaa e el bao ha o eolucoao as m uje es may oe s os habla e u a a cot aa oe prouccó, poucció y temo lbe se hibaba ete los spacos teores e las eas y los esacos exteoes e s calles, peo seo el elemeto cetal la ea Ya hemos blao e la mpotac el poceso e autocostucó e sa s y el popo bao , y ahoa os cet aemos e el a ál s s de la a cotaa . 1 59  pr mer l gar, destacaríamos la  portac a de las casas com partdas, donde se alojaba a m lares o  ueos reside tes, a m e udo a cambo del p ago de un aqu ler Se qu laba ua de la s habtacoes de la ca sa a persoas solas o a parejas e i cl uso m l as, que debía com part r co los d ueños de la ca sa el resto de sercos , como co cas y baños  algunos casos estos arrendataros eran paretes de los propietaros, pero epopularmete muchos otros casos, la get e que alqu, era l ó aquellos espacios (llamadas o estacas) estades completamente descoocdas y el período de permaeca podía alargar se arios años o cl uso dé cadas: Delate de casa tambié había ua señora que teía la casa El la  ía arrba pero en los ba jos tenía estancias y lo teía todo aqu lado Lo que se decía ate s esta cia, había un pas ll o larg o co habtaciones y e ca remunerado, da ua ía nacda u a m a ( Dolors, 56 años, casada, con trabajo en lCataluña, resde d esde  uy pequeñ a en el barrio Lo que pasa que a lo mejor n una casa de dos habitacioes pues había dos m il ias, pero   como ahora es tá pas ado co la inmgracón, que un piso pues gual hay 20 personas ¿o? po r eso, porque en ían lo s padres, traían a l os hij os, y luego ya con e bacomp pasando y a se iba s tuand to yrm se iban randoel tiempo psos o terrenos para hace or u otrapoq casuia(Doris, 70 años, casada, jubilada, nacda en Andalucía, resde desde muy pequeña e el barro) sta particular relacón etre propietaros y arredataros por la que se debía compartir durate largos períodos de tempo los espacos comu es de la casa pone en cuestón la tra dc o al di is ó entre el espaco púb lco y el p rado Hoy, la mayor parte de la s esas han desaparecdo y l a m ayoría de la get e ie en casas cop radas , o psos e los e difcios qu e ero c o str u dos du rate las d écadas de 1 98 0 y de 1 990 . Si  emba rgo, la misma ge te recooce e la  m gració rece te i teacoal el msmo tp o de estr ategias que ellos u saro cuan do se tras ladaro por pr mera ez l barro  Además , el barr o o era solo un espaci r esidencal o el lugar de reproduccó sio q ue el barro  e convrtó també en u espaco 1 60 d e  oducció , e el que las mujere s jugaro u papel predomi na      s casas se trsr maro e pequeños tal leres txt iles, oe    día y trab ajaba mujere s jóvee s del barrio , da do sericio a la   uctu ra bril e la v eci a Sabadell  Icl uso e aguos c asos,    o las mujeres se casab y te ía hi jos , se ll eaba parte de este    jo a casa y seguía trabaja d o para esos tal leres  esde cas a:  cas a, abajo , yo cosí a pi zas Fui    estuv e ra bajao e Cal o li s u año y meio cas i os, y era costurer a e pie zas. Me raí a piez s e c aa  .  Luego cuado sub imo s aquí arri ba ya lo había ejao, y  espués e cuao ya me ije « bueo , pues  .  » ,  m í e gusaba eso de los trab ajos  a uales y tod o eso, y  e puse a eseñar a bor dar. ¡Y es cuch a! Bu eo . .  much as chica s asaro por al í (Car me , 78 años , cas aa, j ubi la,  acia e Catau ña , reside es e uy pequeña e el barrio) Cabe señalar que el barrio era e rcibio co o u  espacio egur o, o de los espaios e juego se extedía más all á e la i ie a, y e el e exis ía u a i tesa ida e la cale. ste es u hecho a estacar  u barrio oe os espacios públios raicioaes coo, por m plo , ls paza s, e ra uy escasos: E eibarrio, icia, j uguée a laelgbarrio, oma eiel los barrio, j e ugué a la omba e eyo isacé reyes el barrio Me acuer o el Puerto Rco, de i r a comer alí co mis pare s los sba os po r l ohe chorizo .   Cogía u trozo e pa , le haa u  agujer o y metí a u trocito e choriz o ito. Mi i cia! [.  . ]  Aquí ha habi o cae,  iño s e la alle. Y o alí e E riq ue Gra ados, le ecí a a mi madre qu e me iba a la calle y me ecía que si estaba loca y aquí era oo el rao calle porque es barrio,reuerao, a gete se acida cooee(Sara, 35 ha años, casaa, tiee trabajo Caauña, ivio siempre e el barrio) stos relaos y experiecias os poe e maifesto que las icas coiiaas reeja us aros procesos e hibriació re las ra i cio ales i isio es e re espaci os pú bl ico y privao y pacios prou cti vo y reprou ci o Y e estas pr áct icas el papel e 161 la muer ha sdo ametal, sobrepoédose y superado ua realdad de por sí dscrm  natora Políticas públicas de barro  participación Co la etra da e c oa eto de nuev os equ pam entos c omutaros,Labáscamete Cívco Canes 'Amguet el Espaco Joven R om a, doseldeCetro las  terveco pú bl casymás de stacadas e el barro, se acaba cosol dando n proc eso qu e rom pe y etra en contradccó con estas práctcas de hbrdacó y, hasta certo pu to, de auto gestó  Las polítc as  st tuc onales d e creacó d aestructuras públcas como el centro cívco o el equpameto juve l han llevao n exorab leme nte a L Romn ca, como en tantos otros casos, a u a estr cta compart me tacón y especal zacó d usos e ue ha acom pañ de dasom de u a estrcta gulac ónestmos unespac cp aos,tr qavés de lasdo norm atvas adas «cívcares»Un proceso q ue ha ahoado más en ua c ert a vsó con ctva y dscr m ado ra e lo jov e » y que o ha ayudad o a  rtalecer l as relacones ntergeeracoales Este pr oceso ha o ebl tad o l as d  ám icas pre vas y a comen tadas y que ayuaba a que el barr o en s totaldad era pe rcb do y vvdo () coo u espaco cotdano dode reproduccó, pro duccón tempo y eso,paco pod ían u ent desar roll o os costructvo com ún y, copartd (  ) done lostener lím tes re espac públ cos y los p rvados e r menos ev dentes y ( i ) ode el pap el  st t ucoal  tonc es  exstente  era sbsttu do por d feren tes rmas de autogestón comu n tara má s o menos rmale s que permtí ua experenca vvecal erseccoal que había rerzado los lazos comutaros. La gen e de La R om ca tuvo que vencer muchos problemas desde el pr mer mome  nstalarse ede el barro y dcha vorecó la aparcó deod alferente s t pos actvs mo socals tuac y deó u destcable senmeto de perteenca al lugar Hemos observado que e las pr meras d écadas de rma có n del barro el papel de las muer es en los actvsmos  rmales e  mportante aunque ese de hecho vsblzado Co los prmeros ayutametos democrát cos en 1 979 apa rece en el barr o un a n ueva d ám ca po l ítca a n vel local , mucho más rmal , do de los a tguos líder es de las 1 62   icioes de vecios se icluyero e las listas de los uevos  i dos políticos. Y a sí aparece u asoc iaciois mo más i st ituci oal laramete mascul i izado que debil itaba el pap el acti o q ue las jr es desarrollaba e  otras esferas meos i s ti tucio ales: No, o, o, porue si acías algua cosa para reclamar lo coabas eestá. cas a(yCarme luego lo, 78 come e re síe o o , y ya añostaba , casada, ju biellos ladya,decía acidapues e Catalu ña , resid e desd m uy pequeña e el barrio Pero e los úlimos años las mujeres uele a teer protago mo e  las a sociacioes del barrio y e sta presecia me i a e  ricipales etidades brida ua oporuidad excelete para rzar e ppel de la m ujer e el barr o. Estas  ueas geeracio es de uje res delaede u asociaci o is mo másyacivo , e elibre: que se pueda mpaiar producció, la reproducció e iempo Ates me decías qué pieso yo de las persoas, de las mujeres que o ha rabaado , que o a  dejado, o que se a , de gua maera , cen rado e l a casa. Yo ego que decir qu e m ucas de las m ujeres que teg o, q ue teemos e l a asoci ació de  ecio s, me han come ado que s e sie te m uco más re aizadas e l a asociació de ecios siempr. ¿sto ya es ua buea osa,que o?cua (J úl iado, 5estaba 2 años,e cacasa sada, tiee traba jo remuerado, acia e Cataluña, reside desde muy pequeña e e barrio Lo mal o que e cue ro de este barrio es que ay muca gete que sí que s e a quedad o e el mo me to barrio barrio, y qu izá a ge e más jove somos los que qu isi éramos qu e cam biara u  . pocoles la cos la gea e ere elqbarrio [ . .]  Este cuesta . .a. upero  poco la g mayor e te delqui barrio ue tiebarrio e egocio, porque so egocios de toda la vida que ha ido tirado y se a gaado bi e la vid a y que ya está bi e co mo está y quizá hay un sector que os gustaría promoer u poco y que se movier de otra mara. (Sadra, 35 aos, casada co u hijo pequeño, tiee trabajo remuerado, acida e Catauña, ha viido siempre e el barrio) 1 63 La Llei de Ba"is que como hemos señalado ateiomete ic lu ía la paticipació c iudadaa e los p rocesos de eovació y egeeació u baa ha peseguido u a cieta le git im ació ve ci al al tata  e activa espacios de patici paci ó e el bai o  el cas o e a Rom ica se obse va dec iec ias ya que la suped itació de las e mas u ba ísti cas (q ue o ha dej ado e se ayudas di ectas ylasalistas paa detemiados de esidetes e elua baio) itevecioes de caácte sectoes más comuitaio ha sido eali-a ad  Y ell o ha afectado de ma  iecta a los pogamas que teía  como objetivo la ateció  a muj ees, p ogamas que , e todo ca so, tam bié  se muesta como claame te de citaios en su esa ollo deitivo a actuacioes más dedicadas y diseñadas po las mujees el baio en es qe nc ió pel  que , e e las estos eda años? es, de las nec esidad detdel ectaan  qutuv é haiea pas ado Sí q ue había u as actuacio es y señali zacioes, pero a g ades taos ea muy genéics y  eamen te d ua te este ño ha caao ta to el tema de a  eodelación uba ística, co las ay udas que hemos dado a los ve ci nos pa a emodela los e di cios (oudes, o esidete e el baio, técica municipal que ha tabajado e el baio) M Yo sí qe estuve paticipando e u talle aquí mismo Se esuvo og a izando paa el desa ol lo de las m ujees extaj eas, que s e est uvo o ga iza do aquí    estuv o mu y bie  A m í o me ltaba tato peo po ejemplo paa la gete maoquí y paa las chicas  e Sudamé ica, e Áica, de o do eso    sí qu e lo    Se lo pa sao bie  y se queda o co algo d e ese talle [ . . . ] . E : ¿Se cosiguió algú ipo d e i niciativa pa a que o s siguieai s eu ied o o que hubie a la po sibil idad de ce a    ? M No sé, yo po mi pate, sí Peo había chi cas que lo estab a come tado tabié que le daba miedo que le va a quita la ayua si se peseta al cusillo Alguas sí, alguas sí peo todas o  Tuvo cotiuidad el poyecto paa el gupo de mujees que paticipasteis? M N o,  o, o  ( Maía, 3 5 años, made sepaa da co ua hij a pequeña , actual me te e el pa o, acida e e l extajeo, vive desde hace pocos años en el baio) 1 64 Peo teeos que esalta que e el caso e La oma la u peacó  e ce to activsm o vec al ya se había pouo a  e las  tevecoes  mpu lsaas po la L/ei de Ba"is,e pate b o al eseca to e las  á mcas e la polítc a e patos e  m bto loc al y a la poc ateci ó q ue ecb ía el bai o po pa te  a am  stació local A odo de conclusi6n y de rivindicaci6n: barrio, crisis  e papel de las mjes s caacteísticas socioespacales e hstóicas e La omia han cotibuio e a ecsva a la costucció e u ete t im eto e aag o e ietia e elaó co el baio Esto h ayuao a la ta sm s ió  e est ateg ias e supeivec ia, sobe do etos estacables e su pasao iaes ha si o m ame ales que ec haee cotiEsas bu os o aeal la cohesió  social n el baio. E efecto baios e svo ecos como La R om  a  espacios oe se puee geea oictos e feente í ole, co esultaos egativos o positivos, peo oe tambié a niativa vecal, geeaa a tavés e cicuitos tao maes mo male s, ha sup uesto el ma tei mie to e la coh esió  social  omuitaa eemos que ecooce quey e o so Al el mismo papel etiepo, las mujees ha so ametal poeste o tato tas estategias e supevieca tiee un ete comoete d géeo Y ello ha povocao a lo largo e la histoa el baio a h b iacó e los e spacios e poc c ó/ epouci ó y el saco públco/pvao, poeo e cuestó a vsió ígia ue se suele i mpoe es e ogasmos p olíticos y a caém icos La ra sfeecia  e esas estate gias y expee ias fem izaas e ua ea i ó a ota, o a paa gupos e e s etes e los ees o onsieamos clave oaesta y supea efectosorges más ngatvos e la atual ss eoómia Peo també hay que a vetir que esa tasm só  e exee  as ha sio sc o t úa e el tiempo y t ambié a  iel com u tario  en aspectos como el or ge y mom e to e ll egaa al baro , l a ea o los camb os e el uso y pecepc ó e los espa cos c ot ia os , ha  esto e ma iesto pu tos e vsta  ifeec aos y, a ve ces, o pues 1 65 tos en tre el ven daro. Y ara n al zar cabe señalar que una déb l nteracción n tergenerac ona o una accó n polítca nst tuc ona  que ate nde de rma agmentada o desgual a las necesdades del barro  conllea claras decencas sobre las que sería precso actuar para ayudar a rerzar la cohesón socal y la  da com un tar a que barros como a R om n ca han logra do gen erar hasta el m omen to. Refern cia bi bl iogca (2000), «Las periferas socales: los barrios desorecdos en las cudaes españolas» Documentación Social, n.   9, pp. 275 2 94  BoNAMUA, F (et al (2002), Del molí a l'rdina Passat ipresen de Barber del Vas Ajuntaen t de Barbe r del Val ls Barber  IA GY, F del O Valls. (Departament de Polítca Terrtoral  Obres Públques (2009), La L/ei de bais. Una aposta co//eciva per  cohesió social, General tat Ca talu nya Barcelona . DOMNCH, X (2002), Quan el carrer va ar  ser seu. Moviment obre societat civil i an vi poltic. 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Haca la  mp losón soca l» en 1 6 Observatorio etropoli ao de Madri es.  , Paisajs dvaas. Dspués l cic inmobiliaio: Impactos rgionals urbanos de  cris,Trafcante e Sueños, Madri , pp . 1 23  l 78 l'ÉREZ, V y SN  Z,  (2008)  Mmoria ciuna  moviminto vecinal. Madrid 1968-2008, Los Libros de la Catarata, Madri. VA IOU, D mation (20  0) thern , «Gender migr ation and, en so Pike cio spat tr ansrin Sou Euro, pean Citi es» , A. ; ial Roríg uezPose, A.; Tomaey, J. (eds., Handbook of cal and Rgiona Dvpmnt, Routled ge, ondre s, pp. 47048   vv A, (2007), Sabade Sud La Cru d Barber Campoamor Esproncda i Ls Trms. Ajutament e Saael i Museu d' Histri a e Sab aell , Saadel . 1 67 MAPA 1 Barbe de l Val s B io e La Romn c • l Espac públi 0 11 uran Edifo R F us  Ba To ác Nc,  5 .  p  nl    ln Grf de Cya ICC) (E 1i t SO 0/ 1 68 V  . TRES ESACOS ÚB  ICOS Y N  SEO: USOS  NCTDMBES DE S PROCESOS RBANOS Y SOCALES EN EL RAL DE BARCELONA*  GCar ta,en Díaz Rodr ígez Lzan Madro r naArmas GarcíaDíaz Her, Ana era yOrtz Mª dl E capítlo centra s atención sobre tres espacos públos del o del aval de Bac e ona ons tr idos en la pr im era década del  o XXI {l a ram la del Ra va , la plaza Vázqez Montalbá n y la Plaza  vado r Seguí)  Son espacos q ue han t ns frmado la pa rte su r del o y qe han oecdo a los cudadanos lugares abertos necesa s en na d la s áreas m  densame nte poblada s de la c udad No stante, cabe planearse s taes atacoes rbanas en n barro on  56,3% de ss 4984 habtanes de srcen extranjero, en  mayoría no e ropeos  y on na e scasa renta m i ar dspon ble  4, 2 ente  índice  00 de la c udad) , puden c onsderar se todavía oy, paaas eando a B orja (2 00 l ), un a oport ndad par a la j stcia bana, en uno de los baros más desprovsto de espaos para el  cen tro O si, por el con rao , el modeo rbano e e qe es tas acones se nserta condue a na variacón d las ptas de upa ón (Tapada y Arbac , 20 1 1 ) e i nclso a l a explsi ón de l os sden s trad ionales (S b rats y Ris , 2005 ) ; esto es, a una cudd on trolada y ordenad qe  mp ca la des aarc ón de se gmen tos e obla cón y t ra subalt a ( Ferná ez 20  2a). rabj rma ar e del ry e d e ivs iaió «CSO 20-907 Ci dad y caidd de vida El us s oci de l s espis públicos biero s e i udad es salas (ESPAC)• fnaciado r el la Nacia  de  + D i del Mi iseri de  ii e Ioió. 1 . Porcenae reva, e coprcin  e 22 ,  % de iigrn s que isra l c   de Brcela, i egr ad de rma may ritar ia p riiai e P i c án , Filii y Bgladeh * E se 1 69  actua  barrio e Rava es e resutao de u roceso e tras rmació y revitaización que empezó e a sega mitad e a décaa e os ochenta con a aro bació e 1 98 5 e Pa n seci a e Rerma I terior (PERI) y con ti uó co a de caraci ó de ist rito en Área e Rehabiitación Itegraa {)  e PRI de Raval se aeaba ua remoeación comeja y ambiciosa ando como restadodeaArt costrcción de os grandes istitucioes cturaes e Museo e Cotem oráneo de Barceona y e Cetro (MCBA) de Cut ra Coem oráe de Bar ceoa (CB), entre otros eqia mie tos cu t raes y a creació de  evos espacios úb icos.  I roonía c omo actación  ri ncipal  a apertra de n gra espaci o qe se con virt iese en e eje cetra l de e tramado urba no e barrio. Para evar a cabo este royecto amao Pa n Cent ra de Rava se viero afetaas ci co ma nnas de asas. Buena parte de a vivie as presentaban na coicioes de habit abilida muy precari y otra estaba esocuaas. Los resientes ero realojaos mayoritariamete e vivienda púbicas bicadas e e mismo barrio.  resutao e e acim ieto de u  nvo esacio pb ico e dim esio es consi erabs a ramba de va  i nagra a e e año 2000 (Orti z 2004  Neve años más tarde e febrro e 2009, se iagura a paa de Vázqez Mota bá (en homeaje a escritor (  939 2003  acido e e barrio) sitaa a un ado e a ramba e ava y roeaa or u n hote e base y ue ei cio de oc inas qe ac yoge e sidesués d icato Unióeítica Genera Trabajadores casia sede dos años (UGT)en oviemb re e 20  0 a  a Savaor S egí (e recuero de este anarc osi icalista (  886  2 3 cooci o como e noi del sucre, que e asesiao e e barrio) ( Maa 1   Su conc eció rma arte de a de 'Ia e a ramba de Rava na oeración de reovación rbanística e revita lizació ec oómi ca comercial y urbana. E nuevo conjnto o itegra aemás e as dos paas citaas viviedas e protecció o cial  oes comer ciales e  aa baj servicios com itarios (aarcam iento y centra  de recogia nem ática de basras)  y espaci os estin ados a sos c turaes o  e ocio sieo a F i motea e Catal nya i agra a e febrero e 20  2, e equ iamie nto c tura más esac abe de este  a or ss d ime nsi oes y cara cterísticas . Esta estrategia basa a e a c utura ha sio ierre taa como un eserzo para pr oyectar a cia  y ara r een ir de rma a mb iga e con ceto e cohesió so ci al (Dege y Garcí a 20  2  1 70 De oro lado, la i nensa i nervenci ón en ep acios públ io realiza d n Barel ona mestra el lad o aa ble d e n plane amie no qe  era elemenos de calidad urbana y dignidad social, al iempo   n erviene promoviendo toler anci a, soli daridad y sen im eno de prtenencia a la cidad, in rodciendo con ello elemen tos qe svín la aten ió n ci dada na de los efectos má s pe rn iciosos de las y rvenciones be  200 0)  emp rend das por la adm ni stración (GarciaRamon En los ú l im os años e l barrio c onoce  n ere mp lso gracias  lan de Barrios del avl Sr prmovido por el Aynmieno de Barcelona y al ser seleccionado por la Generalita de Caa nya para r eci bi r las ayas de la Ley de Ba rrios. El  royecto de ervención inegral conempla la mejora en tres grandes ejes: aciones dirigidas a s transrmación sica mejora del acio públic, rerbanización de calles y plazas y spresión rreras arqitectónicas; plíicas clrales encazadas a sde nsrmación simbólica y l aplicación de programas sociales ca minados a re spo nder a la s necesidd es de los resi den tes ( Sra s y Ris, 2005 ) . Algnos aor es (eánde z 20 1 2a y 20  2b) ana n qe  conno de nervenciones realizadas en el Raval Sr se han  en ado a transrma r s hi stóric o cará cter de barrio proletario,  m argen de la ciística, daddonde ordenada y b n ám bi o deiende regera ción rban aqello a rgesa, jeno alenn evo modelo  desaparecer L rambla del Rv: una oprción ambiciosa  polémica La rambl a del Rav a e na oe rcón rbn ística en marcada dent ro l Programa de evial zaci ón del C enro H istóri co de Barce lon a. El royecto comportó sere de acaiones expropiacón del il ias elo , constrcció n de na vi viendas p ara el rea loja mi ento de las m ctadas, derri bo de ci nco m nzanas de casas y rehab l ta có n de los  cos ás degradados (Ar ges y Cabrer a  99 8)  El cose de las bras corrió a argo de las res dminstracones públcas esaal tonómica y mnicipal, jno con las ayudas de los Fondos de ohe sió n de la Un ió n Erop ea, q e aporar on  n 8 5% del oal de a oper ación ( I, 2000) . El nev o espacio púb lico e ina gra do 1 71 el 24 de sept ie mb re de 2000 y con sta de un paseo en tral  rm ado por un conj un to lin ea de banc os, part erres y árbole s a ramba del Rava e, desde su concepción hasta su urbanizació n, una de l as i nterv enci ones urban ísicas más ambic iosas y poém icas de las realizadas po r el Ay un ami en to en e c en tro his tó rico d e la ciudad por la pr ond a reno vai ón de te j ido urbano , la consrucción pública sypor el reaojo en(O e ri z, mism o barriodedeviviendas parte d ede ospromoción ve ci no s afecado las obras 2004). Las oper acione s qu e se efetú n en este y otros mu chos espa cios de barrio han s ido obje to de con in uos desencuen ros ent re las i ns titu ciones y el movim ien o vecina  Como señaa n S ubi rats y Ru s (200 5:  4) los c on icos se generan en orno a arios e jes, de sde os que su rgen cu ando se rat a de establec er qu é m il ias serí an beneciarias del pasando derechopor deos realoja o o ind em cuan ías; q uemiseensuscian porneización diseño, yasíncomo cionsus a lidad de os nuevos espacios públicos y equipamienos culurales, hasa los que ienen como mo ivo a subida de pre cios que c omo efeco de la re aloriza ci ón del s uelo exp eri men a a vivi enda  En ese sen ido se in dica que e me rcado in mob i iario se r eaciva pr on o en e Rava, de tal modo qu e los alqu ieres q ue desde  99 2 acanzaban n ivee s m uy próxi mos a los de a ci udad s e situ aro por encima e n os años in iciae s de ese sigo ira ts y Rius, 2005 1 5)y; as pecton que n o pasa desapercibido para(Sub los residentes  radi ion:ales tambié para os que acuden al barrio buscan do pre cios más baraos Para muchos poíticos, urban istas y arqui tecos, pero, s ob todo, para m uchos v ecin os del Ra val , e hecho de que el e sponj am ien to y a creación de espacios púbicos se hiciese a partir del reaojo en e m ism o barrio en pi sos de proección p úb ica de los resid entes afec ados por os derr ibo s ha sido u no de os aspeco s más destacad os y posi a r erma i nterior unpa rqu itec o entrevista do de la empivos resadeFome nt C iuat Vea ,Según u a gran roporción de las p ersonas rambla dl Ravl mid 317 mros d largo or 5 8 d acho, ie  oal d 1 30 0 1 d ai púb ico  los u exisn 30 árbles 00 m 62 difcis qu d cés y un carril bici. S cnsrucción ss  drrib  205: 13) cuabn l slr d n s csruye (biras y ius, . L 1 72   es exproiadas or las obras de osrució de la rambla p id ó ser realojada e i sos de proecci  oc ia e e mismo arr io,    as que el r eso recibi ó u a i de m izació  eco óm ica. De la obse rvaci ón efeuada e j ui o de 2003 sore lo s usuar ios y as rmas d e apropia ció de la rambl  del av al , se despreden   os resul ados que se re produce e n o ros esp acios pú l ico d e  te creaci e el la seci a de ón varoes sur del barri  la amblasía es m uyaudesa cadas, pakisa íes yo.magrebíes, como ócoo  o por las m añ aas como por las ardes de los días aorales y s de semaa . E cami o, es muy re ducida la  lació feme ia ,  cual qui er edad, e o da la exesi ón del pase o ( acos , césped, a para rsiar), co la exeió de las errazas de los ares l l de las que más ecuenaa las errazas era el de jóvees y jeres de mediana edad, vecias, visiaes y urisas. Por lo que eca a los  iños y ni ñas, era sign icaiva su relaivame e escasa eca. Desd e nales del año 2 000 a mediados de 2002 s e realizaron 36 revisas a persoas residees en l arrio del aval, reparidas oporcionalmene enre homres y ujeres de direnes grupos de edad. Las opinioes de las personas auóonas enrevisadas uían u hilo argumenaivo muy parecido, pues cosideraa cesaria y muy posiiva la creación de un nuevo espacio púlico  el barrio, pero o lone usaban lugar encuero depdes aso , si no básicame comocomo esp cio dedecirula ció yde aso La aón p ri nci pa de o usarlo para la esancia era el m alesar que les ovocaa la presecia «excesiva», decían, de homres iigrados  srcen pakisaní y magreí, que ocupaan uea pare de los a cos del pase o. sá llena de marroquíes, de pakisaíes y odo eso. Se ha «apoder ao» de la ra ml a del Rav al , esa g e e [  ]  os as ieos los oup a odos ello s. Los 8 o 1 O acos que hay los ocupa ellos. (Aguso) . . Ua mujer de media na edad r espo día sor e la raml a del Raal pes do en las eesidade s de los n iños y i ñas E este caso, cos iderab a que el diseñ o o era el adec ado porque lo s iños no odían j uga r tranquilam ete a caua d e la pro xi midad (y coti  ui 1 73 dad) exste nte entre el espaco púb l co y la vía d rculac ón de los coches. Yo má s de una vez qu si era quedarme al lí  pero e s que tampoco se puede por la peligrosdad. Porque es peligroso. Los niños son pequeños orren no mran. La carretera está pegadita al césped. (María) n rela  ón con es te aspecto un padre cri ticaba la n exstenc a de un área de j uegos in n iles en u n barro tan denso y con tanta escasez de espacios públicos. Comentaba que este «olvido» podía deberse al hecho de que la rambla del Raval había sido concebida pensando más en los i ntereses de la cudad qu e en las necesidades del barrio y sus vecinos. [N ]o hay es pacos d e j uegos para nños  . . . ]. s un espaco totalmen te pens ado de cara a la ga lería [ . . . ] , para li berar e ste barro de cierto tipo de personas s una intervencón [hecha] de espalda s a la ge nte qu e aquí vve; en cu atro años, un piso q ue valía 1 4 mi llo nes ahor a vale 27 ( Ó scar) Esta op n ión la corroboraba e l arqu itecto de la rambla del aval Jaume Artigue j ustic ando la de ausencia pacio especícame te pars a(2n002) iños ,con el objetivo dot arde a launciesudad de un espacio de dime nsi ones extens as para la celeb ración de man ifes taciones púb li as de gran convoat ori a (como r as concen traciones conciertos, et c. ) . Dos declar aciones que m uest ran las distin tas maneras de ntender la ncionalidad del nuevo espacio: de n lado, l a vs ón del residente que demanda u n lugar d e pro xi midad, de uso cotidano adaptado a las necesidades de los vecnos y de otro lael vsón institucional de un con para ciertaserproyeccón sobre conjunto de la cudad conespaco capacdad cnsumdo por lo v stantes. Las terrazas qe se stalan en la rambla son utlzadas muy equlbradamente por los dos sexos donde hombres y mujeres sentados solos o acompañados mran a su alrededor conversan o leen . Las personas en trevstad as cons deraban q era u n espaco agradable pa ra pase ar y que su apert ura habí a sdo acerta da y ne 1 74  ra por lo q ue hab ía «sg n ado de etra da de lz y espao»   r) y porque «ha sponjado el barro [que era muy denso  hora lo es meos» (Palo). Las terrazas e los bares y las cele  oes qu tenen lugar drane las estas mayores de Sana  al a y de la Mer c, son l gno s e los r eamos que  nv tan a   otr os c udada os d e la c udad hagan un uso más con creto y orádco e a rambla.revelaron tamén que los hombres de Las observacoes rgen paksta í de med an a eda d se s e ta n preferen eme te e  acos dstrbdos a lo lrgo el paseo. Pocas veces lo haen  s o acom pañados de sus hj os , ya q e so re todo ace  para onrarse co otros ompatrotas e grpos e tres o cno dvos. ara elos resulta ser u lgar dóneo de relacó nuetro y cooperacón (ntercambo e rmacones sore  esto a psos jo , de lgalzac ón de r esde nc a  ). El es uso referetes de la ramla como traba espao encuetro porla parte  las mujere s paksta íes es cas  ulo ; pes solo la ut l za como aco d e crculacó n. Ua e la s m ujer es paksaí ent revstada ometaa que no se setaa u ca e los ancos por que los tr a ajos e n su casa le asorían demas aas horas y por que sem pre taa ocupados por homres. . No t ego . . ] por puedo Cuano estoy l re,em teepom [ucha g eeso te [o . .me ] por eso setar pue doallí. sentar [. . . ] . No pued es set ar  . . aqí e l a rambla d el Raval hay m uchos hom res, y las m jer es n se pueen sentar por que o hay s o. No ha y mucho sto . (Jadcha) . E de t va, est e prmer es paco públ o del R ava Sr oe ce n relacón co los tpos de usaros y las rmas e apropacón os rasgos ben dendos se repte en las de un mássesgo rent constrccón e esteque sector del arr: deplazas u lado asculno, adulo, con ua mportante componente éta, co o m na te pakstan í cya pr esenca s aaza en los ú lt mos años n e l co nju  o e Cut at Vella (T apada y Arac, 20  1   89)  De  ro el s o habi tua l de los bnos e paseo de la rambla por parte e este colectv o para e l eue n ro y la e stanca , ta no e las maña nas y tardes, c omo e d ías laborables y  es de seman a. 1 75 La pl V ázquez Montalbán: entr un hotel de lujo y unas ofcinas sindicaes a plaza Vázqez Monalbán inagrada en febrero de 2009, constitye n recinto de peqeñas dimensiones integrado en el plan de rerma de la la Robadors Está imitado en dos de sus lados por n hotel de catro estrellas qe sobresale por s rma y número de plantas de conjnto edicado de entorno y por n inmebl e de media alt ra pero de gran s perci e destinado a sede del sindicato UT. a plaza sirve de atrio a estas dos grandes edicaciones y a través de ea se accede desde la rambla del Raval a la plaza Salvador Segí Drante el proceso de transrmación de este sector el movimiento cidadano e my activo y de hecho las obras estvieron paral izadas d ran te mes es como resl tado de las r eaccio nes con trarias de alg nos grpos de vecinos qe ma ni festaro n s des con teno con respecto a la pérdi da de áreas verdes y libres q e compo rtaba la act ación (Arm as et a  20  2) . as observaciones realizadas drante catro días del mes de ma rzo de 20 1 2 m estran qe la pla za es n espaci o m y mascl in izado pes los var ones representan el 9 0% de l total de los s arios os qe permanecen en a paza drante n tiempo más o menos prolongado son al igal qe en la rambla del Rava los hombres adl tos pakista níes Si n embargo si con tabi izamos la s person a qe tilizan la plaza como lgar de paso la diversidad según género et ni a y de edad es m cho mayor Los pakistaníes seen permanecer sentados en los bancos indiv id ales apoyados de pie en los maceter os o en las par edes de los edi ios qe bord ean la plaza o sentado s en el selo  charando di stendidamente o hablando por el móvi l No se obser vó n in gna mjer pakistaní haciendo so de la paza pero sí se las see ver cam inand o por e ba rrio y en las ce rcanías de las esce las es perando a los hijos/as Parte de los qe transitan o hacen so ocasional de la paza son residen tes no inmigran tes varones y mj eres qe acden a l a sede del si nd icado UG a trabajar o a los c rsos qe all í se im partn y qe se reún en en g rpos para conversar y ma r a la en trada o a a salida Además de os adl tos otra pre sencia destacada sobre todo en los día s no ecti vos es n grpo de ni ños y de adoles cen tes todos 1 76   es ent re los  O y los 1 4 ños , que u egan a cr ckt el sábado or ( a  añ na y por la a rd, lo que con fere al espaco una  mp ortane    macón por sus rsas y grtos Paralelam ente a las observacones real zadas en ste es pao pú o se relaron 20 cestonaros a hombres y mujeres usuaras  espaco (de la m sma  rma que s e h zo en la pla que se anal za  . La opn n q e es lasmpey rsonas encuest  nsgu sobente re laapar plazado) Vázquez Monótalbán d spar: dsdeadas las oracones postvas por ser n lugar de encentro y un espaco q u lo , hast la s negatva s relacon adas con el dseño y el entor no. Cnc retamen te, el hecho de que sea un a plaza demasado « ra» y la  senc a de los e df cos qu e la rodean , p rooca rea ccones crít icas aco nadas co n el proceso de ren oacó n del cent ro hstórco q ue, ú n ar ios encestad os, se ha hec ho de espaldas a las necesdade s  y con f nes asplaza sg en op ndespe onesrsona m esnbarro esta dversda d deespecl jc os:at os. «es na n tes poco l a, con deasado ceme nto» , «es tr iste H ay mcho c eent o, no y vda» , « no tene ca rácter propo . N tene l a ond a del Rav al . El  fco del hotel no caja con l a estétca del barro» , «es na p laza uy dura y le lta un poco de vda », «el htel pare ce n a pl an t e  stco d ent ro de n ja rdí n» o « las ofc nas de la UGT las encuen tro u n mamotret o asquer oso» sonas encpara uestadas dcen u te lzar colas como e soLas paraper d escansar, a rearse (por je mpello,espa aquel qelreugar azan ursos en l a sede de la UGT y saen a m ar y est rar las pe rnas) ; y ras para partcpar en eentos localzados en esta plaza (como el ercad o de n tercam bos3 del Ra val)  a mayor u nan mdad en tre homb res y mures se da acrca de la ue na acces b ldad de l  plaza d esde el extero r y l pos b l dad de rans tar por todo el recn to s n n n gún obstáclo q e lo df cu lte.  otros a spectos ta én hay opn nes c o ncden tes como sobre Cada ds mess s rganiza n ea n merado dnde no hay ningún p d circulación de moneda, sl ircambi de bienes y alguns srici sa in i iai va surg e de  a Aamblea d  v y es una  rpuesta de apoyo mu u o  ra ayu dar al dsarr lo de  a ac ción críica fe e  c nsumism. El domi ng 6  mayo de 201 2, iras s ncesaa a suari/as de la aa s raizó e  rc er encue ntr 3. 1 77 a escasez de baos, etes de agua y aseos; o a careca de som bra e verao debdo a a auseca de árboes (soo hay pequeños arbustos e maceteros). A a pr egu ta ¿acud r ía a este espa cio e horar o oc tur o?, las mujere s respode  que soo pasarí a por la plaza s era i evtable y si tuvera que cruzara o haría acompañadas Los hombres opia a pazasuespercepció u espaco de abierto y co buea vsilidad, cosa queque vorece segridad L plaz Salvador Seguí: marginalidad y cultura Las trasrmacoes urbaísticas derivadas de pa de rerma de a a Roadors, ámto e e que se iscribe la plaza Salvador Segí, uto de esa rerma, así como los uevos usos que se ha i ocio troducido e  su, etor comersicios,áegocios vc uados al ( terrazas) cet roso:deocias, asocacoes im o de ucro , a referi da sede regio a l de UGT y a de   sttu t d Estudis C ataas o la F m oteca de Catalu ya, ha dado lugar a u a dobe dvers caci ó : de   ado , la corr espod ete a as c oes que se deriva de a creacó de a paza (pas eo, oco, descaso, trásto, vs ta cut ural) y, de otro, a cosecete variació e el per de sus usuarios, pues a a pobacó loca tradicoa y a os uevos hatates, se suma y turistas e grupo o, como utlzahao circua por e vsitates ugar ( Fotogra fía que, 1 ) E todo coaso, suce dido e otros espacos sometidos a procesos de rerma y reovacó de su image, especialmete e E Rava, os camios comenados coexste co usos y actv dades tradci o ales de caráct er margi a que se de sarrol a e pa rte de a p aza y e su s caes coi da tes, como la calle d'e Roador La ubació de a Fl motec a Nacoal de Ca talu ya cov rtó la pazató e aucalle espacio y accesibe, msmo segme de amplo Robador et re epero área amás próxtempo ma a aquea, dode se ha staado varas terrazas utizadas por veos y vstates y també por as trabajadoras sexuaes, y los otros dos tramos,  o ta d rectame te v sb es desde la F m oteca, e os que se cocetra el mercadeo sexua y otra s actv dades   rmales (Ferádez , 20 1 2a: 3 1 ) . Est e hecho será determ a te tat o e su ecuetacó como e las característcas de quees a usa, a 1 78 OTOGRAF IA 1 PLAZA SALVADOR SEGUÍ Ftgrafía reaizada po Alejandr Armas. iu al q ue n as á cticas o fr s d estar y d  acion ars  en y cn icho espacio. Es decir, s nuvs usos y usuaios cexisn cn vi j as ativ idad es  remen e ar aigada s en esp acis ue ,   qe nos ocupa, pesnan pocesos e degradación sia y vu ne abi id s cia . Los  su tados d las ob serv acines ( eal i das d uante as  is as as q ue as hecas en  a paza Yázue M onaán ) evan u estams muy sdenid en uanto a susdritos d uso Dsdeae stauna pela rspectiva  dvierte u n ayor nam is y ' eo d  person as duran t os ías lab oabes e n los u s n cnr e 7 0% de los usuarios regisros Las ocinas y nis róxi os con tri buyen  sin uda , a enerar una im an de vi taidad du ran las j aa s abables ,  ig ua que o u e on l a i nda ne plaa Vue Monalbá nre abas y a abla de Raval es abitua  tánsito de psnas que vienen o van a ealiar co 1 79 pras gestioes, acue a la Filmoteca o descasa e los bacos  terrazas de las cafeterías y ares que ordea uo de los lados e la pl aza. El  uo et re os tres espaios referi os es usual e  el ho rario e plea activida mtial ode se mezca os resietes que reaza ilgecias cotidiaas (compras pasear a perro)  los que o siéoo rma parte e paorama haitua porq ue tra aa e areeores o vsta e caia e turistas e espaco  o emos pea como p u to e escaso E cuato a os usuarios es estacae el marcao sesgo e géero ao que tato por las mañaas como por as tares  e los laoraes y festivos existe u claro preomio e varoes. Su protagoismo es maniesto, al igua que e os otros os espacios aaizaos, pues supoe e 75% e total e usuarios. Esto mpica que so o u a e caa cuatro pers oas e  recueto reaiza o es muer Ua caracte rístcas que  oetermi ie i es iem te epre a pl aza, oe as m uere eerceaampruost tuec am ó son mi o ritaras, au q ue sí aqu iere a go más e m portaca urate as ma ñaas e os ías festi vos y as tares, si  e  uca repr esenta más aá e u tercio e os usuaros. Es e esos mome tos cuao tamié se hace más umerosa a presecia e iñas  ños e too a p equeño parque  t l ocai zao e uo e os extremos e recnto. Desués e aizar e horario escolar s apreca ua mayor activa e elsoes. parque E iil, sus re ucas ime esa s tamé ocasonescoicioaa los  iños y por  ñas e cora ea , pero tam é sus cui aores ( mare s y ag uos pare s)  so u e n reeo e a i versa cu t ura  étn ca e arrio y , e partcular e os q ue vive cerca e a pa . En otros mom e tos es ecuen te qu e e el o re e reci nto   t  se ecue tre jóvenes cya prcpa activa es a parecer cotempar lo que sucee e ese eoro. Aemás e géero, a ea es otra e as variaes ferecadoras. Domi an os a u tos y óvees m etra s que a pre secia e meores y las persoas mayo res es relatvame nte escasa. Estos  al igua que os  ños/as a compañ ados por sus pa res, sue e acu ir en mayor me a por as tardes, lo que geera u aporte a ci oa  que exp ca la l gera  tes cació  el uso vespert o e a plaza . Tam é  es hatua e aumeto e os grupos de varoes resetes o o a aochecer e os al reeores e os a res y  a cal e ' en Roaor 1 80 P l t mo, e com ponene é n io, omo se ha señ alado d  manera   en te, es tamién n a varia le rel evant e porque c o tri ye a   a r el cadro social del lugar. Los pakistaníes son en la plaza  vado r Segí, pero sore t odo en la Vzquez Mo ntal n , así como   veci na ram la del Raval  u n colectivo rel evante y claramente o  ocil por s indmentaria, compesto en su mayoría por  oes tos Los gr eíes por su mn ié n trido varones su  ica adu totalidad , i ntegran el segn doparte, grpotams qeenest  sene casi siem pre: los jóv enes  Sele n, solo s o rma do grpos  o n me rosos de dos a cuat ro personas, pasar en a parte de la  de, y en meno r medida de as mañanas, ien e pie o sntados en   ancos o inc lso en los ordil os de las acras, cerca del parqe   n ti l, charlado y o serv ando el amien te y el  ujo de pe rsonas  t iene lugar n el e ntor no de los res y de la call e d' e oaor  ra vez, as i ia de losqe pakseista se le s veenocpando  lgna deferenc las t errazas hanníes, in stalado la pla las mesas Si p restao s atenció n, por ú lti o, a las ras  e apropiación gn género, encont ramos patrons de compor tam ie nto ién icos nre mjeres y homres El so de terras y ares y la charla son s activi daes ms com n es en tre nas y otros El anlisis de las ras de apropiación revela qe etn en  arte condiionaas por la percepción qe el espacio tienen sus sua s y visitollano tes, así rm comoinadas por lasprcticas posi iloidade est e oe c ara rio el desarr de det p aras laqe extensi ón de g nas e l os erva En este sen tio, las opi nion es ot en idas mestran qe homres y mjres, tanto residentes en el arrio o en otros lgares e la cidad, e inclso las expresadas por aqellos que viitan la plaza en calidad de tristas, mestrn na ostu ra astante n n im e sor e lg nas de la s caracterí sticas r elatias a la comodi dad del lgar par a propiiar, ad  ás del trnsit o, la stanc ia Doslidad as ectos n: n o relativo mo y otr los oa a con tai e la sores plaz ale Con respecto a laalpri erail iario cestión  trevista os man iestan s par cer de ra ro nda  « hay poos sien os y los que hay estn m uy con centrados en  n solo costad o» o «haría qe pone r s ncos y ppe leras»  A la es casez se s ma l descontento por el hecho de que para algunos «los asietos no son cómodos, tienen caíd hacia aajo» o «estaría mejor si tviean apoyarazos» El conrt ambienal no s tampoco n pnto 181 erte de a paza si nos tenemos a os juicios emitidos: «no ha casi posibi idad es de elegir  gares de s om bra . . . creo qe a ún ica so ci ón es pone r árboes más grandes» o « debería hace rse ago para qe haya más posibiidades de estar a a sombra en verano». Sobre este útimo particular más de un usario se pronncia a vor de a instaación de na ee  otros demandan «más árboes, ás verde» de elostropez sua ar» riosode edad separa critimayo ca e pavi to porqe. «n neocaso se ped «esmás pe igroso res» ,men o q e responde a que lo s adoq ines no se consi deran e f rme más idóneo para este tipo de usa rios . n def niti va, no parece que e diseño s e acomode a as necesidades de los qe ecentan o isitan el lgar, pes a i ncomod idad por  car enci a de mobi li ario adecuad o o par a permanecer de rma conrtabe son dos cestiones qe reiteran las personas encuestadas. E área de jego innti también se considera en ss dimensiones y dotaciones. Se afrma qe es n insufciente espacio «my redc ido» . Para los qe no enc uen tran car encias de índoe material , sí advier ten qe , en ocasiones, e l recino es ocpad o po r «ge nte q e no trae ni ños» , « hay personas qe e stán al í y no tienen nada q e ve r con e si ti o» , al pare cer, se enc en tran residos peli grosos,  o qe se resolv ería con « más vigi an cia y cont ro de so» . Son m ás  ora be s, en cambio,  as opini one s cando se in terr oga sobre rmaciones   gar y o scríticas n evosqe sos d e a paza. Sobre as estetrans particlar, anqedehay postras in dican qe s c ons trcción ha servi do pa ra «a especación i nmo bi lia ria» ,4 en genera, los v ecinos s elen destacar qe « os cabios an dado vida al barrio» , lo q e se tradc e entre otr os asp ectos en e l hecho de qe « ahora vien e gente de tod as parte s» . Para as personas reside ntes en ot ros barrios de Barce ona , an reconoci endo qe a in terención de la q e ha sido objeto este e spacio ha posib il itad o abr ir easíbarrio, n icaro, más que di naomismo versifcar s sr, sos, co mocom el perf  de asdare personas ecey dinta n , es deci  aer n l  ú ims ñs se  p duid  un a ri  dquisi ión d nas p nmobilaas y soeda ds de in versin . Admás s laea que as nuevas viviendas públicas han sido cuadas p ofesnas libeales y apas meia s (Fen ánd, 2 0 1 2a). 4. 1 82  ero «más accesbe para toos, meos margia»; también se   ci a e  e set o e qe os camb os o ha sm d o   reseca e as actvae s marg aes ( prosttc ó y ro gas) . s e est a pers pecti va son m chos os q e compart en a ea  e  e « a ca tia e ge te qe vee e s may or» , pero a cot  acó ñaa q e «e stá a g e te e a tes y os qe v e mos a a F mo a» as pe sta aas se e e q e s os De aspeh ech, ctos qe mersoas jor eece t fca ete garcoic y q  e er otorga n carácter especa so : e n ao , e  evo servi cio c t ra q e a spesto a costrccó e a Fmoteca e Catany y, e ro , a p rostitcó , a actvia  tra coa  q e coex st e aún,  q e o exet a e co ictos com o recoge e rma rec rrete  presa U rese te qe  eva vv eo en e  bar ro más e 50 ñ os se refer e a esa p ec ia r comb acó e  a sig ete maera: a simbosis e margiaa y ctra es y orgia» Acabe pesar si la btención e espacos púbicos previsibes e y reao s res ta e  a  eracc ó s im bióti ca o más ben e as actacoes qe ocasioa a expsó, recta (erribos, expropiacio es) o i  irecta (e strcc ió e espac os y activ iade s) e os grpos sba teros Estos igreietes e cócte crea etre a mayoría e s trevistaos o resees sesacoes e segra qe se cent úa po a oche  aaspesa e a svg a cia perma por a o icía y asr v eocámar existr ete ( Feráe z 20 1 2a:ete 3 1 ), es si excepció  e tre as m jere s, a p az a se cosera  esac o «o my seg ro», «se pr oce peeas» , « hay casos e robo» . Se trata e setimietos e receo qe se vica precsamete  a p reseca e aqe os s ar os cyas práctcas se asoca a a aomía socia. Por útmo, es criosa a percepció e agos sie tes qe se pro c ia e sen io co trario  cao qe  aza segra porqeco «hayosreseca o ben  qe es «hay probemas que vapoicia»    porqe  ca m e h a colocados asao aa». E resme, as evas contrccioes y espacos púbcos scao s a a reg eeracó  rba ística e este s ector e barro ha  trocio ve c o s más sove tes, y atrae e maera  recie te a i smo s qe as conic oe e va  e os estra tos más esp oíos haya mejorao 1 83 Reexones fnaes E an á isi s de os us uarios y pct icas d e apropiación en  os espacios púbicos que se han creado en e Rava Sur desde comienzos de a pasada década rev ea a existenc ia de una mayor itari a pres enc ia de hom bres jóvenes y adu tos pakistan íes y, en m eno r medida , magrebíes, o que obedece a a combinación de varios ctores, entre os que cabe destacar e eeva do n úmero de in tegrantes d e estas m inorías ét ni cas que viven e n e bar rio Las tas tasa s de desemp eo que a decen estos coectivos y que os ob iga a argo s períodos de i nact ivi dad y, por tanto, de disponibiidad de tiempo ibre, a o que se suman razones cuturaes de apropiación de os espacios púbicos como ugares de reu ni ón y de encuentro. Las m ujer es, en cam bio, apena os usan para reacionarse, de hecho soo os transitan a ir o vover de sus a ctivi dades E n ese escaso uso femen in o y tambi én de n iños/ as de corta edad incide, a parecer, un diseño que se ha pensado más para servir a os posibes visitantes de a ciudad que para responder a as necesidades de os re side ntes de propio barri o Son escas os, por ejemp o, os es pacios de dicados a j uegos in n ti es, y cuando os hay son de m uy reduci das dim ensi ones  Tamb ién m uchos d e os espacios pú b icos creados no o ecen do tacio nes adeuadas de mob i iar io, ni otras condicio es de con rt ambi enta que propicien e encuen tro y a estanci a proon gada de grupos m i iares y un a m ayor diversidad de prácticas y d e  rm as de apropiaci ón que as protagonizadas por os varones adutos de as minorías étnicas más numerosas en e Rava Pese a todo , es i mportan te que tra d écadas de proyectar un a im agen negativa, de d egradación y e sti gma , os hab ita ntes de barrio desarroen sen ti mi entos positi vos hacia su  ugar de residencia , como se desprende de diversas opinioes y vaoraciones recogidas Iguamente paree que os grandes equipamientos uturaes que se han incorporado a barrio han servido como recamo para e estabecimiento de nuevos residentes, a a vez que proyectan una im agen renovada de  Rava en e conj unto de Barc eon a No obstante, a cuestión es hasta qué punto e modeo de intervención urbanística y os espacios púbicos resultantes, ente os que se sitúan os tres anaizados, se asienta sobre a excusión de pobaciones descapitaizadas, así como a supresión de aqueas prácticas y espacios en o s que subsisten (Fern ández 20 l 2a: 33). A pesar de que en e Rava se ha poducido a incorporación de case 1 84   ia, o paree que o elo aya dis mi  uid o la pbre a (u bi rats  i us, 20 05), es deci r, la m ezcla social no impl ica ne esariamente   ora social e iluso puede producir, como ha puesto de relieve N i Sm ih (  96) , cos ecuencias perniciosas p ara los m ás vul  ab les En est e setido , el encar eim ien to e a vivienda, de los  q ieres y la vida no es una cuestió menor, ada la presió que ra los más sobre débileslosE deitiva, el debate por académio, y ciudadano imptos oasioados las retioentre >mas e los últimos años o solo o ha conluido, sio que se a que las valoraiones sobre este particular siguen siedo no cluyentes e icluso contradictorias (Tapaa y Arbai, 2 0 1  : 91 ). Si bien os cambios que e er ivan e la cr eaió de espaios  blios abiertos, la constrcció e equipamientos y os nueos sos que los aompañ an han servio tanto para si tuar al Rava  con a renovad e la itambién udad omo para geerar set im ien tos entrea imagen sus habitates, es verad que permanecen sitivos s oobras acerca de u ptenial para mejorar la via cotiaa  sus re sin tes traicio ales, dando así ua oportu nida par a a  sici a ur ban a Un deseo a la esp era d e hace rse real iad Agradecmientos radecemos al geógr a arlo s Haas la re al iaión de guosí uestioarios en las plaa s Vázque Moalbá y Salv ador Se Rfrncias bibliorácas  D  HABILACI Ú  NTEGADA  I U TAT VE U A (R!) (2000) Urbaitzció de l'spai úlic i rehabilitació  l'dcació existet a l 'ntor de  mb l Raval, Barceoa  RMAS, DELGO, O, G como , Ce R ordenación y ÜIZ A.  2),as «LosA es ,pacios pú blicos eemeos e (20  áre ent rales u rbanas: los barrios de El Rav al ( Ba rcelo ) y Cuat ro Torres (S a Cruz de Teer ife) », e Miram on tes arballaa , A., Royé D . y Via Vázque z, J    , (c oord. ), L ciudesy elsistema urbano: ua fxió e tiemos de risis. MeuB ook S an iago de Compo stel a, pp 23 7 247, en http://www  uib es/ ggu/ actes/ actas_urb _20  2 pf [cosultad o el 1 5 de octubr e de 20  3  1 85 J y CBR, [� (198) Memr l pecte  ecte dOnació   Ramb l val (doumento no pubicado) RIUES, Jaume (2002) Entrevista realizada e 7 de mayo de 2002 en Ba rceona YUNAMINTO DE BONA (2012), Ciutat V/. 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Cultura i ranrmacó soial a  Barcna central Barcelo a: Ce re de Culura Conempornia de Barceloa. hp://ww.cc.org/ ca/pul icacio el_xin o_al_raval3 508 9 [con ul tao el día 1 0 de dicie mre de 20 1 3  1 87 MAPA 1 B Fuet Bsé 1y0.(I )  5  lsopr Carg 4T fin, dc t  uN . 1 8 EL PARQE DE DAGONL MAR E BARCELONA: ENTRE E DISEÑO, LA SOSTENIBILIDAD AMBIENTAL Y EL USO SOCIAL* I X. aro Arms DízoCrmen rm en Rosa D elga Acosta loria y An naCalero Ortiz Martín u itart Ua ae cuaa g estió n e i nterv ención e los es pacios pbl icos puee uar a me oen rar las la ciuae calia e e los ciutesaanos/as log sraral ula en ibi lia s y via crear ambien más atractivos able s y económ icamente más compet itivos (Beck  2 0  2; Chiesura 04 ; Gar cía 20 1  ) Para lograrlo  es imp resci n ile que el iseño  los espacios púlicos logre no solo la sostenibilia ambiental iane su aaptació n a las c on iciones nat urale s meioamb ientas, s ino tambié n la sost en i il ia social en el sentio e esim ular  coh esió n social , las rel aciones co munitarias  la heter ogeneia y  iversia  (S aíaas et al . 2009)  En las últimas la maoría e oeraciones urbanístics  ciuaes españolas se han centrao en la renovación e vieas as cen rales y en la construcci ón e otra s n uevas  n orma lme nte  zonas el extraraio urbano con el objetivo e vorecer la  racción de i versores y visitan es, refrzar la im agen e la ciua  exterior e incorporarls como lugares e onsuo en la ecoo ía global ( Ju y F ains tein   99 9)  Esas tra sfrm acio nes urba nas simulaas la ieología eoliberal procesos een los li ició n por an to en los barrios e loshan censrcinado ros urbanos omo Esa nvgn rma pa e d   pryco d nvsgacón «CSO 2010 907 iua  y calia  va. l uso  cial   eas úbl cs abierts n cudae esalas (ESPAC)• fnancid or l Plan Naciona  I+D+i l Mi nistri  Ci ncia  I nnv ación • 1 89 nuevos barrios de re ciente reació n d mara do carácter exclu sivi sta que se han cons tru ido en zonas concretas muchas de ellas vac ías o abandon adas c om o las anti guas áreas i ndust riales La in corpor ación de esp acios pú bl icos en la renovación no es casua l A este respecto se ha est ablecido una relación en tre la dis tri bució n d los parque s y su efecto sobre el inremento del p recio de la vivi end a (Talen  20 1 O; Lutti k 2000) suvierten condició anuncideo competit de la imagivenida de la ciudad  esto sAdemás siti os seen con en nundector urbana que s e asocia  qu izá demasiao g enéricamen te con la calidad de vida ( Bhme 2007)  ste us o en térmi nos e conóm icos  se traduc e en un ahon dami ento en as c aracterís ticas del l ugar qe son deseaas por el capi al y las él ites m ient ras se relega la vis ión de la cal ida e v ida e otros colectiv os ( Rogerson  1 999 )  Y es que su is eño c ont rol y gestió n pueden in terveni r persuadie no y restr ingiendo aquellas(Low actividaes son inconsistentes conese la losoa el proyeco Taplinque y Scheld 2005: 34) n sentido las n uevas pol ítica s u rbanas empl ean como asp ecto legi ti mador de las amplias intervenciones urbanísticas la producción de espacios públ icos Esos últi mos son usados como eleme ntos de publicidad de sus bondade s y compet itiv idad urbanos basánose en su vin culació n con la mejora del bie nestar social . Así los pa seos parques y plas nuevos o renovados son uilizados para la cohesión de las ciudades agmentadas y también para la promoción la «venta» de la ciudad Este capítulo explora el uso y la apropiación del parque de Diagonal Mar en Barcelona ste parque inaugurado en 2002 es un amp lio espa cio pú bl ico constr uido en uno e los barrios e más reci en te creación en Barcelona  n sta área de la ci uad se pro uce una se de expansionismo urbano donde se advierte un cambio signi cati vo del modelo d e crecimi ento habi tual l urbanismo más equi li brado y homogéne o q ue se venía apl icano se rompe y se susti uye por a cuac iones aislaa s agmentadas don e el dom inio del capit al pri vado y e la i magen de la ciudad orie ntan las acciones y las enca minan hacia la demanda extea (Bo rja 2005 : 26) , hacia una agresiva venta d e la  i udad ( McNil l 2003)  l barrio d e D iagonal Mar respone a ese pro ceso Se trat a de u n proyecto inm ob il iari o promovio por capial extranjero considerado como una de las promocio nes urbanas más i mportan tes que s e produc en en  urop a 1 90   s mom entos (S mi th, 200 4) , uyo objet ivo era gener ar torres de  in das de ujo de gran atu ra que de equ i ib raron a conti nu idad  hesión urbana, contra stando abiertamente con otros barrios más   iguos y modes os que o rodean , como e BessMaresme, con  aciones más populares bricadas en los años noventa. n ese  o no, ocupand o un amp io esaio ent re os inm uebes r ecientes, s str uye este parque o proyecto i ni ia on on cara vo cación privatcy izador a, de moo quee su trans uso sermado restr in giera  o vecino s próxi mos  parque ha r ciido eoios tan to por su ño y sostenibiidad ambienales como ríticas por su carácter itdo pa ra e encuentro y sociai ización . E parque ojeto d estudio s  sometió a un proeso de obser va  sistemáti ca meia nte el reconoci miento de  espac io pb ico y  ntor no, a decripción e ambie ne  un regitro d e nú m ro de ari os, e suyara terístias yu identicación cuanticación y dosasuos ativiLas dades que earr an , de oservaciones  omplementaron con cuestionarios abiertos a los usuarios con  nalidad de detetar as motivaciones de su ecuenación y as oibes diferencias, entre mujeres y hombres, en las opiniones, perienias y perepciones sobre e parque, que conicionan sus mportami entos A partir e una metod oogí a cuai tativa s e trata  comp roar si  a apropiación ci uadana ha suvertido a  losofía ii al que gui un ó elesp diseacio ño ypú a const rución depor parque; es decir, si hay ns rmado ic o, ori en tado e i nterés privado la vaoriza ció n in mo bi ia ri , en un  ugar de encuen r y convivencia  tre d istin os coectivos socia es El marco urbnístico, el á de estudio  el prque  marco urbístico UnaBarceona de as caracter ístias má ignde icativa e as(Caseas, mutaci ones u banas h sido a existencia varia ses 2006) y  cm io p rogresivo e escaa en sus i nervenc ion es: desde a recu  ració n de paisaje urbao medi nte transrmaci ones de pequeña caa (  979  986) , pasando por a recupeación y a otenciación de as mayores en ocasión e a celebra ción de os Juego s O ím picos a ravés de a construcción de grande s i naestructura s (  87  99 2)  hasta eg ar a a s actua ciones de esaa metrop ol itana ( 1 993 2004)  en 191 sta tercera etapa corresponde a período postoímpico. Las ci cunstancias sociaes y, sobretodo, económicas que comport a gobalización y a inserción de Barceona dentro de os circuito internacion aes, propician qu e exista m ucha má s presión por part de capita pri vado y también de los a gente s i nternaciona es, con los cuaes se hace más difíci diaogar y negociar (Moi x, 1 99 9 . Las in tervencio urbanística de eAndreuSagrera, sta etapa se centran en a u rbaniza ció n de este denes a ciudad Sant DiagonaPoblenou y D iagona lMar y e área comp rendida e ntre e  Pobenou hast a a orilla derecha del río Bess Fórm Universa de es Cultures 2004 (Ca rrerasMo ysi, 1 999; Cla ret, 1 999 . El barrio y el parque  barrio de Diagona  Ma y e Frn t Maríti m del Poblenou , si tuado en e dist rito Martí actualm ente, e másdel nu Poben evo de ou Baryceon a, li mita cond lo sSant barrios del es, Pobe nou , Proven�ls Bes üsMasme, barrios que a su ve z, y desde el año 2000 viven una conti nua transrmación urbanística con e proyecto 22@ de Poblenou y e ento rno construido para a ce lebración del Fór um de a s Cuturas de 2004. El sector de Diagona Mar y e Front Marítim del Pobenou está rmado por dos ámbitos: e de Diagonal Mar caracterizado principalmente por una operación desarrolada a naes de los años noven ta dely siglo pas ado inc luyeMar boques r esiden u n centro comercia e parque de que Diagona diseñado porciaes, el arquitecto nri Miraes; y el tramo de Frente Litora situado a lo ago de a costa rmado po b oques de viviend as de to standingcon jardi nes centra les (Ayuntami ento de Barceona, 20 1 3 (M apa 1  . El parque de Di agona Ma se sitúa en medio de es ta área urbana de a ciudad en permanene transrmación donde «van toman do cada vez más cuerpo los p roductos urbanos esenciales de a ci uad globa re si dencial ti endey aemero» cerrarse,, eel de D Mar, y »uun n cenbarrio tro comercia «an que ti urbano D iagon iagonaa Mar (Mona e, 20 1 1 : 25 dond e se produce una « rma diferente e i nédi ta de re acionar os es pacios púb licos y  os edi cios» (Esteban , 1 99 ; y por el otr o, un bar rio c onstruido en  os año s sesenta de l siglo XX (BessMaresme)  parque e inaugurado e 22 de septiembre de 2002 n e anti guo sol ar de  a fábri ca metaúrgica de Mac osa Unos años an tes 1 92 aio ra un rritorio d ruids y hus uhs is y s hums Y las sirenas d os urnos d trabajo E paisaj qe  ía eran as naves y as hines d Maosa» (ia, 2002) te    nso soar s e onvi rti ó n uno d os ayor s d a i uad, e J 43 het áreas El d ía d su inau gurai ón , el periódio anu niaba   un a ampia y detaada desripión sus a raterístias: es t e El espa io ti ne dos parts di fereniada s: e paseo, q ue s in sp ira en La Raba, y un jardín denominado La vi del hombre, n refernia a as etapas d a vida Para la niñez, a zona de juegos innties Para a adolesenia, un sistema de rampas y toboganes bautizado omo a «monaña mágia» Y un área para a edad aduta reaizada tras una onsuta pouar. Es un parque o n u n gran  ago e  ,2 htra s, en ts sultóri as y un degoas os sign os d idad de ar evoar qu itetura de Miraes: asopér T odo nidn e parque qu aiere e mar: os banos tiene n  rma de oa  ésp oua 3 2 htáras Se han pa ntado 1 . 1 00 árbo es y pam eras d 5 1 espeies, e  63% de variedad s adaptadas y e 37% p erte neci en tes a a o ra autótona. Pretende ser un parque sostenibe y por eso utiiza agua de a a pa eátia y tien e un mean ismo para apt ar  agua d  uvi a E ri ego está programad y se ajusta a as nesiads Será undeparque púbio,deero también de uso parte as viv inas Diagon a Mar estánprivao o estaráporque n den ro de su perí metro Cia, 2002) Efetivamente, a empresa promotora stadounidense Hines mó un onvenio on e ayuntamiento para estabr  diseño, nstruión y f union am ien to, poni endo e a ento en a sos teni  li dad natura y soia  (  2005 itado por Sau rí, Parés y omene 2009) . Un a rte in rmativo d e Ayun tamien to situado  n medio de par qu e expia a  onepión y as  on di ion s mdi o   bin tal s d st E par qu d e Diag onal Mar  e o n bid o [ .  ] omo e jardín de una as a, omo un ár bo que na e de mar  .  Y dond e todos sus eem en os s in tegra n para rear un gran espaio vrd e pra que sus visitantes puedan isutaro E parque está ordnado 193 sigiendo ua seie de caminos, como si d as amas de un ábo se tatase, u se amican hacia todas as dieciones. En medio de estos enconamos entes escutóias de acero inox idabe ue re presen an pájaos be bien do agua . Estas  ente anzan agua vapoizada cont ri buyendo a ee sa e am bie nte y un enorno urbano más vede. En e diseño y reaización de este se ha tenido n dad para pa su posteio manteni micu entoenta que,riteios po unde ado,sosteni optimbi iizan os  u sos na tu aes y, por oto , hacen servi  a te cno ogía más recie nte en materia de ene gías enovabes y de aho ro enegético. ste parue se ieg a con aguas sub teráneas p ocedentes de eático. Esto ev ita cons umi agua potabi izada de a red genera y repesenta un a ho o de ecu sos n at uaes y econó micos. paque ecibido tanto críticas. ladoy prise haEvaor adohapositi vamen te aeogios soste ncomo ii idad, tranDeuiun idad vacidad ; y de otro , se han su brayado desacierto s como s u n atu raeza casi pi vada, rodeado por com pejos esid enciales de grandes to es de viviendas de eevado pecio, aspecto incentivado por as inmobiliaias ue promocionaban e espacio omo un ecinto privado; así como su situación, encajado ente amplias vías de circuación poco amabes para os peatones; y su ruptua con la esencia de a cae mediterránea vida púbica, contacto con vist a oos (Saurí , Par ésy yaDomene, 200 dicutando 9 En rea iedad, a pi mera podría parece que e parque cons igue a so steni bi lidad en té mino s am bientaes, no así en uestiones sociale s, pr esentándose más bien como u n parue púb ico orien tado a uso privado. Uso y apropiac6n del Paque de Diagonal Mar E 29 trabajo de campo nes y cion cues es tionsi stemáti ai os) secas, reairezóaizadas de 26 a de mazo de 20(obsevacio 1 2 Las obseva en diferentes días de a semana y en horarios distintos, muestran ue e parue es ecuentado de rma habitua duante todos os días en jorn adas de maña na y de tarde . Aun así, a densi dad de uso es superior en os días fest ivos y du an te as ma ñan as. os m omentos de may o y m enor a uencia se deiv an de propio empazamiento de parue y de os servicios que propociona. En 1 94 FOTOGRFIA 1 VISTA DEL PARQUE F tgafa ealizada por Anna Oiz rrado e re o boq es de vve nas de ao standig, s enu nr r a de efóo e of nas y de un  o rtante ce ro coer a Digona Mar, o que e proporcona u ambiete dinámio urane a mñaas, ecuenado por ersoas que usa el espa- 1 95  bi  ur r u bre   s( u e me e su r e rb  e rs r s res y e s ías fesivs, s usurs e l ecue se sueen ser araí dos pr l s eu ip me s e prue sbr e od o p r las ár es de jueg y los espac s ue recre a  a urale como el ago y ls zons de césped. o Esas nes mi sma s cules ason slssue ules exp licarios a lassediacercan fere sal man eras de relcio persona usu prque, pues m iet ras en las ma ñn s de los días labor ables la propo rción d e person as qu e acu den slas l legan a represenar como media el 2 8% del  oal , dura ne las ar des y, sob re odo , en os d ías fesi vos el uso es, en m yor medida , de i po m il ia r predo mi nado las parejas y los grupos compuesos por madres, padres e hijos Co respe a quiénes son los usuarios más ecuenes, los nlosiños/as en ha menor propor ció ondelasaspecohore rsonas adu gruposy,más i uales , el res s de las edadc on ie siuyen nen una presenci a noab lem ene menos des acada Aun así, se rev elan ri mos cam bia nes en la i nensida d del uso según los ramos hor arios y días. Por las mañanas los aduos sn siempre el colecivo mayoriario, en cambio, por las ardes los niños se covieren en los auénicos proag onisas del parque n l s días labrables ll egan a re present ar más del 50% del oal de los usuris-. Las personas jóvenes y personas mayores esán represenados, durane lsy en ardes de los f esi vos se inmeos cremen ta la p roporciaunque ón de los jóvenes las mañanas de los días aborables la de as personas mayores Esas pauas de  ecuen ació de los grupos de edad esán on di ci onadas por c ores diverso s, en re las que des acan la dispon ib il i da d de ie mpo l ib re en  nci ón de los horarios laborables y escolares -jóvenes y niños que acuden por las ardes-, e emplazamieno del parque que reerza su codición de lugar de paso e invia al descanso de lo s ran seú nes -mayr e cuen cia de adu los-, y los háb is sociles d ifereci ds segú  l  ed de s per ssmyor prpr ió de jóvene s pr ls res e s d ís siv s y de perss mayres durae as mñas. Aun que el par que se uil i e rm  exesi va cupád se prác i me ne  o e reci nt o,  a gegra fía e us esá o di    pr el pr opi  iseñ e prque que se grega espaial mene ls aciv es y, e c secuecia , a los grupos e e l im in d la e spo eid 1% usos e in uo, as re aciones i nterg eneraiona es Lo adu to    u ondi ió n de «ui dadores» y o ni ños e ocaizan básic amen e   a s área de j uego Los jóvene se congre gan en a zona deort iva,   a «m on taña má gica» nm bre que r ecibe una pe queña coi na  i cia y en  os grand e ob ogane a edaños. La in vestig ación J Prats, Bayin a y Ortiz (20 1 2)  reaiza da a un gr upo de chicos y Je   a adoes cente, de uncomo in ti tuto sit uadodeenDi e agona barrio  eMa reme, alu muemnos/as stra también e  parque r resuta ser uno de los espacio de nueva construcción más uentados por estos chios/a Le guta porque es «tranquio», onito», «ampio» y obre todo porque en é «se uede habar», ué hac en en eto s s e ún s us palabr as n reidad , cuando expican q gares, el «hacer» es o de menos ya que o importante es que e  torno es o ece la po i bi idad de desin hi bi re rea cion ándoe entr e  sesta sin pibiidad ser demasiado vados/as; y laon «maona mágica» ece Lasobser peronas mayore queñamenos e les ipersan epaciament, concenrándoe en os bancos ituados  torno a lago Se trata por tnto, de un parque cuyo dieño y  rmat ivas de gesti ón organ izan ep acia mente as actividade de os uario, im pidieno o l imi tando la epon taneida d de uso A p ear e el o, es ecuen te que a gente subvierta e orden estab ecido y se propi e de esp acios cuyo uo social está expre same nte prohi bid o, monsucede cona as área s de de cé sped relación rmas apropiación, las actividades más ecuen tes están cond ici onadas por la edad de  os uuarios y, obre do, por las posi bi i dades que e  parque oee de ahí que e  j ueo, e cuidado de niños/as y e paseo sean la más reevantes Sin mbarg o se detecta n pat rones de uso q ue varían segú n o s días y os amos hor arios en nc ió n de qu iénes sean los que e cuen tan est e pacio pú b ico Duran te as mañ anas de os día  aborables a ma yor iduidad de personas adutas expica e ypaseo ea festivos, a actividad redominante, en cambio durante a que tardes los día a reencia mayori taria de n iño  y en me nor medi da de jóvene, e a ue cond ici ona que e cu idado de os i nn tes y e j uego ob resaga n como las rma de apropiació n mayoritarias  En suma, e uso y la aropiación de parque evidenian que tanto su conguración e empamieno y o equipamiento ue oece, como ctoe diveros de índoe abora, ocia y 1 97 u t ura, n d n an e pasaj e sia  aa n te ue re senta s eú s  ías y hras e s e se r ea zan  as se rva nes. De ah í q e n m sm e spa p  e a a onve rrs e e u ar ds e  ó e a h ra -es  qu e Parke y Tr ( 1 980) deinó a «rn r aa» par a a ud r a s   ere es tem ps e us en os  ue se proue  c nes s as (i ado pr Gar a H erre ra et al, y e d los en resa)sea eesas ue se rae ( fra ía 2). Cuan anaza ús e éner -  sr ió sa se  v er e en una varabe re evat pa ra deermar as esadades e a nesida de uso y e as fr mas e araón. E esa úbli es vvd y erb de  a mujeres er  so r su fra dsita pr os hbres ndi ó sexua s  abé  r r s  r es m   a edad, a a se so ial , e r e   u ra  é , as í  r a  ne ó  ue ega la ersa e mu e a rodea. Obvamete ess FOTOGRAF IA 2 USO D EL ESP ACIO PÚBICO Fot ografía realzada por Anna O tiz. 1 98  tos inuyen n ambos sxs, pero adquirn espi vaor e n  aso de as muers n a medida  qu su vinuaión on d spacio p úb ico es más dependi n te de ct ores sociocu t uraes. D sde as ienias soaes, as fminisas han tratado de busar as  xo nes e i nterreaiones e nt re esas y ot ras cate gorías soias, y mo a partir de eas as personas construyen su identidad ins ccionaidad  (Vant ine , 207) . n íneas generas os varones euentan e parqu más que s ueres, representndo este coetivo e 54% de tota de os  uarios d etetándos, además, ri tmos  am bi an tes por sexos segú n s d ías y horaros. Así pue s, mientras a preseia de a s m ujer es es yorita ria du rane as tar ds de os d ías aborabe s, a p ror ió  hombre s es siemp re más ta en a s o rnadas de mañ ana e, inl uso,  as tardes de os stvos. stedepatró n e usoAsí de sequi brado sos egúadutos n sexosessesiempre reaione a con  dad os usuarios pues, iaunque etivo más rpresentado, o que inrementa a poporión de ron es duran e as mañ anas es la a uenc a de ho mb res mayores en os días aborabes y a de os jóvens en o s festivos. n am bi o, e  u me n o de as m ujeres por as tard es de o s días abo rabes, se debe  a presenia de madres que acompañan a sus hios/as y mueres mayores Este mode conds uta por a me nter artii pación deomdeuere en e por par se quexos, secaraterizado encu en tra estrehamen vincuado a os estereotipos sociaes y cuturaes dominantes, de odo que  a vin cuación mayo r de a s m uer es a esp aio domésti o e s supone u n obst ácuo para a uti izaión de es pacio púb io, bse vable no soo e n as anianas sin o en as óvene s, por  que no prece que hya amb ios genera cio naes en este sn ti do. Las rmas de apropiaón evidencian, con más caridad, as iferenes mano. rasen asprm que meras uere s yedom hombinrs se araiona n oden  espaio púb n as es pr an te con dic ión «u idado ras» , de o do que su presenia e n  parque se reaion a con as ta ras reprod utiva s que omienzan n e hogar y con ti n úan en e spacio púb io  La presenia de a s mu ers prec estar ún iam en te term inada po r e i nterés n p rpo rio na r di stración y  ugo a su s ios o nietos. Los hombrs, n ambio, reaizn actividades más di versas sin que n in gun a de eas s ea r evane, aun a sí  cuidado de 1 99 os n iños es a que prese ta tam bién  a proporció n más ata, seguid a de juego y e paseo. De todas rmas , a apropiac ión est á cond ic io nada tamb ié n por a edad vari abe que se d eja n otar con más caridad en os varo  nes  n e grupo mayor de 65 a ños,  os varones sueen de dicarse a pasear y descansar, mientras as mujeres destinan su tiempo, en buena medida cuidaarnotarse de los nunietos sonas a dul tas es do nde com aienza cambin oasdepercomportam ienjóvenes to re a cionado con una mayor iguadad entre os géneros, de rma que los pa dres empiez an a i mp licarse tambi én en ateni ón a sus h jos/as, acudiendo con su par eja  parq ue o, en menor medida, soos. En os jóvenes adolescentes tampoco s e observan di ferencias si gn ica tivas en la  rmas de apr opi ación , pues e juego y la conver sación son as actividades que sueen realizar con mayor ecuencia en el parque tantos os chicos como las chicas. L cualid ades de l parque segú n l as personas usuar ias Los cuestionarios eron reaizados a 20 personas usuarias de parque de Diagona Mar ( 1 O mujeres y 1 O hombres, jóvenes, adultas y adutas mayores, a mitad vecinos/as de os arrios coi ndan tes a parque y a otra mi tad de otros barrios d e a ci udad) y permilastieron con aseguran ocer sus perc es es sobre e esp pú bl ico Todas personas que eepcion parque gusta por acio su gran extensió n y la posib il idad de hac er dis tin as a ctivi dades en cad a una de sus partes, por su vegetación, a presencia de lago y por ser un ugar tranqu io La may oría d e eas viene ac ompañada por a pa reja, os hj os/ as o los amigos/ as, aunque en a guna oc asión tambié n viene n soas (cuando hacen deport e o va n en biciceta o, en e ca so de as pero nas adutas may ores, c ua nd o camin an por el parquecharar os díasconlaborabes) aompañar cuidar a os niños/as, amigos e irPasear, en biciceta on asy actividades que más hacen os u sua ri os/as ent revistados y escoge n este espacio púb i co po r a cercan ía a su  ugar de residen ci y a a pay a y por su s car act erísticas (ac cesib i idad a i n terior de reci nto y a posibi ida d de transitar por odo é). Según os entrevistados, a estructura de parque (con áreas para e desanso y recorridos interiores, el estanque, os toboganes, as pistas de petanca, as anchas de 200 bo , etc) perm ite que haya u a gra  i versi  e usuari os/as r n reació a as eaes En cuant a a comoia e mobiiario urbano, os bancos so n os que resultan más criticaos: por e materia en e que han ao const rui os son e cemen t y por u e scasez Por o que  refe re a a  istr ibuc ió n de as áre as e so y somb ra, y a p esar de e aosvegetación uno e os e para pare, usuarios/asesrecman msaspects árboesejo juno vaoraos a os bancos r sombra e verano, más instaaciones y espacios e juegos para ños/as y avabos púbico iexistenes no soo en este sino en chos es pacios p úb icos e a ciua  Los usuarios vaoran positiva mene a construcción e parque  rque «da via » y «es un p u mó n» para e barrio y bri na un área  espa rci mie nto para que a gente di s ute a ai re i bre en un ugar pado aeriormente una púbico brica haya mejorao a imagen A pesar de que e por espacio  barr io, sea visi tao por otros ci udadaos/as de a ci udad y haya ecio u n espaci verde en un sector de a ci ua trai cio na men te vidado , para agunos usu arios/as e sta trans rmaci ón «de dise ño» e ha reaizao más como un compemeno urbanstico a cenro mercia y a barrio de Diagona Mar, que como un espacio púb ico que propicie e u so y a apr opiac ión de os v ecin os/as de otras reasurbanístico c in da ntesy socia a parqueas enos vorecidas e p uneto de ista vaas que  rodean yesde e hecho ue este teng a un horario de apertura y cierr e, o convi erten en un cin o menos i óneo e o que podra habe r sio para ser ut i izao  una rma más intensiva por todos os vecinosas. n reación c n a per cepció n e seguri ad en e parque, buea arte de as personas en trevistadas cons ideran qu e se ie nten seguros/ as por a presecia de otros usuarios/as y por a uena visibiidad e toa sus partes a excepción de agunas bajo e puente. Soamente os mujeres mayores que acuden soas comentan no en rarse en é y pe rmanecer senaa cr ca e agun a de as pueras orque su exten sión y ca racterística es a in segurida ; y agunas de las cons iera n que e esp acio necesitara una mayor vigi anc ia para on roar a os perros que van si n correa. Fi na mente, b uen  parte de as muje res af rma que no pasea ría en h orari n octur no porque os amb ie ntes oscuros, en g enera , producen m iedo y descon fanza. 201 Reexones fnaes Los es pacios p úbl icos urbanos cos i uyen una garan ía de soseni  bi lidad am bie ntal y so ial para las ci udades, mejo ran la calidad de vida y con trib uyen a la cohesión social  Del m ism o modo mejoran a i magen urbana y prom ueven su valor y, por ello , ecuen temen te son ut il izados como re clamo e incl uso como j ust i cació n de eterminadas actuaciones urbanísticas. En muchos casos, el diseño se orre sponde con la i dea de os promoto res privaos y condi cio na el uso y a apropiación lmitando la espontaneidad de las actividaes o rmas e apr opia ción e in cluso restri ngien do el ac ceso a deter m inados cole civ os Comprob ada la i ntensiad del uso y la apr opiación por par te e los ciudadanos del Parque Diagonal ar de Barcelona poría parecer que la losofía prvatizadora on la que e proyectado se habría subvertido, ya que el parqu se ha convertido en un lugar e encuentro y socializacón no solo para el vecindario del propio barrio s in o para el proc edente d e otros coli nda ntes más moestos. De modo que un espacio público orientao por el interés privado y la valoricón i nmob il iaria, se habrí a trans rmano en u n l ugar de encuen tro y conviv encia ent re di st in os co lectivos soiales. Sin embargo, el diseño y las normas de gestión de un espacio concebido más pa ra el con rt que para las rela cio nes so ciales, reprmen la espon taneiad de las rmas de apr opia ción y persuaen de su ecuentación a et erm in ados cole ctivo s con com portamien tos sociale s isti nos in digenes, por ejem plo que no  guran ent re los usuarios del parque. El heho de q ue gran parte de la s uperce del parque sea acu áia o de césped no utlizable, que no haya vegetación suciente para rega rse del sol , y que su estru ctu ra in terna e sté ori entan o usos no rmal izaos, dem uestra que cont in úa siendo un esp acio d esti nado a beneci ar pri nc ipal men e a los veci nos de las torr es reside nciales de al to standing que lo ro ean. Es uso social normalizado, desarrollado en un espacio temaizado donde no tienen cabida las actividades no reglamentadas, y destinado para grupos sociales con comportamienos cívicos do mi na ntes está, en parte, le gitim ando la i nterve ni ón u rbanístic a prvatizadora del sector de Diagonal Mar. De modo ue, a pesar de que sea un parque usado de rma inensiva, en realidad, no 202  ce que se haya poducido un subvesón lara de a losofía  vatizadora que guó su diseño. Agradecimientos g radecemos al geóga Caros Haa a reaización de os cuesto  ios en e pr que e Diagona  Ma r. Rfncias bibliorá6cas UNAINT DE BARCELNA (20 1 ) , Web de la ciud ad de Barcelona, en http:// w.cn. cat [cons ul tado el 20 e mar o de 20 1 3]. 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Bse Toráf Ncnl  5 0, Base Toprá Ncial 1 : ntu CAfc de t unya ( I) . 3  =m 206 NTRODUCENDO NEVOS PARGMAS Y TODOLOGÍAS PAA EL ESTDIO DE L ESP ACIO PÚBLCO X . JENTUD Y HETEROORMATVDD E N EL ESP ACO PÚ BLCO DESD E UNA RSPECTIVA NTERSECCIOAL *  ria Roó-de-Zár ate y  ireia Bayi na Ferr é Itroducción  exuaidad ha ido una emática poco eudiaa e geografía y e o etudi urbanos, a pear de a reevancia que tiene para a gaizació soia y espacia. Como apunta Mitchel (2000: 35) «mo cualq uier ora r eación social ,  a exaidad es i herenemente pacial  depende de determi ados esp acio para su con trucci ó y  a vez produ ce y reprod ue lo  epacio en lo qu e a exua idad ede er, y e, rada»  A ivel i ternaci oa l, y mayori taria mente e n la geogrfía anoaon a, e encuen tra ac uame e i mportan te aba jo obre a e paciai dade d e a exua idad e o epacio  u r a o A part ir de  o años nov ent a, depué d e gi r c t ura de o s chen ta en geograf ía y a apar ic ió de a te or ía  e o  e dio m iistas, aparecieron a guo  trabaj o obre e pacio y exuali dade En etas o bra pion era, e c o tata que e ep aio pú b ico se co i tuye como heter oexu a a  ravé de a repe ti ció n e determ in adas páci as (Be et a  994 ; Be y Vaet ine ,  99 5) y e, pr tao, tá contrui do como hete rono rmativo ( aent ine  99 3; Be et a  994; Be y Vaeine,  99 5; Bi nn ie, 1 997) La h eteronormati vid ad • se esuio s e ha reizdo en l mrc de ls proyects de in vesigació n  Plan Ncinl d l+DI 2 08 -2 0 1 1 • [20 09 ; CS2009  0 1 3]: «Her Ciudd dsde los Barrios. Ggra ías del gene r y la edad n la consru ción del ejido u rban y G eograías d la in fnci a y la juven u: género, vida coid ian a y prác ias spaciale•, EM20 1 234794, Mi ni serio  e Economía y ompeiii a (213-15). 209 s un concepto di ferene a a heter osexua idad , ya q ue e pr im ero se reer e a un a  rma de sexua idad priv iegiada por as inst it ucio nes y reacio nada c on la repr oducci ón , e matri mo ni o y el amo r. Por heteronormatividad nos referimos a as instituciones, es tructuras de comprensión y orientaciones prácticas que hacen ue anizada heterosexuaidad parezca coherente es decir, orga como sexuaidad no sin soo o también pr iviegia da. (Ber ant y Wae r, 1 998, 1 78) 1 Los estudi os que sigu ieron estos pr imeros traba jo s se cen traron en esta construcción heteronormativa de as ciudades, anaizando como as personas noheterosexuaes quedaban despazadas a os márgenes de a sociedad Si entndemos que todo ser humano, in ci depen temente de su ia sexua ción , debe tener derech ca, oa a udaddiyenque a sexua idadpreferenc es una construc socia e históri ¿q ué puede aportar a pers pectiva g eográ ca a a conceptua ización de a ci udadan ía sexua ? En este capítu o pretendemos ver cómo a cons tr cci ón hetero nor mati va de espacio púb ico afecta as experiencias de a j uventud . Nos centraremos en u n estud io de ca so evado a cabo en Ma nresa , una ci udad media de Catauña si tuada a 50 qu iómetros de Barc e on a,La3 mayoría 1 jóvene de s con orien es diver estud ios taciones geográcseosxua sobre sexu asas idades se centra n en as sexuaidades no norativas y n sus espaciaidades Estos anáisis aportan importantes datos sobre geograas normamente invi si bi izadas y sobre as experiencias conc retas que viven as personas no hetero sexuae s En este caso, hemos quer ido compar ar as experiencias de jóvenes esbianas y gays con as de jóvenes hetero sexuaes para poner énsis en a desiguadad de acceso a espacio púb ico por ra zón de sexua idad Si bi en os estudios so bre sexua idad en as grandes metróp o is  evan más de una déc ada de i nvestigació a nive inteaciona en geografía, este caso de estudio se sitúa en una intersección muy poco estudiada y en una ciudad media. Los estudios geográc os sobr e j uventu d y espacio p úb ico no acostu m 1 . 'fs la truci ones  it as del inglés so n rauci nes prias 210    a aa izar a cuesio nes de sexua ia  m ien ras que os eudios   r sexua l idad o se ceran en c ómo o vive a j uven ud Por este  ivo tomar emos un a per spectiva in ersecciona para e aná isi s.  es exami ar a s i n erconexione s y re acioes e nre di fer es grí as (de género sexu ida  et ia case edad) para ver cómo   venud en Man resa as negocia en s  esp cios cotidian os En que e siguiente presentremos unaa revisió bibiova desdeapartado  as geograf ías fem inistas  as geograf ías de a  ca  vntud y as de as sexualiades. A ontinuación mostrremos las metodoogías utiizadas o en e trabajo de campo como en el anáisis de los atos Después se presentarán os resutados con l objetivo de demostrar cómo  hete ron ormatividad con dic ona l a xperienia de a juventd en e espacio púbico y restringe e eso a é para aque as per sonas que no encajan en as no rmas de  hete rosexua idad Revisión bibliográc: ea, género y sexualida a i teratu ra sobr e j uventu y es pacio púb ico m uestr a como es ta a ció n es c om peja y ontro vertida La cae e s un espacio donde l  gen te joven enc uen ra li bert ad y es u n  gar de gran reev anci a  un momento de c onstrucc ió de a ide dad y de ne cesi dad  encontrar spacio erae de a m irada aduestá ta (G ough y Franh  05) Pero aepesar de sesto espacio púbico aduticao tá cons trui do po r y para a s per sonas ad utas y es tá produci o oo u n espaci o adu to Dada esta h egemon ía es pacia {Yaenti ne  996) a ge nte jov en está exu ía de u n epa cio que se entiende omo cívico y supervisado por a presencia de as personas autas ue o de nen y contr oan (o i s y Kearns 20 0 1 ; Drisk e e t a  08; Chiu 209) A pesar d e eo  a juvenud n o es u n grup o homogéneo y un a ná is is in tersecci ona m uestra a di versidad e a r ma como se vive e e spaci o pú b ico Las geógras fem istas han p un tado que «e  esp acio e a ci udad s e ha g enerizado de rma ue ex  uye a as m ujer s de s pacio púb ico o as i n uye so o n u os roles atamne pai ca dos y ei mi t os» (Ruddick 1 996:  3 5)  Por o ao o es  o mis mo ser una chic a que un hico en  espa cio púb ico La movi idad es pacia d o chicos est á menos otroaa que  a de as chic as (Thomas 20 5 ), ya que su géero 21 1 determna os roes y discpa sus cuerpos para ue as cicas se comporten de rma «apropada» en e espaco púbco. os cuerpos de as mu eres en as caes son sexua zados por a m rada mascuna en e espaco púbco, hecho que tene mportantes consecuenc s en a  rma co mo vve n as ciudade s ( Hyams, 200 3) La uestón de  medo tambén ha sdo anaza da co mo un ct o ndamen ma rca(V unaent a  mportan de g énero en e ac ceso a ta as ue ci udades ne  99te2;desguad Ruddic kad  996; Koskea 1 997; Pan 200  )  E medo que as muer es sent en e n e esp ac o púb co e s produ cto d e una voeca sstemátca estructu ra (Pan , 200 1 ) ue srv e como re cor datoro de su vu ner ab dad ( Kosk ea,  97)  En e con texto de es tado españo y des e otr os áb tos y dscp nas tamb én se h a ana zado cómo e dseño de es paco púb co n uye en  a n segurdad y a voenca contra as mu er es (Fr eLa xa ne t, 2 y0 1e )género,  edad y su interreacón son ctores ue con dconan a experenca de espaco púbco Pero, ¿cómo afecta a sexuadad? A pesar de abanco de estudos académcos sobre os espacos urbanos de gays y esbanas , a re acón ent re a  uventud y a sexua dad te ne m uy poca pres enc a e ge ografía (RodódeZ árate, 20  3b  Exste n agun os trabaos ue trata n sobr e as experencas de óvene s no heter osexuaes en e esp aco p úb co ( FernándezSa nas, 2007; Barceos Sova apape 20  de  ; Fe ahes eten a e, 20 agunos en reacón osande ugaress Carv de ambente pro-1 1 ) y ceso de «sada de armaro» de jóvenes (V aen t ne y Sketon 2 003 ) o as neg oca cone s denttar as en  tern et ( Downng , 20 1 3)  En e co texto cat án , exsten trabaos sobr e  uven tud desd e a socología, a atropoogía4 y estudos nterdscpinares sobre uventud5 2 Exresn qu se rere a ls lugares fuenads pr rsna hsexuales 3. Ver Papers: Revis de Socilgí, cn núr mngrács dedad a tea de jvntu d co el volún 96 , n úr 1 •Jóvn s  dn ad 20 1 1 }, l nú er 90  Fal e  ales cents  2008) l núr 7 « Matral d  l ga  la Jv ntu t 2006 o el n ú ro 7 4: voluc i so il  joventut 2004) 4 er los estud tn ográc sbre ju ventu d de Cars a ( Fexa y Nlan, 200 ; exa et a ,200 ) . 5 . r imer Conés nternaciona/jentu i Sociea gan za a través del 'M ster nrunver star n Jvntut  Stat 20 09  "lla (20 1 1 . 212 gografí, exis ten muy pocs traba os sobre uven tud y es paci  bl ico (Ro dóde Zár ate, 20 1 1 ), aun que se encuen tran tra bajos en l ámbito metropolitano de Barcelona (Noe, 2008) y algunas  ublicacions de la revista Docmens d'n/i Geofca. Es relen te destacar el monográco Geoaes   inncia,  joventut i lsmílies(DAG, 20 1 1 ), como t ambién los artículos sore espacio s En 6 blicos urbanoss artículos y génerosob (Cucurella, 2007; Ortiz, 2004; 0 ) y alguno re la in teracció n de estas d osSerra, variables on la in cia y la adolescenia ( Katz, 2006; Ortiz , 200 7; Bayli na  a l , 2006; Ortiz et al. , 20 1 2; Prats, et a l. , 20 1 2). En e ste cont ex o, el capítul o p retende ser una aportación especíca a los estudios obre la  uventud y la sexual idad desde la geog rafía y a parti r de ua rspectiva interseccional. El concep to de in terseccion alidad e i troducido a  ales de los chenta K muna erlé Crensh aw ( 1 99las1  yinterconexiones se etalec ió enentre la teoría miistapor como rma de analizar ferentes estructuras de poder o identidades de géero, enicidad, as e social, eda d, sexualidad, apacid ades. Según un a visión intersecc on , todas las personas est án atrav esadas por di versas ide nti dades, ue se viven de rm a sim ul tánea ya sea e posici oes de privi legio  de opresión (Valentine, 2007). Este oncepto nos permite dar  ueta de la experiencia vivida y evitar e xclusiones de grupo s que cstu mbranE a q uedr en os ntersectionali márgenes tambinand enSexuali las i nvestiga ciones académicas. (Tayl or e t Theorizing  . , 20 1 0) , l in terseccion alidad a arece com o un paradigma c onovertido pero útil para el estudio de las sexuaidade, tato por  necesidad de considera r la sexualidad en el estudio de m últ iples imensiones de poder como por la de considerar la clase, la eia, a edad o el g énero en los estudi s de sexu al idad. En el con exto del stado españo , auto res como Plat ero (20 1 2) tamb ién han dendido a necesidad estudiar las sexualidades unade las prspecti va ide nterse ccional que haa visino lesnormativas las complejdesde idades xperiencias y las identidades. 6 Rvisa dl Dparamn de graHa d la Uivrsi1a Auma e Barcna y e eaae de Geog rafa de la U i versiat e i roa. 213 Metodología Se realizaron 3 1 en trevistas a jóvenes (2 3 m ujere s y 8 homb res) de en tre 1 6 y 29 años de Man resa Para obtene r experienc ias di versas, se escogieron jó venes co n di ferentes iden tidades de géne ro, sexual idad , et ni a y clase s ocial, asim ismo también se tuviero n e n cuenta cues  tiones como el barrio de residencia, el tipo de vivienda, la religión o la est ado civi l . Se rel acion aron estas varia bles d e  rma que apar e cieran d iren tes com bi naci ones y, por tano , di rentes experiencia s inerseccio nales Por ejemp lo, d e las chi cs en trevista das, siete er an lesbia nas, una de ellas er a src ina ria de Marruecos y otra de Colom bia. De ellas , dos t en ían más de 25 añ os y dos menos de 1 7. Dos de ellas vivían en un barrio peri férco , dos en el c en ro de la ci udad y el resto en barrios d isti ntos. No se procuró ta nto que la m uestra era re presentativa de la ciudad como q ue las comb inaci ones iden titarias pud iera n i lu mi nar la c omp lej idad de l s experiencias de la  uvent ud en el es paci o públ ico, ya que ls ident idades mi nori taria s o marginadas no solo pueden dar inrmación sobre sus propias experienci as si no que supon en un a i nteresante pe rspecti va desde la que analizar el « centro » (hooks, 1 984 . Las entrevista s se basaro n en e l u so y las experienc ias del espacio púb lico a tr avés de, pri mero, pregun tas generales sobre su con cepto de «espacio público», sus lugares cotidianos y sus experiencias en ello s. A cont in uación , las pre gun tas que se realizaron eron sore aspectos con cretos de las experien cias en ca da espacio me nc io nado , pon iendo esp ecial én sis en os es pcios consi derados como públi  cos. Pregun tas como ¿ por qué te gusta este lugar? , ¿cómo te gustarí a qu e era? o ¿q ué crees que hace que te sie ntas así? , ayuda ron a guiar las entrevistas. Por otro lado, y para calizar la atención en sus identi dades, se pr egu ntaron cuestiones como ¿ te senti rías igu al si eras un ch ico ? o ¿c rees que te pasaría lo mi smo si no ers gay? De esta rma se puso én sis en la rela ci ón en tre sus id enti dades y sus experi enc ias  Todas las en trevistas eron grabadas y transcri tas. De en tre las 23 m ujeres ent revistadas, se escogió un grupo de diez chicas de ent re 1 6 y 2 1 años per tene cien tes a un colecti vo mi nista p ara llevar a cabo una apr oxi mación de In vestigación Ac ción Partic ipativa en la q ue se die ron di versos encue ntros y debat es ( Rodó-de-Zár ate y Baylina, 2 0 1 4. 214 Con toas as personas, juto co as erevistas, se rabajó  bién co iti eraros por a cuda y, pos terormene, debido a la necesidad de usar técnicas que permiesen e anáisis de datos bre la nterseconadad de rma sistemátca, se reaizaron os Mapas e Reieves de a xperiencia7 Esta metodoogía muestra  un a rma vsua dato s qe re acion a os  ugares ( a di mens ón ográa), las estructuras psicoógica) de oder (ay dmensió soca)sobre y asa periencas (a dimensón ayuda a pensar  ropia experencia desde una perspectiva espaca e interseccoa odóde-Zárate, 2013a) Como se puee observar, las metodoo gías usadas ha n sid o m uy versas Durate e prceso de recogida de datos, e métod e daptándose s egún as necesddes y e reción  objet vo co creto. La dversdad de apr ox macon es y de técnicas ha permit id o p ues el cercame nto at amb temaéndeun estudo esde d ferec iados, encas o q ue a co evado aná isis m ásánguos comp eto de las exper e a juvent ud en e espac o pú b ico l hecho d e pre gu ntar sobr e uno s mi smos datos e n rm a de entrevista oral, sobre un mapa d e a udad y en rma de re presen tacón gráca ha per mi tido tener u a ran cantdad de datos que han p oddo ser conrast ados y ana zados n s u compe jdad La heteonormatividad  la expeienci en el espacio úblico ubano No no s ha p asado  ua p orqu e nu nca    Nu nca he mos ido tranq u as por a calle (Teresa) sta a se de una chica ba nca esbia a de 26 años, camarer a y que vve con s novia, poe de reeve a ntensidad co que vive la represión de a heteronormatvia en e espaco pbco. Nunca han podido r «t ran qui as» por a ca e por e he cho de ser una pareja de mujeres. 'Iresa cuea que ya sea por ea o por su pareja (esto 7. Par v er ejmplo obr  l o  Mp    li ev s d la Exrinia  Relief Mas en inglés)  un anális is ms ell o s bre sus i liain mtló icas y tó rias ( -e-Z a , 20 1 3)  215 a veces es uto e conictos) nuna se muestan afecto en a ca hecho que es pemite pasa como amigas como heteosexuaes y evitar ser reconocidas como esbianas Ea atribuye este tipo d actuación a a pre venc ión  e una posibe ag resió n o e esta soetida a as m iradas d e a gen e, sen ti rse observaa e in comodad a ste ti po de actuaciones se encon tró en todas  as ent revistas hechas a esbi anas y gays A c on ti nuación se pueden v e agu nos ejem pos  Por a cae vamos como amigas Atuamos norma, como si ésemos amigas, tam poco tenemos a necesid ad de ir cogidas de a man o o que sea ( Ed urne) Tam poco i rás a á a Barr i Ve de Ma n esa cogidas de la m ano o dándte un beso, porq ue bue no , porq ue sabes o qu e te puede s encnt rar (Ainhoa) Entonce s también es un poco    Metam orsear con e entorno s por e  si mpe hec ho de qué di rá a gente y que    Que se que darán mira ndo y te se ñaarán    s es te mie do    [     Y e a [ a novia eso de mostrar se no, cee qu e es un espe ctácuo Tenemos discusiones (Teresa) Yo nque h eirtenido ni ngún opobe ma me .   meter ] . Peoayo viera cogidonu denca a mano así n unca posi  tuas Escodi nes n i un sitio de e sos    (André s) Estos casos m uestan a heter on ormat iidad en e espac io púbi  co y a normaizción de a discim inación  Se asume que «o norma» es ir como amigas, que n deteminados ugaes no se pueden dar muestras de afecto que a pesencia de una pareja de esbianas es «un espectácuo» eata no haber nunca «nin gú n p robemo,a»como po r ser gayndrés, pasa p e  acepta no tenido dase de a mano con su pareja La estrategia más recurrente para hacer ente a esta si tuación es e passing,pasa como heteosexua es La iscri mi naió n que pod ían su ir por mo sta  afect en espacios pú b icos es evitada a través de una represeación «adecuada» a as nrmas de géneo Sin mo strar a cto a una ersona de m ism o sexo y ep esen tand e género a code con a f em inida o mascu inida hege mó nicas se 216  tan as agr sions o po sibes cm tarios Como sña Fouu t ( 1977) , si mpr s tamos suprisano n ustr os comportam in tos  bio a a poibiida  sr obsrados stas prsonas jós bn cómo pra  por y son capacs d ci di r con prc sió n uándo y ónd p un «ac tur omo sbianas o g ays» y dón  o,  or o ta to, pasar como htro sxuas Ju gan con s us i n idas ra ganar os priigios  su a géro htrosxuaia a   ismo ti mpo , ncaa con , cas, tninormati cidad y pqu, osició as. Si n mbargo,  m ismo hcho  o mostrar o  sondr d bram t su in tia sx ua  s una im posición ja a a qu  bn hacr nt si no qu irn xpon rs a un a rprsión mayor. A st rspcto, B row (20 07: 1 O 1 O sostin qu «los pro csos  trización no inicados pudn no sr lgitimados como u roblma» y po r o tato no cu ntan o mo un a discrimi nación . La b igación ar una dtran iscrim ación y lnoprman d rta n  qduit s cun sta ins pr sonas s soo u nt  pstao roblma i o qu s un signo d discri minaión n s mismo y la ng oiación sutat s un cto i rcto  a htr ono rmatiiad. Cuano s ompara con los comn tarios d prs o as htr osxuas s  cómo t pro cso i mp lica u na moi cación sustancia l  a xp rincia  os sp acios. ¡Ah no!o,¡Yo sinto bi ts co n sto! Es qu no .   Sí car  nm todas part s n mu ytodas bin par (Mrc) A, no, o. Si oy con Caros oy prfctamnt. (Laura) No  s soam nt qu s tas m ujrs no suan d iscrim i nacions or i r con su pa rja mascu li a si o qu , omo com nta Laura,  hcho d ir co n un ho mbr ls aporta más sguri a como m ujres omo ( 1 993) dd, ifrcia sbianas y ays sVquanin  las muj rs rcib n comua narios acr n a dr suapar in cia y proposicios sxuas n a ca, hcho qu no s soamnt viocia antiésbica por part  htrosxas sio tmbién na rma d rprsión d comportaminto indint  as m ujr s Es d ci r, un a m ujer con u na par ja mascu in a no soo eita a  iscrimi nación por s u sxuaida sio q u también ita qu otros hom brs a agrdan como m ujr . Agunas  as sbia 217 nas entrevistadas habían tenido parejas masculinas en el pasao Como ella s explican ¡Con un chico est o n o pas aría! Es cier to que si va s con un chico estás mucho más segu ra . . . Es di ferente Totalm en te diferente (Cludia) Una parej a de chico y chica n i si qu iera piensa en esto. Per o tú tienes que hacer tod o el pr oceso de « ni ngún prolema, no soy una rara, soy igual que la otra persona»; tienes que hacer todo el proceso para llegar a esta conclusión Y una pareja mixta no tiene que hacerlo. (Carme) La sexualidad no normativa es algo a esconder en el espacio público eitarosexua agresiones (Kawale, mien traspara la heter lidad go za, pues,2004; del pValentine, rivi legio 1993) de la norma en las calle s man resanas. En l as entrevistas a heter osexuales, la cues  tión de la sexu lidad n o era un tema re cu rrente para hablar sore sus experiencias de malestar en el espac io pú bl ico. Aun qu e con la elab oración de los Mapas de Rel iees de la Experien ci a se pregu ntó sobre esta temática, las respuestas acostumbraban a ser rotundas y cla ras su heter osexualida n unca ha sido un problema en e l espacio públi se coreDe hecenho, algún atiidadnde la heterosexualidad ejó el en hecho decaso, que la n onorm consideraa tener que re llenar la columna de la sexualiad (en una parte del prceso e creación de los Mapas de Relieves de la Experiencia) por «no tener» o por «ser nor males» , hecho qu e demuestra omo alg unas iden tidades se cons truyen como «las otras» m ien tras la heterosexualidad permanece como la norma, i nvi sibi lizando s u especici dad. Pero, au nque la represi ón en est as citas es previa a la li mitaci ón expresa situaciones de estar enendeterminaos lugares,a también se narraron algunas las que la negativa permanecer en un estaleci mie nto haía si do expres a y di recta: Y una vez estáamos desayunano en un bar y no nos dimos ni ngú n beso n i nad a. ¡Está bamos ogid as de la mano hablando de no sé qué y el seño r del bar vino y nos i nvi tó a irnos del bar! (Ainhoa) 218 Estos casos refrma la idea de ue el espacio púbi es struido cmo heternormativo y ue se (re)prouc como si y Valentine, 1 9 5 ; Bell et eexistiera como heterosexual (Bell l  1 4; Bi  ie,  97; Valeti e, 1 93) , causado mae star a uelas personas ue o ecaja e la orma heterosexua. La elativa «no rmal id ad» co  a ue i tegran la ne cesi dad de egociar os tanteme e si se uestran o o como xiste so  seu es tabe ce ade trvés el mismo proceso demheteroormaició proceso orma izació ue ls hac e asumi r que su relació o es bienvenida. E incuso si lo d iscute o o tras grede , tiede a aceptarlo como  or ma, lo  ue reerza todaví a más a het eroor mati vidad e e pacio púb ico (Valeni e, 1 9 3)  A o mostrar su sexuaidad uea i nv is ib il iada e un espa cio ue se preconci be nor mati vame te m o heer osexu a. U eje mp o ue i ustra con cla ridad es ta idea es la di fcul de egu imagi a esce aris bres deue homo bia.osCuando dri aa setad le pr a sobre cóm o eligustaría esn espaciosa úbl icos ea re sponde que «de searía u buen carri bi ci» . Después de a arga e trevis ta ce trada en e tema d la s exua idad no rmat iva, s respuest as a esta p regunta fn a rep rod ucen u na i nd iscut ida i dea de heteronormatvidad del espacio púbico. Por o tato, esta no olo imia su comportamieo sio su capacdad de imaginar un uro distinto. Lar isión de ircómo ierveir espacio púbco alora si se qu iere ms alá o o enela eegociación co implica os demás. a tctica del paing no deja de s er u a actitud reactiva ue no prooca ni ngú ecto en la cotrap arte ; si n em bargo, decidi r mostrar bremete la homoseualidad implica expoerse a ua reacció de os «otrs» ue se prevé conictiva. Y tieen ue vaorar si se ecue ran p reparadas para hacer  e te a este c on i cto, s i  uieren enero , es i tere sa o es covi ee en cada mom e o y ugar. ¿Qué hacemos? Evi tarlo. Evitamos a si tuación . Haem os que no ocurra La gene o ve como una provocació. Es como si les embrute cier as su m irada . . . (Cludia) [Neus] No, a ver, primero tú lo haces [cogere de la mano o besarse co su ovia]  si dice ago contestas, pero ega u momen to en ue . . . [Claudia] Y a te cansa s. [Sívia] Bueno, u izás 219 no estoy tan rep ri mi da como ella s por que yo lo hago en la call  y cuando sal imos po r la noche también  pero qu izás lo haría má s si no tu viese que es cuchar est as cosas    Ya n o es si te i mporta o no  es qu e te can sa y si est ás cansada no estás bie n Como expl ica Slv ia  el proc eso de enentarse a la si tuació n de heterono rmati vidad el espacemoci io púbona licoles unaismo actividad queciación p uede ser mu y tigan te deendesgaste Asim  la nego puede ser un tea de discusió n en tre la pare a ya que pueden c on sidera r de disti nta rma el hecho de mostrar su af ecto en púb lico: s lo que la gen te va a deci r y que se te ponen delante mi ran come ntan    Es m iedo Ell a [su novia ] no quier e hacer un e s pectácuo que es coo lo enoina Teneos discusiones al respecto (Carme Yo lo veo distinto  barrio es un rollo distinto que Manresa No sé, en mi barr io hay ciert as cosas que    (Ainhoa} ¡Una vez me cogió de la mano y casi le parto la mano! Me sentía súper incóodo!    ]  En Barcelon a me costar ía m ucho menos es que en Manresa ni de coña Aparte que te conoces . Ma me nresa y me serí aci ncóm odoriopor qu me e mrallo iren otoda de que haga n algún ome nta  Yoelenhecho estas de cosas ucho y a m í por ejemplo «¡M aricones!» o lo q ue sea me pongo de ma la ostia y es toy todo el día ma l ( An rés An drés tam bi n pone de an i esto la e scala espa cia l y la ti po ogía del l ugar en l a nego cia ción de la ho mosexual idad en el esp acio público No es lo iso un barrio o un puebo que una ciudad media una ciudad metr opoli o un l de ugar la comu nidad hoosexual sea importante Asítana el control a donde heteronormatividad puede variar según el lugar pero estudios sobre sexuaidades disidentes en ciudades pequeñas alertan de que no es el tamaño e una ciudad lo que hace más cil o difícil la expresión de estas sexual idade s sin o un gran aban ico de con ti ngencias g eográ cas que pro duce n determinadas normas s ociales (Myr dahl 20 1 3) . Tener e n cue nta estas cue stion es co ntr ibuye a no reproducir jerarquías urbanas 220 re entros cosmopoitas más abiertos y iudades pequeñas más nservadoras. e acuer do ua vez e e ca ava de Si tges que te cogí a m a o y te pusiste como un pi mieto y a ca bo de un mi u to e dije, ¡pero si estamos en Sitges! (Ramn) En ocasiones, experiecias negativas previas codiionan as accioes turas, con o cua imita ás a decisió a tomar omo ex poe S ívia: S: Para í so os típicos ometarios com o ¡esbia de iera! y o s qu más Y me metí e ua pe ea por esto    E: ¿ Ua pelea ? S: Sí, porque lamaron a ua chica tortiera de mierda (Sívia) Como se ha visto, su experiencia e e espacio púbico está ertemete determiaa por su sexuaidad y por a necesida de ul tara ar a evitar posibles ag resion es Si bie e este c aso s e ve omo S ílvia re spoe a la s agresiones suidas, tambi mostró ua r an apaci dad pre ve tiva, gestioand o sus ident ida es para evitr poerse a situ acioes de riesgo. Yo siem pongoeapon apucha. Me di¡e ce que visto remete c omo u n chico , y pre si deme oche go la capucha parezco a u chico! ¡Luego ya adie me oesta! (Sívia) L experiencia interseccional como resistencia  eje mp o de Sívia muestr a oo a eperienc ia i ters ccion a de spaio puede usars e tamb ién oo r esistecia. Sívia sue disri irmas aió  demiedo gne ro ue nmujer o enaajavov on er  asa o estpor betner cidasuna y, aexpre a vez,sió tiene com asa de nohe. Si bie n estas dos opresi ones podrían i tes ica rse, e ste aso Sívia as usa co resistecia sa su ropa para pasar por un chico y evitar e miedo a u n aco so sexua de ohe Sívia juega o su expresión de género para uhar onra e sexismo, o que muestra una gran habiidad ya que según e ugar juega de rma di ferente c s us i den i dades. 22 1 Otras experieias e el espaio pú bl io m uestran ómo la in erseccion al idad e s im presind ible para enender su s espacialidad es y usos. Por ejemp lo, Carme e cuen ta un bar gay, un l ugar e el q ue se enc uen tra a gusto en relació n a su sexual idad . Aun as í se siente era de l ugar; s u género y sob re odo su edad (el b ar es ecuen tado por homb res de unos cuarena año s) la hac en sent ir i ncómoda. Como Nashtiytuye Bainsi mu (2007 señalante, con en los eciosy la queer la sexualidad cons ltán eamen el género clas e soial . Y en esse te caso, se po dría añadi r, la edad. Buen o, e stá el [nombr e del b ar] . . . A mí no me gst a mu cho . . . es realmente un bar gay lleno de hombres de cuarenta y más. (Carme) O el caso decafetería Aya, uadel chia lesbiana ma rroquí, q ue encporent ra bienestar en una cenro de la ciudad ecuentada personas blancas, mayores que ella, de mayor poder adquisitivo y que actúan según las no ras tra di ci onales de géner o y de sexua lidad (heter osexual) . A pesa r de que su juvent d, o rigen , or ientación sexual y clase social di eren del coexto, se sien te bie porque n o hay personas de su país de srcen. En este sentido, la cafetería es u lugar en el que p uede huir del con trol social al q ue está perma nentemente en el espacio público por pare de personas de su propia sometid comu nidad. La enicidad también condiciona la sexualidad. La misma persona en Marr ueco tiene m uy di fíci l mostra r su sexua lidad en el espacio público. Si embargo, el fuerte ontrol sobre la expresión heterosexual en público le otorga un cierto margen de actuaión en l a es ra pri vada. En los es pacios ínt imos, Aya no es s ospec hosa de mantener una relación homosexual y por lo ano es menos con trolada qu e u a pers ona heter osexual . ¿Por qué no puedo ser lesbiana en arrueos? ¿Por qué no puedo and ar por la c alle de l a ma no de m i no vi a? ¿C rees que el isl am lo prohíbe? De heh o m i nov ia estab a en a rruecos. Era mi prim a. Alí si te acue stas on una chica no hay problema . . . una am iga, un a prima . . . pero si te acuestas con un chico . . . ¡No, no, no, no! (Aya) 222 El espaci privado e s u lugar cn troverid o que i rm a sob re  relación de lesbian as y gays en el es pacio púb lico En los estudi os br e la situac ión de lesbianas y gays en relación con sus  mi lias, el ogar mi li r ac ost mb ra a ser un lu gar donde s e experienc ian las onse cuecias negativa s de su orien tació se xual (Valen tine t al , 003 ) mien tras qu e la ca sa p ropia se asocia a u l ugar de bienestar y d iden. Aifcació Elwood K etly n utrado rray, 007) pesar de que en las, 2000; en revistas r eali, 2008; zdas Gorma se ha  encon sos que demuestran que la casa miliar tambié puede ser un ugar de apoyo, demostrando que e hogr milir no tiene por qué ser siempre un lugar homobico (Gormaurray, 2008) en la mayoría de c asos sí que se coci be el hogar como u n espacio de con icto para jóenes no heter osexua les: No puedo mostrar sexualidad el espacio público] ya que mis pdres no lomisaben y estyenmuy reprimida por esto Se enterar on hace u a ño y medi o pero yo se lo n egué y ahora no lo saben Bueno, yo estoy con ella [señalado a Edue, su noia]  Y como lo sepa n m e muero, porque me ha  repr im ido mucho Prque tienen la me alid ad de Colombi a y es horri ble, la menta lid ad [    ] Si no me de jaban s alir de casa    Me qued é en casa, ade lgacé tres qu ils en una sem ana y p oco    (Tina) ostr arme c o ella en públ ico y as y al no, pero    La gente, yo sé que p roocaría comen arios Y n  por m í, pero por m i m il ia Pr respeo Por no cr ear mal ambiene, po r o cr ear    (Aihoa) Es que so bre todo mi mil ia    en Su raméric a la mentalidad es mucho más cerrada en ese aspecto y el hech de cogeos de la mano me haa senti r i cómod o    (Andr és) Esto s ejemplos m uest ran cmo el hogar mi li ar es un espacio de alestar y la s restri cci oes que su e en él se extienden al espacio públ ico La ci a de Tina muestr  cómo a s eparació  en re lo pú blico y lo privado e s amb igu a, ya que si ella  era ista cn su pareja en la calle por sus m il iares (o alguna persona que pudiera i nrmarles) su i ría igua lmen te la represió n e el espaci o doméstico La hoo- 23 bia que su e en su a sa se extiende a es aio úb io i mp id iendo que pueda most rarse omo esbiana en é y deba o utar siem pre a reaión on su pareja . En este aso, a dep endenia haia su m i ia la ob iga a man tener e sta si tuaión , omo ea arma : Si tienes tu vida p ropia ya es dis ti nto porque uando ya e stás independizada tienesdíaocouyo es en muy porqueY no tie nes que vivi rycada n a m ti radiferente, en ima , ¿sabes? tiene que ser di rene, sí o sí. (Tin a Como muestra en su ita, su ase soia y a situación de su mii a condiiona su si tua ión , ya que as i mi tacio nes pa ra su emani pai ón son nda men tame nte eonóm ias. Desde un a perspetiva interseiona puede verse que su posiión en otras estruturas d poder in la recopresió y juega te un(npap const itut ivo es en un esta situaci óntensi . S u ca estatus mo inn migran aióeen Coombia impor tan te tor en a negoci aió n de sus re aio nes. Ea en tien de a repr esión omo parte d e a me nta idad oom ian a de sus padres. Tina consi dera que se trata de un hecho u t ura debido a or igen de sus padres, lo que e hace senti r ompasión hacia eo s e i nc rementa su senti mie nto de ul pa. E hecho de tener que estar perma nente mente en situaión de aerta por si es vista por aguien ondiciona no nte sooene os usouque ha don ce de úblismo io sin o queo,ma rcasituaión ómo se sie gares desp va. aio En elp m sentid ot ra que m uestra l a i mportacia de espacio priv ado e s uando este no apo rta a privacidad que s e e supo ne: Yo espaio p rivado . . . Yo ni en m asa tengo espaio p rivado, ¿sabes? Porque es un piso pequeño, somos mi padre, mi madre y mi herman o pequeño y yo y ea y e s un piso de . . . seten ta metros privacida d poa, y si e ni ño no en tra ada dos poruad tr es . rados. . . (AinYhoa Esta ita dem uestra que e  derecho a a i udad n o p uede ir sep a rado del dere cho a bie nestar en e espa io privado. Según a rgume nta Fenster, esta división se ha usado históriamente para justicar a subordinaión y a excusión de as mujeres (Fenster, 2005). Los derehos y disriminaiones que se suen en e espaio privado 224 n permeables al espaco públo L homoba que ue Tna  su casa m il iar re sult a im precnd ble par a exp lc ar la rep resió n ue su e en el epac o p úbl co y muetra c óm o el ac ceso al espa o úb lo de be se r en tenddo en relación a la s tuación q ue se ie en l epaco pr ado L separacón e ntre lo s ds, en tendida  omo una paracón ca y rígda, perde sentdo Pero a la ez reerza la ea euna queoncepcón la oncepión espacio públo e nhao ndmentado bre de lodeprivado como l pol ítco Conclusiones l es paci públ o e tá cos trud  omo heteron oratvo, ademá  e normalzad en base al géero, la clase social, la etncad  la ea La experenca de jóvenes en el espacio públco pne de maifeto cómo condcna o n el espaci o delalaheternormatdad s persnas cuya s exual dad nolaerelacón s privilegiaa La ecia de esta jóenes está ertemene ondconada pr la represó de la heteron ormatida d, que les hace sent r pres ón e n cmd da s egú su exposic ón sea más o meno s  sb le y según la oaccón sea ms o mens drecta Pero se ha st que, en general , te nen un a gra cap acidad par a gesto nar sus iden tdades de r ma i ntere ccon al y en relació n a ls espacs. Su hab il dad par a negoar sus uestrala la poa rgdez de etas, pero necesdad de entdaes cultarlas muestra naturaleza heteronormatia della pacio p úb lco El mero hecho de tener que estar en ale rta y tomar desiones cnstntemente acerca de la psblda de mstrar su exualdad pr el med a la represón debe ser considerao en sí msm u na rma de d s rm a ió La compraón con jóenes heterosexuales muestra la desgualdad que la sexualdad mplca en el acceso de las persnas homosexuales al espaco públo Por lo tato, la sexualidad apa ee com un ctor n dame ntal para pensar sobre el derech  a la udad , no solo de jóenes, sno de la c udada nía en general Pero en l mo men to de rsi actual y la di f ul tae de emanc pacón  ue onl lea pa ra l a j uenu d, las relacon es de poder q ue pueden darse e n ro del hogar en jóvenes qu e no « encajan » en las no rma socale te en m portante s cnsecu enca e cómo e n las cudade s y q  lberta de tnen  Así, el derec ho a la c uda deb e anazar tambn la  225 relacon es de poder exste ntes en los espaos pr vados ya que estos conguran tambén las cudades y pueden ser mportantes entes de desgualdad Un análss ntersecconal que tenga en cuenta las múlt ples dentd ades y su m utua consttuón es pue s  nd ispen sabl e para pensar en c udades socalm en te más justas Refrncia bibliogca T (20 1 1 )  «A ua e o Medo: Agumas Con sdera e sobre a o ln ca So da por Jovens Ho mossexuas em Espaos Públicos» Reva Laino-americana de Geoaa e Género, Pont a Grossa 2 ( 1 )  pp 92 1 03 BI M ; ÜRTIZ, A y P  M  (2006)  «Chl dren and pla ygronds n Medterranean ctes» Chiren' Geoaphies4 (2)  BARCEL SOlIVA, pp173183 B, 0. y I G (eds ) ( 1 995) Mappingsi:geoaphies ofsexualiies Rouedge Londres BL, 0., BNNI, J   C J y  I  G ( 1 994) «Al hyped up and no place to go» Gen Pce and Cutre 1  pp 3 1 47 BELT, L y AN M ( 1 998) «Se x n pub lc » Criicanqui 24 (2) pp 54766 BJNNIE, J ( 1 997)  «Environmen Com ng outand of Pnning geograp hy: wardsand a Space queer epistemology?» Dto Socie 1 5 pp  22 337 BROWE, K. 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EL TERCE R ES PACI O DE LAS MUJ ERES ÁBS QUE VIVEN EN BARCELONA* anaa HamdanSalba lntroducci6n El gn cado yylaa onrucón  uetro s epacoeno son com plejo que cul tu ras dideferente  coexten el mteporáneos m o lu gar y lo límte entre ellas on borroo, evanescene, cambante y sujeo a n uenc a recípro a s por ello q e cond ero apropado ut l zar en esta n vetgacón el térm no tercer esaco , q ue no ayda a comprender de manera crítca el epaco contemporáneo de la ujere árabe  que vve n en la c udad de Barcelona. n part cula r, no ayda a comprender sus experenca de vda cotdana en el espaio p úb lco, q e e vvdo en el marco de un a clt ura d ferente y más lbre. l gncado de lo espacos públo se dearrolla y e pone en cuetón con el paso del tempo. Por ejemplo, Fraer (2007) señala que las esferas públca on cada vez má trannaconale o potnac onae y cuet ona el con cepo de efera pú blca bu rgea de abermas, a rma ndo que et e epao ds cr m na a la  m ujere  y a lo gru pos má devorecidos ( 1 992) . egún Fraer, no hay un ú nco espaco pú bl co,ylos nogrupo dveromargiado  ipos de epaos licos, de rma ue las mnorías -comopúb las mujere-, los grpos ét ni co y los ho mosexuales pueden produ  r sus propios • Ea invig ci cunó  l  ayua a l ( ;r upo   I vigaió ol ia e la Ge ra i a  Caalunya (2 009 SGR- 1 32 I ) y  u a beca stra  a Univrsia Auma e Barcel Traducio por ng ll  Pnzia n. 231 espacios at erna tivo s, on rtabes y afectivos y p or o tan to pueden materia izar su s i den tidades, intereses y nece sidades. n consecuencia, y debido a uo de personas a través de as ontera s así c omo a a i nm igración y a os movim ientos e in terco nexio nes ent re a gen te, a cu tu ra hu mana ya no e s estát ica, i na tera be y bin aria , sino q ue está sueta a evouc io nes y cambios cons tan tes (Ko eedsony «transmitidas» Simonsen, 20 y transrmadas 1 ; Kra idy, 2005 ; Bhab 994. Las cuturas dentro deha, as 1nuvas ubica ciones y con textos, p ueden aportar « nuevas vaor iciones de a di ferencia y a diversidad» ( Laurie et a ,  99 : 22 23 , y crean «ago dire nte, a go n uevo e irr econocib e» (Bhab ha,  99  : 2 1   . Para Babha ( 994: 389 es e tercer espacio el que «coneva nuevos si gni cado s cu t uraes, cambios y es paci os ad ecuados»  tercer espacio es «un escenario y una práctica» (Licona, 2005 desarroado por diversos grpos oprimidos y marginados, que permite e surgimiento de resistencias y negociaciones Es un espacio contrahegemónico y de rechazo a a autoridad coonia, y por o t an to, e espac io de las oport un idades, de la c on tradicció n y de a ambig üedad ( Puente L ozano , 20 1 l ; Kascheuer, 2009; Bola tagic i, 2004; Soja,  996, 2 009; Mi tche, 20 05; Khan, 20 02 ,  998; Bhabha, 94. Los académicos que eaborar on e concepto de  terce r espa cio se cenrar on eenn easmidenti cut urale m uere usu manas que vivían undodades occi denta (verspdeor as eem po: sMmishra y Shi razi, 20 l O; Kh an , 2002,  998; Dw er, 200 0 . Khan (2002,  998: 490. A utiizar a noción de tercer espacio, destaca a habiidad de as mueres musumanas para negociar y resistir diariamente a opresión gracias a sus identidades dinámicas y homogéneas, y a hecho de «n o reci bi r y aceptar p asivamen te práct icas is ám icas o d e a cutur a domin ante». Según Bha bha (  994: 2 1 1  e te rcer espacio es una «nueva área donde de negse ociació de sign i cado ció n» s e es pacio da a n, negociación sobrey de a idrepresentaent idad y, po r o ta nto , es e ámb ito en e q ue se crea una iden tidad at ern ati va que pued e ser modead a y remodead a (ng is h, 200 4; P ie,  94 . De rma sim iar a Khan (2002 , 1 99 8 , M ishra y Sh irazi (20 1 O) sostienen que as identidades híbridas de as mueres musumanas estadou nidenses ocupan un « tercer espacio » en e q ue, a tra vés de su negociación ot idia na, redeen y r emodean sus identi dades 232 n la pri mera secó n del capítu o se expon e la metodol ogía de  i nvestigacó n y en a segun a se presen tan los resu tados em pírcos del estud io a travé s del aná li sis de los cuatro c once ptos cav es que emo s eaborad o a part r de las na rrativas de as m ujeres. En a tercera  ú t ma secón presenamo s n uestr as on lus ion es en reacón a as xperencas c ot da nas de as m ujere s en a ci uad de Bar ceona. Meodologí de estudio ste trabajo se enra en las experencias espacaes cotdianas de muje res árabes que vven en Barceo na y espe cia lme nte en aqu elas ue han emgrado soas o on su ma) desde e Mediterráeo rienta. El objetivo especíco del estud es analizar as práctcas spaciales coti da nas de est as m ujeres árabes y examn ar el modo en uebdne rma su 0,sent do depapertenenca el espac pú co. Enn y dan d écada de a1  España só de ser unenpaís de emoracón a ser uno de nmgración debido a os cambios polítcos  económcos dervados de su incorporacón a la Unón uropea La magn tu d cada vez mayor de a in mgracón haia Espa ña conlevó u ncremento d actitudes discrmnatorias y racstas hacia os extranjeros en particar on los nmgrantes de Marruecos  de Pakstán que no soo se diferenaban scamente sno que amb habín 1llega Fargues 004;ién Escrv 97 ) do  Bara ser ceonunamero tien esos una Hancok poblacó 20 n de1 13;.62 1 . 537 habtantes de los cuales 282 178 son nmgrantes es der un  7% de a poba ió n En re lo s n migrane s árabes en Barcelona  os arro quís son e  grupo más numero so c on 1 3 674 in migrantes y os argeli nos el seun do con 1  740 n mgran tes A un que el n úmero de árabes procedentes de Mediterráneo oriental es relatvmen  ferior (apr oxima dament e 1  1 20 n migrante s) su nú mero no d eja de creer Ayusgue ntami de Barcelon a 20itatva 1 2)   Du rante e  verano E l estudio unento a metodo ogía cua y e otoño de 20 1 1 s real zar on entrev istas en p ro nd dad a 24 1 . Oro s grads gr upos < plió  i migrda so o pro < s d: 'akisá, Iaia, China, Ecuador, olobi, Bolivia y Fracia (po rdn Je poraia) 23 3 mue res árabes resid en tes en Barceon a 2 Estas m ujers pertenecen a diferentes grupos de edad y son srcinarias de diversos países árabes Todas eas viven en barrios céntricos de a ciudad, per tenecen a a case media y media ata y pos een un b uen n ive de educación (ver tab l )  . La mayorí de as mueres en trevistadas habían egado a Barceona con sus maridos (o miiares) que ven ían a Siet estudiar, viv irpri y traba r en  a ci udad e de  au as mnq ueueresuego óvens eesquedaron vin iero nasoas, ncipaja mente para estu diar, hecho que re eja a cre ci ente i ndependen cia de s m ujere s árab es que emig ran , en prticua r a as grand es ciudades (scriv, 1997). Las entrevistas se levaron a cabo en árabe, e idioma que as mueres y a investigadora tienen en común Toas as entrevistas eron grabad as4 y transcrit as Posterio rme nte, se ut i izó e método de «náisis temático» estudiaroscaves nartivas, a idd de identicar os temaspara principes que secon repetían en as nartivas Con este enque, os temas no se determinan por anticipdo, s ino que se van identi cndo a med ida que su rgen e a AB 1 ESTRUCTUR DE L G RUO OJETO DE ESTUDIO Pal d srcen Paesina Líbano Siria Túnez rak Marrues Jordania 7 5 4 3 2 2  Ao en Baeona 3-10 1120 Másde2 Nacida en Espaa 9 7 6 2 dd ducación M e n o s de 35  3 5-50 9 M á s d e 1 2 cundaria Universiaria Máster Doranda Pos-docoral 4 14 2 3 1 2 Hm pre erid p r éfi  la id en idad árabe d ta muj res (part  d la cual   mu sul maas y, u a par menr , sn cri stia a) pque hay di ern cias ciae  cu ltu rals y plít icas ntr las muj rs árabs y las mujrs musu lmaas prcedets d p aíss  árab  (Au-Luh d, 1 998 ; Tuckr, 1 993 ) 3 Hm escgido cetrarns n st grupo (ue pued sr cnsidrad privilegiad  términos coómicos y cias) dbid a la ata de sudi  ivstiaci cetrads  st tma. 4. Excpt ua, cuy sps s pus a prmitir la raació d la ntr vita. 234 se de anáisis Esto temas cave constituye ua «estructura de conceptos» , que es coo « ua red» o « un p ano » de conceptos r ea cion ados e re sí, q e os ayudan a te ner u a comprensión exhaus tva (Jaar ee , 2 009  50 ) de as prctcas espacaes cotd ia as de as mujeres árbes en e espcio ura o de Barce on a, y de cómo eas denen y da rma a su se mento de pert enenci a ste aná isis l evareos a cao parteooccentaes de a hpótesis e que as mujeres raes que vven en cudades se enean a mútipes estrat egs e poderes, q ue puedn actar y  mtar (o am p a r) sus práct cas espacaes y s sentdo de pertenec a: gnero , cu t ura (a ser parte e una ctura conservador y atrarca) y nacionaidad (edo a qu son arte e un grupo árabe minortar) La experiencia cotidiana de las mujeres árabes en el espacio úbico de Barcelona travs e aáss temático que hemos utzado para estudar a ar ratva de as m ujere s ára es hemos ide nti cado cuatro c oncept os cave, done «cada concepto tene com pone ntes y está de n do por eos» ( Deeue y Guatta r, 1 99  ) . En n uestro estudo, ca a conc epto tiene  verso s teas, todos eos re aconaos entre sí (Ha mdan- Sa i ba y Fen ster, 20  2)  stos cocepts const tuye n una estructura A e coceptos proporco una comprensón as práctcas espacae s ct que a nas e as m ujeres áraes en ede espaco p ú ico de Barceo a y qu e ree ja su co pejdad y as con tradccion es en su vida cotana y en u s endo de pert enenca  Ep erienca es p cies iferentes de las mujeres árabes n el es p acio p úblico e Barcelon as narrativas de as mujeres ustran as direcias qe e ugar y  etermnar su movidad y comportamiento (esaco as on , pueden 20 1 0; Lur e et a en , 1 999)  stas mu jer es que r esde n en Brceo a e tzan as d ferenc ias entre a experieca espacia  en  o ca , cu t ura y poít ico en e es co pú ico de Barc eon a y en e e as cudade s en as que vvían anterormente, por o qe n o soo  sign cado d e movldad y coora ieno ha sdo r econs truid o y remodeado, sio tamié e sgcao de perteneca Marah ata e su narratva e diferente comportamento escia entr 23 5 Barceoa y su ciudad ata e Siria, Aepo.5 «Aquí» ea puede ir en bici ceta y e moto, pero «al Í ta  cosa es imposible Mediante e  uso de os térmi nos «aquí» y «a  ea pone énsis en a di rencia ent re estos es pacios, no soo e a práctic a espaia por sí mi sma si no tambi én en e hecho de s en ti rse aqu í más cómoda, pues pu ede actu ar ibreme nte en este espacio urb ano e i nc uso me recer e res peto de a socied ad arah exp ica: Aquí [e Barceoa puedes ir en biciceta, pero aí [e Aepo] es imposibe Y si o haces aí, te mirarán como aguien que es excesivamente ibre, y considerará que has vioado y traspa sado o s  ím ites de a sociedad  Aqu í me muev o con ua motociceta y acostumbro i r a cuaquier siti o; e S iria no Aquí respetan a as mujeres, y eso me hac e senti r cómoda (Marh, 40 años, Si ria) L mujeres paestin as que viviero n en a P aest i a his tórica6 nos contaban as imi taciones poíticas que aonaban aí Por eje mplo , Saa 30 años, paestina de Jerusaén) con ecuencia decidía no ecuentar determin ados e spacios debido a as d ifcu tade s pol ítica s de movi i dad en tre Jerusa én y Rama a h7 A actu ar de es te modo estaba i mitado su espacio y sus opcio es, pero c ons ideramos que su decisión de tipo táctico Esta s i era mi taciones po íticas, sociaes y cul tu raes no as su en en Barceon a, mie tras que sí o hacen en sus ci udades de srce No soo porque está viviendo en una cutura más ibera y más ib re, sino tambié n porque pe rteec en a u  grupo privi egiado (educa do y de ca se media) , y porque a transrma ción y reconstr ucción de su cultura a través de a coexión con otras culturas es brinda un n uevo sentido d e movil idad y de cond ucta (Simo nsen, 2008 ; Kan , 5. Es impoa e m cionar aquí qu l erevisa s r lió ud  meza os ac cimieos violes e Si ria , qe Marah y r mujres sirias  haía xprimead 6 A habl ar e la Palsi a h isóri ca hago rfernci a las oeras plei nas a ri s a 1948. 7  Ciuda paina si ada al o  e Jrusa é. 236 002 , 1 99 8; Bara kat, 2000; Dw yer, 2000 aurie et a,  99 9; So ja ,  996; Bhaba, 1 994) . sa cut ura híbrida/re costruida  vorece a creción de tercer espacio que es permite disutar de a gran i dad y aprovechar sus ociones y ci idade s, como o i ustran as siguientes narrativas En as narrativas de as mujeres con ecuencia se recala e 8 arácter y dinám ienitebertad urbaopor deaBar eo es so o que vivo pu edan move io rse de conamb myor ciudad, s i No o que hay u na gra o ferta de acti vidades en tre las c uaes pueden escoger Y eo tmbién o experimentan aquelas mujeres que están más i mi tdas, cu tura y re igios amente Li na comena: Hay muchísi mas actividad es en esta ci udad en as que p uedes participa r    porque a ser un a ci uda d gra nde ha y muchas oportun idades urales opio   yo nes aproy a vecho es L ci udad brindac ut muchas gen te,assi oportun  o desea, idad uede enriquec er su vida i na, 30 años, pa estia de Hai) Lina está a corriente de as actividaes cturaes y sociaes ue oee a ciudad, y utiiza y aprovecha as ociones laboraes, u lt uraes y sociaes  o tras paabras, dis u ta de las experiencias sociaes y cuturaes y de a vida urbana en a ciudad Koeed y Simos 2 0 1  : 352 ). Atora i gua Lia, Suh (3 1 años, que es táen, haciendo su doc do qe en Barceo na er y vive soa, Tún tmbez) ién, prov eha la ci udad y di s uta de a i bertad q ue est a e proporciona , sin li mi tar su mov iidad ni sus mo vimie ntos Las alabanzas sobr e a ci udad y e aprov echamie o de u s ventajas se pueden considerar como na táctica de ina y Suher, que según de Certeau ( 1 984 ) es pe rmi te tratar c on e espacio dete rm i ado por a u t ura y a poítica de un gr up o hegemó nico y expotar as oportu iad es de dicho esp acio Y se gú Fraser (  92 ) , eo es ermite crear para sí mismas un espaci púbico ateativo en e qe p uede materiaizar sus identi dades n otras pa abras, esta s so 8. En ete pl u il i:a l ep! O  hbrido ied oncie  s si ls rítas, ud  se ti ne n e uea l rlain s de d er, de gér y lítcas que est s mujeres s e efenta en la via ti diana 237 táctica s de empoderami eno  ue es permi ten ma ni pu ar e espacio hegemónico,  así ade cu aro a sus necesid ades. La i bertad de movi idad  de comportamien to, a posibi idad y a opci ón de es tar en el espacio pú bl ico , de tener ac ceso a direnes ti pos de activi dades de ocio , de trabaj o  cu turaes, o si mpemen te si r a la cae  tomars e u na ta de café si n comp li cacion es, es bri ny de per tenenc ia al es pacio u rbano. da u na sensa de comodidad Hanan con ción rma esto a de ci r ue «siento ue aquí tengo mi espacio; si en to que pertenezco a a ciudad ,  me sient o a mí m isma a quí, y no a í» . Somos concien tes que e  espacio de Gaz a es un a compara ció n extrema, pero Marah también con rma que Barcelona e s su ci udad, y esto como resutado de sus ogros persnaes en a cidad Las opci ones que Bar celona e brindó han men tado su sent im ieno de pertenencia  sus lazos con a ciudad. Estas experiencias espaciaes diversas a vez ouna su derechson o aa espaci p úbmanera ico. en que estas mujeres reivindican Limitaciones nacionales  culturales en el es pacio p úblico A pesar de o que antes hemos mencionado, as narrativas de as mujeres árabes demuestran que aontan imitaciones nacionaes  cuturaes. Por un ado, se enentan a estereotipos  prejuicios respecto a e as y su cu tu ra. Estereotipos como a «Otr edad» , a antítesis d e a culden tu igradas ra occiden segúmbres n l a cua sesocie as repr ta como y a oprimidas por ta, os ho dad,esen como víctimas necesi tadas de i beració n (S harp , 200 9; D ietz  El_Shohoumi, 2007; Khan, 1 998, 2002 ; Brah, 1 996; Amed, 1 982; Said,  978) No es este e caso de las mujeres ue hemos entrevistado, que son de case media y media ata, educadas,  que pueden ser consideradas, reativamnte, como mujeres iberadas. Lina, que vive aquí sola, i ustra en su narrativ a cómo e d iscurs o orientaista casica  y opreores estereotipa a osyvaron es como árabes«Construidas co mo at rasados , agresivos de as mu jeres, a estas mediane a negatividad  e rechazo» (Kahn ,  998 : 465 )  Se gún Li na, e «pa dre» imaginado por e  ind ividuo esp año y reejado en sus preguntas es agresivo y restringe su moviidad  modo de com portarse  y viAquí la gente piensa ue todos os árabes son agresivos en tos    m uchas veces me pr egu ntan «¿ cómo e s ue tu padr e te 238 permite sa r vesti a e ese mo o, y por ué no usas un ? ». (Lin a, 30 años, pae stina de H ai) E veo es un icono exteo sigatvo que estaca y estig matza a as m ujeres árab em usu manas como atras aas, opr m ias y, aemás, percibidas como un grpo homogéneo. En reaiad, a mayoría as mujeres no utiizan veo,9 se nte n entan aeestereoti pos yentrevistaas pr e uicios por se r árabes y, pero mayore a través e pregunts, motivaas por a curiosida o por racismo Las m ujere s ent revs taas que u san veo s e e enan a i mitaciones  su via cotidiana ; por ejempo Am ir, qu e  eva 1 6 años vivien do n Bar eon a y que soo re i en temente omenzó a usa r , reata su experiencia e os es paci os urbanos e es te modo: Nos conpermerca temor  do Tienen d e mírái . Cano estseoyafen a coma iran de  su y ve nmimeo i , am ente erran a s bolso; pensan ue les voy a robar (Amira 36 años, Líbano) Según esta narrativa, todas las mujeres árabes que usan veo son un cuer po sospechoso (K oee y Si monsen, 20   )  H an sdo d rectamen te ident i cadas como la Ot ra sospe chosa, y puestas b ajo la observ n ymuj superv n deangr po hegemón ico sTaes práctica hacen queació est as eres isió se sient incómoda s en esto espacios espe-s cícos, per o no i mpide que re gresen y ti licen los m ismos es pacios Como  rma Ami ra, «Al c on trario, v ove ría a mi smo sitio . .  no me pr eocupa» . Es este u n acto d e resistencia y revin icación e su derecho a ut izar e es pacio de Ba rcelona  Las m ujeres árabes hac en en te a estos e stereoti pos y con dutas, principalmene meae a neg ocia ción e su identiad utu ral. Heba, por ejepo, resata que ea se resiste a o que enomina acismo positivo Expica: Hay iferentes caes de rasmo, está el «racismo positivo>, pero que reamene no es positivo Dicen, «pero ¡tú no eres 9. Cic d la mujr v istaa uan velo. 239 como las marroqu íes, tú eres modea! » s el mi smo ra cism o «no pareces marroquí, pareces moderna»; ¡oh! ¿las marroquíes no son modernas? ¿las marroquíes que usan hiab no son moernas? Co mo muje r m arroquí , debo re sponder a est a clas e e trat ami ento, no sol o por mí mis ma, s in o por otra s marro qu íes que pueden ser si mil ares a mí o n o, y tamb ién para h acer que esa gente piense. (Heba, 43 años, Marruecos) n consecuenc ia, Heba no se ri ne an e este «racismo positivo» y se resiste al estereotipo y los prejuicios del grupo hegemónico responiendo a esos individuos Esto no es solo para reivinicar su identia, sino también para provocar cambios en la rma e pensar del otro grupo.  explicar y responder, estas mujeres no solo s e resisten al poder, sino q ue nego cia n el isc urso ori en talsta por «el signica o y la represen aci ón » (Bhabh a, 1 994: 2 1 1  e sus ienidaes como mujeres árabes, y e esta manera se vuelven a empoderar y molear su s ien tidaes Al mismo tiempo, las mujeres árabes tienen que enentarse con limitaciones sociales y culturales Se considera que la cultura árabe es conservaora y patriarcal (Barakat, 2000; mad, 1994; Abo, 1 987 in cluso en la diáspora, donde especi men te la s mujer es jóvenes que viven con sus pare s con i núan s u ien o restri cciones sociales y culturales en relación a su movilia y comportamieno en el esp acio públ ico. Nabila nació en spaña, e par e pal estino y ma dre española Cua no era m ás joven, ten ía que e nentar se a contraicciones; por una parte a las restricciones de su padre, que ella no comprendía n i aceptaba, y por otra t en ía que compagi narlo con la aaptación a la sociead española/occidental, representaa por sus amigas cuyo comportamiento ella quería imitar lla nos explica esta contrai cción de es ta ma nera: Cuando vivía con mi m il ia  siem pre me sent ía bajo pr esión , «tú eres diferente a tus amigas, y no puedes salir como ellas» y yo preg untaba ¿cuá l es la di ferenci a? Yo qu ie ro sali r como lo hacen ellas. ¿ Por qué mis a migas pueden sal ir y yo no? ¿ Cuál es el pr oblema? (abil a 3 2 años, pale stin a nacida en España) l s ig ni cad o de la movil idad y de la práct ica es pacia l, com o an tes men cio náb amo s, es di ferente en re lugar es y espacios (H an  240 o, 20 l O) . E ese caso , debdo a la s racrísi cas epecíc as/p rvlegadas de ese grupo de imgranes como personas educada s y perenecien es a la clase edia, y debio a la r ans r ac ón d su culura, argumentamos que en el espaco occidenal las liaciones de género y culurales, así como las resrcciones, on remodeladas y reconsrudas, y peraentemene negocia das (Nagar 1 99 8)ls Por lo  n o y secomo lo l usra de Ahlam y de, oras, l miaciones relacona n pri lancnarraiva pal , aun que no exclusvaene, con los iemos y los horarios Veaos su comenar : Yo puedo sali r e cualq uer om eno co n mi s am igas a om ar un café, o i r a co me r co n el la s Pero n o es ace pable qu e vaya a una dscoeca. Es o sgn ica, « puede s sal r a comer c on us am igas, noaños, s lla mas ca da hora para que sepaos dónde es ás» . (Ahl pero am , 22 Líbano) Para lam, que vino a Barc elona co su  m li a cuando enía nueve años y au  vive con su s padres, el sent do de ovil idad en el espacio públ co de la cudad no esá claro y los c ambi os son nego ciabl es. Por lo ta nto exi ste una am bgüedad en cu an to a los espacos permitdos y los prohbidos Alam puede salr con sus amigas a cua ier sti se o que ella qu iera,a pero no puedeEsas r a lajóvenes di scoteeen ca, sobr e todolquporque va muy arde esos espacos que apañárselas con tales restrccioes, para resstir y negocar los dscursos y prácticas ptrarcales ominaes. Nabla se mantuvo rme en su resstenca y aband oó el hogar m lar cuando eía 2 1 año s, para li berars e de las resricc oes de su pd re y com por arse como ella quería Oras, como Ahla , ti enen que nego ciar c on s u m il a ora s tác icas pa ra lograr a yor lberta d y exib lidad e s u movlAlidad por iempo, el esp aco pú ujere blco se ven oblgadas a egociar mso estas con la cu ltu ra local el gru po heg emó o res peco a su entda Ni bal (2 4 años, Si ria) , u a jo ven con estudios que rab aja y que llev a velo , nos il us ra su neg ocació n con el etil o de vida local  Cua ndo ee ue estar en si ios como  ares y dscoec as con alcoh ol «t raa de eviarlos», pero parcpa e aconecmientos de po laboral, aunqu e « e sen a era de l ugar»  24 1 Estas restricciones de a cutura árabe pueden imitar a mo viidad y e comportamieto de las mujeres y as erza a estar en una posición ímite y ambivalente al aontar taes restricciones y que además ha n de compagi nar con la cu tu ra y a hegemon ía de la ciudad occidenta Según Bhabha, esta posición «puede exigir que traduzcas tus princ ipi os, lo s repienses,  os am pl íes» (B habha, 1 90 : 2negociar 1 6) . Deaseste modo el las e t ercer espaciocon , que s perm ite restricciones de crean su cutura y arregarse loseestereotipos y con el modo de vida occidental ocal De esta rma, estas mujeres modean y remoldean sus identidades El sentimiento de pertenencia: el es p acio intermedio  pesar de la libertad de movimiento y de comportamiento que di sutan as m uje res árabes en Barcelona , y la varie dad de opciones y oportun idade s que tiene n en este espacio u rbano/públi co, sus senti mi en tos de pert enenci a y el modo en q ue def nen y r edefnen sus ide nti ades son ambi valenes No son bi narios ni tampoco claros, de alguna manera se «han vuelto consos» (Armstrong, 2004), como lo demuestran las sigu ienes narratvas Sereen, que lleva 25 años viviendo en Barcelona, describe e amb ivale nte s en ti mie nto de pe rtenencia cuando se si túa a sí misma en una «posici ón on teri a e híb rida» ( Koeed y Simo nse n, 200  : 3 5 1 ) . Entiz a su per tenencia a s u na cion alida d (pa estina ) , con todas las di fcu ltades que la ocup ación conl leva A mismo tiempo, afrma su pertenenca a Barcelona como ciudad Ella atribuye ta sen tim iento a di versas raones: e argo perí odo que lleva vivi endo en la ci udad, a li bertad que la ci udad l e pro porciona y el se nt im iento e con rt que experimen ta estando aquí Describe s u sen im iento dual de pertenencia d e a sig uie nte rma: Mi pertenencia está igada a mi tierra de nacimino Pero habiendo vivido en esta ciudad durante largo tiempo, hay un sentim iento de perten encia a lugar    Siento que pertenezo a aquí porque me han acogido, me han tratado bie, se han convertido en mi s amigos, y me han dado i bertad e ide ntidad (Ser een , 44 años, palestina de Nabus) Según B rah ( 1 96  ci tado en Dwy er, 2000) a ide nidad de a diáspora no es fja y estática, y crea una nueva rma de pertenen 242 ia a nuvo saio En onscuncia Suher (3 1 as únz) s den tica coo tunci na pro a mi smo tiempo se sint omo e n csa n Ba rcon a. Est sni rs n casa se or ig in a por habr pa sado sit año s studi ando n a ci udad d onde  tim po juga un pap m portan para sn tirs  art d a ci udad ( Bu tchr 20 1 0) y para podr de sarroar «mi manra de vivir aqu Í. a di ferncia ntre us sentiminos hacia como 1su996) «hogar» s an y su toas sus pr ácti cas cotiBarcona dianas ( Brah y su dond nacionidad snti o d pertnncia a Túnz dond e viv e su mi ia y onde   s rió Estas posicions híbrias rean un nuvo signicado d rtnncia qu s sitúa n dio d dos  turas y d dos ugars y y cosas de a cutura así Suher opta cosas d a cutura españoa tunci na. Niba q u lg ó a Bar cona c on u mi i a cuando tenía trs año r s seárabsiria sint e parte cu t ur (a spañoa)  como de a cutu  Stanto sindeenesta mdio  ambas cutu ras Tin una idntidad mestiza y una utura híbrida os criaron con costumb res y normas d vida si rias y españoas Eso sign ia q ue cua ndo iba a S iria m dec ían qu tenía m uchas costumbres españoas. Me decían qu tenía costumbres sirias pro  m ismo tiem po otras spañoas Con  tiempo nos hemos ido i ntgr and  nr aquí y í ( Niba 24 años Si ia  n rsumen para Kod y Simo nsn 20 0 1 : 345), «prt ncr a más d e un a catgoría im ia amb ivaen cia cont ingncia  ndeterminación» n el caso d estas mujers su posición híbrida gnra un sntimiento  prtnnia intrmdia que da ugar a una nuva rma de rtnncia  idntida Prtneen  su nac ionalidad si n importar cuáno timpo va n aquí y a ismo sienen q ue prten uad emodo Bar eo dbio atisumpo arga ranncia aquí ceny aa augar/ci iberta y  dn via q a ci uad s o ce. Familiardad  conociiento del es p acio p úblico: a construcci ón del sen tii ento de pertenencia La miiariad con os spacios y ugars  uno d os ctores que des arro an e sent im in to y e sntido d prtennia ( Fens tr 243 200 5; Armsr ong, 200; e ac , 2002; de er teau , 1 98 . as mu  eres árab es y su  mi liari dad' co n di renes lu gares y espacis de Barcelon a deter mi an y desarr olla n su senti do de pert enenc ia a esas parte s de la ciudad y a la ciudad en sí mis ma . Sig uiendo el posulado de de Cereau (  84 ), el re petido uso de los e spacios de la ciu dad, como el ve ci ndario en el caso de Rihab, constr uye su sent im ien to de en consecuecia, satisce su reivindicación de alespertenencia espaios y y, lugares: l espacio al que y o sie nto que más pertenezco es mi vecin dario, al vez porque en mis 20 años de vida en Barcelona siempre he vivido aquí. En ese vecindario hay de odo, el transporte es bueo, hay lugar es co mercia les . . . Me siento cómo da y que pertenezco aquí. Tengo ua relación con la gente y voy a dis tintos lugares. Me he amoldado a la ciudad. (Rhab, 8 años, palestia de Amman De acuerdo con la narrativa de Rihab, s sentimiento de per tenencia se ve rtalecido por su miliaridad con el vecinario, dode ha vivido durate 20 años. Moverse por u lugar para las práctic as cotidia nas, hacer las compra s, y ener la m il iaridad con el lugar y la gente que lo habita, hacen que ella se sienta cómoda yconstrucción que perteedelcel alugar luga está r. Como a rma monsen (2008: 1 50 , la vin culada a laSimi liari dad y al m anejo de los códigos locales. Lia sostiene que el conocimiento es una con dic ió para el se nti mie nto de p erteencia , para mov erse por la ci udad y para conocer sus l ugares. in a com enta: Pieso qu e para pertene cer ienes que conocer el lu gar, conocer el len guaje y la hi stori a del l ugar, y conocer el v eci ndar io en el que vive s y sus di ferents sii os. Pare de la pertenencia co nsi ste en c ooc er el l ugar y moverte en él com o lo haces en u país de srcen; de ese modo será también mi país, y es mi país ahora. (Li na, 30 años, pal estina d e H ai Para Al m, el conocer la ciudad , saber «cómo c om unicarte e n ella» y haber utilizado los diferentes espacios durante doce años, le permi te aa nzar su senti mien to de pertenenci a. each (2 002  esa- 244 blece un víncu lo enre per rma tiv idad y prtnenc ia y argu men a que mediae la realización de diversas actividades en u espacio especíco los in divi duos consiguen conectar con el l ugar y sent ir un sentimiento de pertenencia. Sieno u n sei miento de per tenencia a Ba rcelona  sie nto que s oy de aquílas. He vivid en Barcelona qu e en el íbano. Conoz todas onas  y osémás có mo comu nicarme aquí . . . Me sien to má os din ámica en Barcelona stoy acostum brada a la ciuad . . . Vivo auí y conoz co los lugar es e aquí. (Ahlam  2 2 año s Líbano) Para Ahla m la rutin a cotid iana que ac ostum bra a tener en ar celo a es lo qu e hace que se sien ta apegada al lu gar. Como s ugiere Butcher (20 1 0: 25), las prá tic as y relaciones otidianas rutin aria s asguran ientácticas to de pert especícos. n de Certeauu( sent 984),imlas soneenc parteiadea lu la gares vida cotidiana y Segú la experiencia y la prácti ca espacial cotidianas no son una « rut in a gris» y negativa como su gier e Lykogiann i ( 2008  35), sin o que h acen referecia a « térmi nos de consent im iento o re sistencia» . En la narrativa de A hlam y de otras m ujere s ára es la r ut in a y sus p rácti as cotidianas que surgen de su conocimiento del espacio urano contr iuye a arm ar su sentido de pert enencia . Por ejem plo como a Hanyan «Cuando via joc la de menos; añoraños o mipale rutistina na mi rma traajo mi vida cotidiana onecho los niños . . . » (39 de Gaza). Según ionsen (2008), las práctias cotidiana l dominio de los códigos locales y la miliaridad son ctores que dan rma a la ciudad como lugar habitable. Por lo tanto para las mujees áraes la miliaridad on los espacios y los lugares de la ciudad el conocimieno y la rutina cotidiana aanzan su sentimieno de pertenenci a y de ser parte de la ci udad. Conclusiones os cuat conceptos o temas c lave que hemos id enti cado con rma n l «marco conceptual de la compleja y contraditoria experiencia otidiana de las mujeres árabes que viven en el espacio urbano de arcelona. Pr lo tant o este capítulo argumen ta que la in tercone xión 245 cotidiaa de as m ueres árabes denro de otra cutura (a occi denta) es ha supuesto  a tra srmación y reconstru cción de su propia cu tu ra en e con texto de su nueva ubicació (y eo s e ha visto ci tado por su posición priv iegiada d e pertenecer a a case media ata y tener una buea e ducació n)  En otras paab ras su posició híbrida o cupa un tercer espacio de con tradicción y amb ivalecia dode p uede resis tir yacuerdo negociar a moverse comportarse de conpara sus reivindicar necesidadessuyderecho demandas y para reyde nir y remodear sus idet idades y su senti do de perteencia  Es en este tercer espacio dode as mueres pueden medante negociaciones y tácticas crear un espacio de  bertad y de empoderam ie to Por o tato e aáisis de as narrativas de estas mueres y as conexioe s ere os concepto s estud iados demuestra qu e e espac io púbico de Barceona en particular para as mujeres más óvenes y meor es proporciona mayor de moviie to yrmadas ua variedad de opci onesuna cutu raesbertad esp aciaes aborales y de ocio que no tiee en sus ciudades de srcen Recurriendo a Bha ha  1 994, 1 9 90)  Soa  1 996) y otr os M ishra y Sh razi  20 l O; Egsh 2004; Ka  2002 , 1 998) su posición híb rd a es o que ha vorecido  a creaci ó de u n tercer espaci o q ue a su vez es oe ce a poib dad de s acar venta ja de a s oportun dade s ma ipuar el espacio hegeóico y apropiarse de espacios adecuados a sus e cesidades y a sus además optar por uevas posib il idades Al identidades mi smo ti emp o  ncde usopoder e este espacio a muere s árabes han de con tiuar id iando con estrategias de poder naci onales de género y cu t uraes ante las que resste y neg ocia  Ressten y egocian ete a estereotipo hegeónico de grupo dominado y ene a os d iscu rso e imágene s cargados de pre uic os Más au  especa mente a s m uer es m ás tradici onaes o aqueas qu e vie n con sus miias hacen ente a restricciones cuturaes o de géne ro A encontrarse en ua posición híbridaespacio estas restriccioes diferetes, se reconstruyen en e nuevo occidenta yson son coni nuamene n egociad as y resistdas (Nagar 1 998) . Por o tan to media nte a negociación y a re sistenc ia esta s m uere s reconst ruyen sus prácticas espaciaes cotidianas se empoderan y remodean sus identi dades y su se t im iento de p erteenci a Por o ta nto a posición híbrida de as muer s árabes que viven en Barceon a y que actúa en e tercer espacio geera ua nueva rma 246  etenen ia, de ubia ión inemedia y de sen imiento espeto a su  n tidad y s u u ltu a. Ellas entizan s u pertenen ia a su s espetivas  ionalidades (palestinas, neinas y otas), a las que se reeren  o el l ugar en el que han naido y han re ido , y dnd e sus  mi lias en . Tamb ién, desta an su sen im ien o de pert enenia a la i udad de elon a, en elaió n a las opiones y oport un idades que la iuad  poporin a, y a la apaid ad de  rear, mediane la resisteni a y la goiai ón , espaios de li bertad y de empode am ieno. Agradecimientos eseaía agradeer a la poesra Maria Dolors Garia Ramon y a a dotoa Antnia Casellas por sus valiosos omentaios sobe ete rabajo. Refncias bibliorácas N. (87), Fami Wmen and Socal Change i he Midd Et: The Pastinian CaseSh ola rs Press, Toon o. U-GH, L. (198, «Inroution: femiist longings and postolonial oniti ons» , en Abu-Lugh o, L. (ed.) Remaking Princeton Wme Feminism and Moderniy in he Middle E , Uni versi Press,, «Weste Prinet rn onEthno , N. J . , pp. 303 and 2. L. 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Como un efec más de la i mposi ón en las hu man idades y en las cien cias sociae s e perspectivas in vestigadoas an tiesencial istas y reacion ales, como la eoría de Ac tor Red ( Latou, 2 7  20 5; Dom nech y Tirado  998; La w y Has sard, 1 999) y la Teo ía No Represen tacion al (h ri ,  996 27 ; Ander son y Haison, 2 1 0) aguns cuestione s que es taban aje nas a repertor io i nvestigad or dom in an te en gegra fía com o la capac idad de agenci a de lo o hu ma no , e ro activo de la afecivi dad en a con g uraión de los esp aios de vida ctid ian a o  ste t rajo se h a lab rado n  marc d e ls prye s SEJ 200837 es 2001913 Y 209 SGR 1 32 1  El cpítuo re cog i feren es a spe cos  un   ls capíus de mi tesis dora sor la oroversia urana  la paza e Lssps  trbj   ca mpo se ds arrolló r 20   y 2 1 2  incluyend anisis u mn al  obsrv ació sistmti a ca oraí ereist s n prondidad o n 60 rs nas una n sta rs pndi pr tras 4  usuarias d l Bi bi ca Jaum e ster- además d e revista s grpl s y algun teati a más xperimnta q rtendía aborar a remdelaión u ran a t raés de clavs ms perrmtivas A ANT y NR. a primer se l o largo de este trabajo el lctr nonrará os sigas rrspnde c l a ria tu ra d AtrNtw k hry  n castel o  oría l ActorRd la seuna hac rerenci a npreseaioal Thry "ría  rprsentacinal n castean, he ptad pr manener ambas are via turas en i ngés. 25 1 un a n ueva den ic ió n de lo soial que ya no dsignará una r eali dad homo génea si no un t ipo de relación en tr elementos hu manos y n o hu manos  se han hec ho sitio en la disciplin a Un go teo cont in uo de traba jos pro veni en tes nda men tal men te de un iversida des bri tán icas ha actuado como ac elerador del proc eso de m il iarización d e la geog rafía ur bana y cu l ural con un a gama de actores, temátias y perspectivas que, laademás, pensaralejados los artectos urbanos que inéditas caracterin ciudad permitían conemporánea de un marco excesivamente pacicador Las maneras de traar con la arquitectura y el espacio públio propuestas por estas perspectivas comenzaron a gestarse en la búsqueda de alternativas a las insucienias epistemológicas y metodológicas que na serie de geógras próximas o ineresadas por algu na de las m il ias d l postestructuralis mo, la fenomeno logía, el fem inismo , losiden estudios perrmaivo e stud ciencia y tecn ología  ti caron en la p ráctico losmayor itariaiosdede la geo grafía urb ana y cu lt ural de la s décad as de 1 98 0 y 1 99 0. Como advi rtiera Loretta Lees (2001 , la geografía ultural nisecular se había con vertido e n u na discip li na obs esion ada con las r epresenaci ones, aota ndo su agenda in vestig adora a la in terpr etació n y exé gesis de una di mens ión textu al, s im bólica y di scursiva de la realidad que descu idaba s u na tu raleza práctia, en carn ada y afetiva Para Lee s, pero también para otras comotrataban Jenkins (2002) o Jacobs (2006) las perspectivas conautoras venci onaes los artectos urbano s como meros onvidados de piedra, esto es, omo si mples receptáculos o esena rio s estáticos a lo s q ue las geógrafas recu rríamos para i lust rar otro tipo de fenómenos que considerábamos como lo realmene importante De es te modo, las edi aiones y en general el esacio constru ido podí an ser abord adas como señal , sínto ma o epi fenóme no de algún tipo de política urbana un proc eso de eli tizac ió n, una m uest ra más de la apr opiaión apita lista de l a iudad , una evidenia de una pol ít ica públ ia r egenradora , o como un asu nto de morlogía urbana en la línea de la polémica generada con la apari ción de ras caielos en e l ente m aríti mo de Bar celona o la co nt roversia de las plaza s du ras, re stri ngié ndose e xcesivam en t e sus posi bi lidades de estudi o a la per cepci ón  Algo pareci do sucedí a en el aso de los espaios públicos más habituales del repertorio 252   g eogra í h um an , coo pazs, parques o aes. Si bi n a graf ía cu en a co un am p io bag aje e n e an á is is de prácicas, os, apropiacio nes y fenó menos de inc usió n/excus ión omo riaion es mú l ipe s de der eho a a i udad  as apora cio nes  la ANT y a NR resua muy úies pra probemaizar el enio en e que se ha maenido a buena pare de mundo o u mano o «m (200 ásque5),hWhamor umano» en esas xpia cines. Geó mo L orimer e (2006) o el pr opio Thri ( gra  996) s han defendido a urgenia de uilizar ua noción de socia más ore con a defendida por a N, que permiiese icorporar s agencias no humanas a esudio de esos mundos en común ñaads más arri ba. Pero, demás de un proeso de rovación medoógica que reenía si uar el énsis de la in vesig ació en una di mes ión co odirepresea an a, a feciva, e ncarnada prácia de auora a espa scia liad amién eso es, cio na los rayajos de esas y au ores nrañaban una pronda revisió conepua que preendía huir e uso de concep os subsanciales y esenciaisas. En ese seido , caegorías de anáisis ndamenales como e espacio púbico comenz aron a pens arse, en si no nía on os posulados de a ANT, de man era má h eerog éne a, ab ier a y perrma i va. Es aí como s urge nocioes como big thingy buiing ev (Jaco s, 2006; Rose e a. , 0a 1 0;, 201 LeesO;y Anerson Baxer, 20y1 McFarane, 1  , o ensambla ( aría, 20 1 O ; Rose  201je1),ubano recursos conepuales on os que se inen a esqui var a carg esencia lis a y norm aiv a de na ermin oogí cuy a poencia he urísic a se veía uesionad a a a hora de dar cuena de un mundo cada vez más híbrido y diso en e que os f enó men os esudi ados o acababan de encajr en el marco pu ri cador de as ca egorías moderna s. Es afán de revisión concepua revela a sacudia qe os an eamin os alíicos y los pri nci pios meodoógic os de a AN provaron en la pri me década e 2 000 en a geograía urba na y cu  ura . as caracerísicas m ás idi osi ncrási cas de esa pers peciva, a sabr, e agnosicmo onogio (Ca o , 1 995 ) ue nie g que os obje os de esud io engan u na esencia subsancia o que exisan men os auoevidents ue no requiern xpl iación e pincio e simería geealizd(Ca on, 1 99 5; La our , 20 07) ue impic a a aboi ci ón de a ógica dicoó mica como m anera de abordar  a rea 253 lia en nc ió n e los ual ismo s traic ion ales nat uralezasociedad sujet o/obeto, m iro/m acro , h umano/ no hum ano, loa l/globa l y la premisa de la hetergeneid(Law, 1 98 7; Do mnech y Tirado,  998 ) ue consi dera que aquello que r ealm en te caracteriza a las entdades que estudiamos es la heterogeneiad que las constituye y posibil ita  eron s edimen táno se en un a n ueva sensib il da geográcarioIncorporando principios de un( Lees, vocabula paci cador, laestos geogra fía crítcy aprescndiendo de la arqu tectura 200 l , Jacobs, 2006) cons iera que las posi bi liade s de explicación se austan más a la c om plej iad e los objetos. En tre las im plicaci ones más evidentes de este gi ro esencial ista me gustarí a es tacar el im pacto que el prin cipi o de agnosticismo generó en la propia conceptualización de los artectos urbanos Con una m rada agnóstica estos y a n o serán abor ados com o obje tos sóloios , otados eauna enti a en mayor me nos med a, nt ici paba el tipo oesencia e fenóprejada menos y que, actores con los que no s encon trar íamos  Al con trar o y tal como explic an Rose et al ( 20 1 0)  el reto ontológico que plantea la ANT consdera que en vez  e ent dades autoe vid entes, el espa cio públ ico y la arquitectura eben ser entendios como efectos relacionales de un e ntramado e elementos heterog éneos materiales, prácticas, d scursos, etc , cu yas lógicas d e asocació n eben ser objeto e nterés investigador. L pla de Lesseps Aemás de un espacio polémico y un lugar central e la ciua, Lesseps es una enc rucj aa histó rica de B arcelona en l a que con uyen barrios, calles, avendas, iferentes moos e transporte colectivo y, también , una e la s artera s viarias más relev an tes de la ci uad La plaza está situaa territorialmente ambiguo onterizo de la parte en altaundeentorno Barcelona, donde barrios densosyy com pactos se encu en tran co n un a trama urbana más deshi lachaa, y una topografía más abrupta en la que se asientan algunos de los barros costruidos en el pie de monte de la sierra de Collserola (Mapa l). Pero, más allá e su comple jiad territorial , en el i maginario colectiv o e Bar celona, Lesseps rem te sn sol uci ón de conti nu idad, 2 54  dd a dada d 1 9402- a n i d   i d itrvi  controvertida, obra prmátia y tizn, rundo astar, proteta vcin y ruid mdiáti. Eto mno an ayudado a abrar a imagen de n epai caracterizad por n a ert  de tai sm bano, u ugar n  que a p rpción d n rhacrs tan on in o com i nct rmita a u n ta do d provisinaidad aido itbiidad rpeta i mbóia q  s ha c rn sobr e te moróia, es pacio tiioa  particuar gistro n as uatro rmaizins q a paza onoció  o ú ti mo cin añ s, un perío do n e que s p  rveó omo u na dra n e zapat d a agnda urana d Barcoa, una surt  mit  u punto oscuro d un odo qu no ha sabi co i i ar d ma ra satitori a as ne idads d  tráfo roda do o ro tipo d rposabiidades uranas como  spacio vecina  omu tarioest ar go y poémico hi storia urbantic, n as si D ni todo uint págias aordaré soamte agun avatare asoiados a u pro eso e rm odeació n má rci e . Una rerm a urban a aco  tida e a pri mra éada  te igo e in scri ta e una etra tgia  u cipa e r oqu ia urba ( Borja , 2 0 1 O) q pr etdí a crrar lg unas  a s hri das q e e uba ismo anqu ista haía i igido n a ciudad, y d cuyo mustrario, Lessps costtuía uo e sus ayores despropóitos. La prop uta vndra d c urso de proy cto abo rada or  estudio de ar qu itct Ab rt Viapaa  qu  ayuntam ino rsetarí a  2 1 de enr o de 2002 s  ncró co u  rotu d e inesprado r hazo vci a. La preió  as mvi izacio ns obi garn  ayun tami n to a ponr  proy to e uarn ta, estabcr ng oiaci on co n s vin o y patar di rnt in ii ativa d  partici pa ión qu c ond ujero a u a df ición coabor ativa d os ritrio  u dbra  rgir a r u tánamnt, mo part taa misma act uació n,  ayrm unam. Siint dc id ió v an tar n b d ib ioec 2. l a 1 96 la i